Si, lo sé! Te estás esforzando mucho para no rendirte, todos los días te levantas de esa cama en la cuál por lo general no te querés mover ya que tus ganas se esfumaron.
En alguna parte dentro de ti, puedo notar que no querés seguir escuchando a la gente decirte, cómo debes tomar las cosas o que te repitan una y mil veces.
Que todo va a estar bien, cuando no lo está te está costando demasiado no reaccionar mal con las personas, cada vez que te quieran atacar pero ya no lo aguantas más.
Lo único que menos querés es ser comprensible con alguien, cuando nadie lo es contigo, te cuesta decir que estás bien cuando la realidad es que la noche.
Anterior lloraste hasta las tres de la madrugada, te está costando sonreír para evitar tener que dar explicaciones de por que tenés mala cara o mal humor.
Te cuesta maquillarte o arreglarte para que nadie pregunté, por qué te vez tan pálida? O te digan, por que tenés tantas ojeras en los ojos? Si tan solo supieran!
Que el sueño te abandona y el insomnio toma posesión de vos por completo para que no duermas ni descanses, te cuesta decir que no te afecto nada.
El que no allá funcionado las cosas con esa persona de la cuál te enamoraste, pero que rompió tu corazón, te cuesta admitir que estás muy triste por dentro.
Y que ya no sabes que hacer para sentirte mejor, además de poder lograr descansar en las noches, por qué será que nos cuesta tanto pedir ayuda cuando ya no podemos más?
La respuesta es muy sencilla, porque pensamos que nadie nos puede entender y que mucho menos pueden ayudarnos pero, hay personas que son capaces de sanarte.
Con tan solo un abrazo, solo que nos cuesta encontrarlas, entiendo todo lo que estás pasando porque a mí también me cuesta, por eso se lo que te estás esforzando.
NOS CUESTA ACEPTAR QUE A VECES NECESITAMOS AYUDA...
ESTÁS LEYENDO
Writings of the heart
PoetryEl arte de poder expresar los pensamientos, los sentimientos y el dolor pueden conventirse en los más esfimero que una persona puede tener.