JAKEHOON 🌻
Omegaverse
Dos pequeños cachorritos prometen compartir el resto de su vida juntos.
"Cuando nos presentemos en sociedad como alfa y omega, te prometo que te marcaré para que seas mío por siempre mi pequeño girasol"
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Los ojos de sus padres Jackson y Jinyoung se iluminan al ver la enorme sonrisa que se dibuja en sus labios, desesperado, Sunghoon corre hacia la comodidad y privacidad de su habitación, no puede aguantar la emoción pues el momento que tanto anhelaba ha llegado.
Cuatro largos días han pasado desde que "su Cachorrito" entró en estado de celo por primera vez y se "presentó en sociedad" como omega, poder ver su foto de contacto en la pantalla de su teléfono se siente como recibir el regalo por el que más ha esperado.
"Uno, dos, tres", hace un conteo regresivo respirando profundo y tratando de mantener la calma antes de responder a la videollamada de su amado Jaeyoon.
—¡Mi Hoonie! —El dulce chillido de "su Cachorrito" y la encantadora sonrisa del australiano terminan por tranquilizarlo y reconfortarlo por completo.
Sus ojitos cansados y el rubor en sus mejillas le hacen entender que ha tenido días difíciles y que, a pesar del gran cambio biológico que ha sufrido, al que todos consideran como el primer paso a una vida adulta, aún así conserva la dulzura e inocencia que conoció desde su primer encuentro cuando apenas eran unos niños de seis años.
—Mi Cachorrito ¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo? ¿Tienes molestias? ¿Necesitas algo? No tienes la menor idea de cuanta falta me haces, te extraño demasiado. —Le dice tratando de contener el aire.
Jaeyoon sonríe enternecido al ver la preocupación en el rostro de "su Hoonie" y al escuchar su bombardeo de interrogantes que como siempre, se centran en su persona y en su bienestar.
Pues Sunghoon lo ha demostrado desde que era un pequeño niño de seis años, Jaeyoon es y será su prioridad, si "su Cachorrito" está feliz, Sunghoon también lo estará.
—Me siento mucho mejor mi Hoonie, mi papito Seokjin está seguro de que mis días de celo ya terminaron, hoy me quedé en casa para recuperar fuerzas, ya no siento ninguna molestia y lo que más necesitaba era hablar contigo y poder verte aunque sea sólo a través de una pantalla. ¿Tú cómo estás? ¿Qué tal la escuela? También me haces mucha falta y te extrañé demasiado, lamento mucho no haber podido responder tus mensajes y tus llamadas.
— No te preocupes por eso mi Cachorrito, entiendo perfectamente, han sido días muy difíciles estando lejos de tu lado, pero intenté ser fuerte y mantenerme tranquilo para poder ayudarte a pesar de la distancia.
—Y lo hiciste, lo pude sentir, fue inexplicable mi Hoonie, pero te sentí conmigo a cada instante, sentí tu tranquilidad, sentí que pensabas en mí así como yo te tuve presente en cada instante.
—Y yo pude sentirte también mi Cachorrito, te siento a mi lado y cada vez ese sentimiento es más intenso y más real, es como lo explican nuestros padres, nuestro vínculo se hace cada vez más fuerte. ¿Cuándo podemos vernos? Ya no quiero pasar mis días sin poder tenerte a mi lado.
—Mañana, la ginecóloga me dijo que ya puedo retomar mis actividades mañana.
