los amiguitos de papi!

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No todo era muy sencillo en esta vida, y lo que le ocurría a Choi Soobin en este momento era de todo menos agradable.
Se encontraba en un restaurante acompañado de sus 2 amigos más cercanos, comiendo y conversando sobre sus vidas privadas.

Todo iba bien hasta que sus compañeros comenzaron a preguntar sobre su esposo, diciéndole que desde el día de la boda no lo había vuelto a ver, y que querían visitarlo, ya que entre ellos era costumbre visitar a las parejas de sus amigos para saber cómo se encontraban y conservar una buena amistad.

Soobin sin problema dejaría que ellos fueran a su casa y que estuvieran con el y con Beomgyu, pero ahorita su niño se sentía chiquito, y si por el fuera, llevaba a sus amigos a su hogar, pero siempre le pedía consentimiento a su esposo sobre quien podía conocerlo en se estado chiquito y quien no, por respeto hacia el y sobre todo su comodidad.

Se relajo un poco cuando recordó una conversación con Beom donde le dijo que si el creía que las personas no lo tratarían mal que estaba bien no preguntarle sobre si podían conocerlo cuando era de menor edad.

-Podemos ir a ver hoy a tu esposo? - preguntaba Ling mientras comía un poco más de su ensalada.

-Si y le llevaremos una botella de vino- hablaba un pelinegro de nombre Seongi

Soobin soltó la carcajada y dio un suave golpe en la espalda de su amigo.
-Cuantas veces debo decirte Seongi que mi esposo casi nunca bebe alcohol? - preguntaba Choi sonriente.

Shin Seongi solo se río por lo bajo avergonzado por olvidar ese detalle nuevamente.

-Entonces que le llevamos? Tu dinos que le gusta y lo compraremos- decía Ling Renqi

-Claro, lo que sea- correspondió Shin.

Soobin sonreía viendo el pulcro mantel de la mesa divagando en sus pensamientos...
"Si en verdad quieren hacerlo feliz por como se encuentra ahora deberían comprarle un gran paquete de galletas y un biberón lleno de leche caliente, con eso será más que suficiente"

Después de pensar solo sonrió mirandolos, para porfin hablar.

-Dulces, llevenle dulces, con eso será más que suficiente, pero que sean gomitas suaves o paletas, dulces pequeños no- respondió recordando que su chiquito se podía ahogar con las cosas pequeñas si no estaba vigilado, era mejor prevenir.

-Claro que si, Ling comprara las paletas y yo las gomitas- hablaba Shin.

-Entonces nos vemos en mi casa dentro de un rato, necesito irme- dijo Soobin un poco apresurado tomando su saco de la silla y dejando unos billetes sobre la mesa.

Sus amigos lo miraron de forma extraña y después solo rieron, a veces Soobin era muy peculiar.

Choi subió a su auto marcando por telefono a su cuñado.

El cual contestó unos segundos después.

-Hola Hannie, estas con mi niño no es así? - pregunto.

-Claro que si Choi, estamos viendo Molang en mi habitación- respondió Jisung feliz.

-¿Cuántos años tiene hoy? Es que no lo ví por la mañana al despertar-
Seguía hablando concentrado en el frente.

A Han se le hizo rara la pregunta sin embargo respondió.

-Tiene 3 Soo, por qué preguntas? -
-Mis amigos llegaran en un rato, quieren ver a Beomye y acepte que vinieran pero a veces mi príncipe esta muy chiquito y me preocupaba, sabes que cuando es muy pequeño se porta muy diferente-

-Lo se Choi, en ese caso lo bañare y arreglare- una vez dijo eso colgó de forma apresurada el teléfono y se volteo hacia el bebé que tenía a un lado, para informarle que el baño con la Laguna de patitos y los señores juguetes se adelantaría un poco ese día.

𝕠𝕤𝕚𝕥𝕠 bebé! TXT  𝒍𝒊𝒕𝒕𝒍𝒆 𝑺𝒑𝒂𝒄𝒆! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora