Entre tu y yo (Bruno Mars y tu)

6 ¿Helado?(1)

-Bien princesa, supongo que te llevo a tu casa, ¿cierto?- Me pregunto Bruno, aunque el ya sabia la respuesta.
-Lo sabes.
- Bien. ¿Quieres ir por un helado antes?
-Por Dios Bruno. ¿Aún puedes comer helado después de haber comido todo eso? ¿Acaso Bernie no hace de comer en tu casa?- Bernie era de las personas que cuando te sirve de comer te sirve hasta que ya no puedes comer mas, por una semana completa. Es raro que Bruno se porte así ahora. Cuando va a mi casa, que es casi todo el tiempo, no come tanto, o tal vez nunca le ponía atención.
- _____(Tn) siempre tengo espacio para helado- Me dijo Bruno con un tono serio, pero aún así conservaba su sonrisa. ¿Una cálida sonrisa, porque Darcy lo dejo? No puede existir nadie mejor que Bruno. Darcy es una completa idiota.
No tenía nada contra ella, ahora si lo tengo. Haber puesto a Bruno tan mal, hacerlo llorar, hacer que borrara su hermosa sonrisa de su tan lindo rostro, eso NADIE lo volverá a hacer. Y si pasara de nuevo, bueno tal vez sabría que nadie se debe meter con ____(Tn) ____(Tap)
- No se porque si te creo- dije entre risas.
Bruno tomo mi mano, haciendo que lo siguiera fuera del TacoBell que estaba dentro del centro comercial en el área de comidas, dentro de esta área se encontraba un lindo lugar de helados y malteadas, tenía un tema de los 50, todo en aquel lugar tenía esa decoración. Uno de mis lugares favoritos. Bruno iba a un lado mío, sosteniendo mi mano con una gran sonrisa en el rosto ¿Que lo hacia tan feliz?
- ¿Y bien? ¿Helado o malteada?- Me pregunto muy feliz.
- Malteada de galleta, con crema y chispas de chocolate, mediano. - Dije muy rápido con una sonrisa, era lo que siempre pedía en ese lugar.
-Muy bien. ¿Algo mas?
-No... ¿Y tu?
-Un helado. - Bruno y yo íbamos hablando de que tan asombroso fue el hombre que invento el helado. Cruzamos la puerta de madera pintada de un color rojo potente, he entrado a ese lugar unas 100 veces y nunca me canso de ese increíble lugar.
Nev's cream & chocolate factory Bruno abrió la puerta y me dejo entrar primero, definitivamente un caballero. Fuimos hasta la pequeña fila para poder ordenar. Duramos en ella menos de 5 minutos.
- Hola, cariño ¿que vas a querer el día de hoy? -Le dijo muy amablemente a Bruno, como si yo fuera invisible.
-Para mi un helado de galletas y chocolates grande, y para la linda señorita una malteada de galleta, con crema y chispas de chocolate, mediano. - Bruno giro su cabeza para verme y me dedico una hermosa sonrisa.
- ¿Solo eso?- Interrumpió la señorita de la caja.
- Si, gracias. - Le respondí.
-Esta bien, serán 24 dólares.- Bruno le dio 25 dólares, yo quería pagar mi parte pero el se negó.- En un momento les entregó su orden.

Bruno me pregunto donde me quería sentar, y yo elegí mi lugar favorito en este local. Mi pequeño espacio en una esquina junto a la ventana. Ese lugar era lo suficientemente grande para 4 personas se puedan sentar cómodamente. Yo me senté, seguido de esto Bruno se sentó justo enfrente mío.
-Buena elección, yo solo eh entrado a este local una vez.
- No puede ser! Mars, te has perdido de mucho.
- ¿Te digo lo peor? -asentí- esas veces en las que entre, no compre ni helado, ni malteadas.- abrí ligeramente mi boca con un aire de asombro.
Le golpee ligeramente el hombro.
-No puede ser! Dime que estas jugando!
-Nop- Dijo algo divertido.
Estaba apunto de decir algo pero la señorita de la caja nos interrumpió.
- Aquí esta su orden. -Nos informó mientras me entregaba mi recipiente con mi malteada dentro y a Bruno su recipiente en forma de plato con su helado.- Es muy lindo que acompañes a tu hermana- Decía mirando a Bruno. -Tienes suerte de tener un hermano tan lindo. -Dijo esta vez dirigiéndose a mi.
- Oh cariño, no es mi hermano. -Le dije con una falsa sonrisa.
- ¿Primos?
Bruno tomo mis manos. Y le dio una sonrisa.
- De hecho no, ella es mi novia, mi linda novia -Soltó un suspiro- Se siente tan bien decirlo.
Al decir eso Bruno la señorita se sorprendió, al igual que yo pero trate de ocultarlo.
-Oh...bien. Mi nombre es Lucy, si necesitan algo mas no duden en llamarme.- Lucy siguió con el protocolo especial para los clientes, nos dio una falsa sonrisa, ¿cómo se que es falsa? Por Dios no soy tonta, esa sonrisa era mas falsa que su feo cabello "rubio" no era un cabello rubio, era solo un horrendo cabello amarillo. Se alejo, y fue cuando Bruno decidió hablar.
-Lo siento.
-¿Porque?- Le pregunte curiosa mientras llevaba la pajilla de mi malteada a mi boca para disfrutar el increíble sabor de esta.
-Por decir que éramos novios. Te juro que tengo una buena excusa, y por favor te lo pido, no le cuentes a Joe, porque si le dices me...
-No hay problema, no le diré a Joe, y realmente me gustaría escuchar tu excusa. -Lo interrumpí, el me dio otra de sus únicas sonrisas.
-Bueno, yo conozco a esa chica, era mi vecina hace 4 años, Lucy Grove, ella siempre me molestaba, se sentaba en la entrada de mi casa esperando a que yo saliera solo para decirme lo mismo
"Hola Bruno, hoy no tengo nada que hacer, ¿te parece ir a... Nose al cine?" Lo mismo todos los días.
- ¿Y tu que le respondías?- Le pregunte con cierto interés.
-Le decía que mis padres me tenían prohibido el cine, aunque un día la encontré en el cine -Paro por un momento mirando al vacío.- Fue el verano de las muletas.
-Pero tu le dijiste a Joe que te caíste de las escaleras.
- Lo que pasa es que a Joe le gustaba Lucy, si le decía eso realmente se molestaría conmigo.
- Espera.... Ya la recuerdo...si... Lucy Grove... Estaba en mi clase en tercer año, siempre quiso ser la niña perfecta de la clase. Si ya la recuerdo.
- Ya cuéntame, ¿que fue lo que te hizo?
- Esta bien, para empezar ella es amiga de Darcy.
-¿Que paso entre tu y Darcy?
-¿No lo sabes? Valla tonta, no se atrevió a decirle...- susurre para mi misma, estoy segura de que Bruno lo escucho. - Hace 2 año, ella robo a mi novio, espero a que me alejara de el, y en menos de 5 minutos lo estaba besando dejando a mi pobre novio sin respiración. Ella sola se humillo, pero después lo volvió a buscar, hasta que finalmente obtuvo la respuesta de el, el le regreso el beso CON gusto, y me dejo.
Me dejo por otra "mejor"¿puedes creerlo?. 4 meses después encontró a alguien mejor que mi exnovio. Tu. Lo atrajo con su encanto falso, haciendo que terminara con su agradable novia. Se hicieron novios, ahora termino contigo, escuche que el mariscal del equipo la invito a salir, y ella cree que ah encontrado a alguien mejor, si que se equivoca- lo ultimo lo dije en voz baja.
- Woow.. Eso... Eso no lo sabia. Lo siento.
- realmente no importa paso hace mucho, y bueno pienso que si el me dejo por la primera perra que apareció, el no me quería. Yo se que nunca llego a tenerme un poco de respeto y solo me pidió ser su novia para subir su popularidad, sabes... Si se sale con un miembro del equipo de porristas te conocerán los demás, por lo tanto lo ayudaba.
- No quiero ser grosero, pero es un inútil! No tiene derecho a tratarte así, es decir tu eres una persona muy linda, y.. Talentosa, muy inteligente - el decía cosas lindas mías, la mayoría eran inventos de el pero era lindo escuchar sus inventos.- Eres hermosa.
-Bruno... Yo no soy hermosa.
- ¿Porque no me crees? Cualquier persona diría lo mismo. Tu eres jodidamente hermosa. Dime ¿porque nunca me crees? Tu eres increíble. Justo como eres.
Por algún motivo mis ojos se mojaron, baje la cabeza, para evitar que Bruno los viera, la primera lagrima salió, pero la limpie antes de que resbalara por mi mejilla.
Estas horas que las pase junto a Bruno me di cuenta de que él podía ser muy dulce y sensible, aunque parezca que es el hombre mas frío del mundo, y justo en ese momento me hizo pensar que yo en verdad era hermosa, al menos 10 minutos. ¿Quién iba a pensar que un día tan malo iba a resultar tan maravilloso?
- No- no lose. Yo simplemente... No puedo.- Mi voz era suave, y baja.
- Tal vez algún día me quieras contar, pero, hermosa,por favor sonríe, que eres aun mas hermosa con tu sonrisa, ¿quiere oír un secreto?
- Si me dices ya no será un secreto.
- Lose, pero quiero que lo sepas.
-Esta bien, ¿cual es tu secreto?
- Lo mejor de mi día fue poder ver tu hermosa sonrisa, poder verte, el hecho de estar aquí, contigo.
- Y ahora se que fue lo mejor de mi día.
Bruno sonrío y metió a su boca la ultima porción de helado. A mi me quedaba un poco menos de la mitad de mi malteada, metí la pajilla en mi boca, mientras yo lo tomaba Bruno me veía a los ojos. Eso me intimidaba. El me ponía nerviosa, nunca se sabe que que dirá, o hará.
Mi teléfono empezó a sonar, estaba sobre la mesa, cuando comenzó a sonar note que Bruno se exaltó.