𝑉𝑒𝑖𝑛𝑡𝑖𝑡𝑟𝑒𝑠

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                        Sunhee;

El auto se detuvo frente al gran edificio en el que vivía Taehyung. Observo por el espejo retrovisor como Taehyung apaga el cigarro y luego se quita el cinturón de seguridad y toma la manija de la puerta para bajarse.

—¿Estará bien solo? —pregunto mirándolo por el espejo retrovisor.

Él se detiene y me observa también por este.
—¿Crees que tambien van a intentar entrar a mi casa?.

—¿Por qué no? —dije yo.

El frunció su ceño y humedeció sus labios. —Buenas noches.

Se baja y presiono mis labios. Yo también abro la puerta de mi lado y me bajo.
Cuando el rodea el auto, me observa en seguida al parecer confundido.
—¿Que pasa?.

—Le hare compañía —me ofrecí.

El alzó una ceja. —No es necesario.

—No importa. No tengo sueño. Y usted es el director. Su bienestar es mi principal prioridad —dije falsamente y comencé a caminar. Miré de reojo viendo como el se me quedaba viendo sin entender—. ¿Se va a quedar ahí parado?.

Cuando pasamos por delante de la recepción la chica detrás de esta, fue toda sonrisa con Taehyung pero a mi me puso la cara más amargada que había visto en toda mi vida.

—¿Tuvo alguna...relación con la recepcionista? —le pregunto a él una vez que estabamos subiendo en el elevador.

El me mira en seguida —Claro que no.

—¿En serio? —me hice la sorprendida—. Entonces deberia pedirle que dejase de hacer caras. Es la recepcionista de un edificio. Debería recibir con mejor rostro a los invitados.

El alzó una ceja viéndome. —No le agradarás.

—Ni siquiera se quien es. ¿Seguro que no es su ex?.

El rodó los ojos y negó viendo hacia otro lado.
En cortos minutos el ascensor volvió a abrirse y estabamos en su pent house. Pent house que aunque viese diez mil veces no me cansaría de repetir que era hermoso y que la decoración y diseño era increíblemente perfecto. Entré a este y mientras miraba la preciosa vista a través del cristal, Taehyung se dirigió a la barra donde dejó las llaves y continuamente se dirigió hacia unos estantes en la cocina.

—¿Que quieres tomar? —pregunta él y dejo de mirar la preciosa vista para girarme a verlo.

—¿Whisky?.

—¿Te gusta el whisky?

—Mhm. ¿A usted no? —me acerco hacia la barra y tomo asiento en uno de los taburetes. Coloco encima de mis piernas la cartera.

—No me gusta mucho. Prefiero el vino —dice sacando la botella de vino. Y también la de whisky—. ¿Con hielo?.

Asentí y el dejó las botellas encima de la barra para girarse en busca del hielo. Apoyé mis brazos encima de la barra apoyando mi mentón encima de las palmas de mi mano. Observé nuevamente los dibujos de Vante. Sintiendo estos vagamente conocidos. Sentía realmente que los había visto ya hace tiempo.
Pero era extraño. No conocí a Taehyung hasta ahora así que...

—¿Desde cuando dibuja? —le pregunto.

Él se gira terminando y se pone frente a mi. Solo separados por la barra. Sube las mangas de su camisa y me es inevitable observar sus brazos, sus manos y dedos.

—Desde pequeño —responde virtiendo un poco de whisky en un vaso y luego cogiendo los hielos.

—¿Pero siempre dibujó de esa...forma? —pregunte curiosa.

Straight to you |𝐓𝐚𝐞𝐡𝐲𝐮𝐧𝐠 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora