palabras!

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Jisung reposaba sobre un sillón de la Sala mientras tenía a un bebé ya conocido apretando su ropa con las manitas.

Han estaba a nada de quedarse dormido, estaba demasiado cansado por todo lo que había hecho por la mañana con el bebé, a pesar de ser fin de semana, sus cuñados y su novio tuvieron que trabajar por exceso de papeleo y contratos que aún no culminaban, dejándolo solo de nuevo con el bebé y el personal de servicio.

La lista era larga, beomye ese día no tenía 4 añitos como era costumbre, sino 3 o algo así creía Han, por el comportamiento se podía saber que era pequeñito, tal como una abejita.

Primero que su pedacito de cielo se haya levantado a las 7 a.m. con lagrimitas en los ojos diciendo que solo quería a su papi y a nadie más no era nada bueno, sobre todo porque soobin volvería hasta las 9 o 10 de la noche dependiendo de como estuviera los accionistas en cuestión de humor.

También había tenido que prepar dos biberones ya que ese día beomye pancita grande había vuelto con todas sus fuerzas.

Más el gran capítulo de terror con los monstruitos que había sentido Han que lo atormentaban gracias a no encontrar el Chupete favorito del niño en 15 minutos ya que no quería aceptar los demás.

Todo tuvo solución al cantar la ya conocida canción que Sung se había inventado especialmente para el bebé.

"Había una arañita sentada en un rincón, ella era pequeña como una flor, todos sus amigos amaban su color y la arañita muy pequeña feliz sonrio"

Tras cantarla unas buenas 4 veces con los soniditos que hacia el bebé donde daba a entender que cantaba a pesar de que no se le entendía nada más que balbuceos.

-Pastelito... - susurro despacio Jisung tocando el cabello del menor, el cual seguía aferrado como nutria.

Sin obtener respuesta, pensaba seriamente en rendirse, hasta que le llegó una idea fantástica.

-Podríamos ir tu y yo tomados de las manitos a un centro comercial, comer helado y tal vez comprar nuevos broches para tu pelito... - volvió a susurrar viendo la cara del bebé, este inmediatamente sonrió complacido levantándose con más ánimo tomando la cara de su Sungie y dándole un beso de babita en una de sus preciosas mejillas.

-Es un si? - preguntaba dudoso, los besitos significaban un si o un no?

-Sungie- murmuro el jovencito dando otro beso en la otra mejilla de Jisung.

-Lo tomaré como un si, amor- murmuro levantándose y subiendo las escaleras de la mano con su chiquito concuño.

-Te amo sungie- susurro el niño mientras se aferraba más fuerte a la otra manita, sintiendo sus mejillas calientitas por decir cosas que le daban vergüenzita.

Y vaya que el corazón de Jisung se aceleraba con emoción cada vez que el pequeñito le decía eso, porque demostraba que el niño lo amaba incondicionalmente, y que un bebé te ame es tener el mayor trofeo en el mundo.

-Yo también te amo mucho mi cielo- respondió acariciando despacito el dorso de la mano del contrario viendo como de sus labios brotaba una sonrisita pequeña llena de comodidad.

El cambio fue rápido, un pans gris, tenis sutiles blancos, una playera de manga larga a tonos verdes y encima un suéter gris que tenía un dinosaurio verde.

Debía cuidar a su pequeño del frío o el monstruito de los moquitos se lo comería vivo con todo y zapatitos.

-Ya está! - gritaba emocionado viendo lo hermoso que se miraba su concuño.

Lo subió al siento del copiloto poniendo su cinturón son delicadeza y manejando hacia un centro comercial cercano.

Minutos después aparcó en un sitio cercano a la entrada, bajando de la mano con el muchacho emocionado y feliz por haber logrado de forma exitosa que el pequeño se calmara y logrará dejar de estar tan triste por la ausencia de Choi Soobin mejor conocido como "papi".

-De que quieres tu helado beomye? " -
Ladeo la cabeza para verlo de reojo.

-Fresa!- decía emocionado por haber logrado expresarse, tal vez así sungie pensaría que él era muy inteligente y me daría un besito, y ese era el mejor premio en todo el planeta.

Jisung solo sonrió orgulloso, se sentía orgulloso por el siemple hecho de que respirara por esa preciosa naricita que tenía.

Llegando despacito  a la heladería los recibió un joven con una sonrisa tierna.

-¿Qué van a ordenar?- pronuncio mientras tecleaba sobre una pequeña computadora.

-Dos helados sencillos, uno de fresa y uno de chocolate- sonrió estirándose para sacra su billetera mirando como el chico registraba el pedido sobre la computadora.

Pago en efectivo saliendo con el niño que explotaba de felicidad por tener su prometido helado en las manitas.

Jisung procuraba que no se ensuciara ya que beomgyu siempre procuraba hacer las cosas bien, pero las manitas no querían cooperar con la difícil tarea llamada "como heladito de fresa y no fallar en el intento" !

-Quiero de ese, solo un poquito lo prometo- decía Choi estirando la manito señalando el helado de jisung y hablando correctamente por primera vez en el día!

Han ahora entendía a que se referían las personas al describir la paternidad, si tu bebé quería un poquito de algo tal vez debías dárselo, y así podrías mirar una hermosa sonrisa en agradecimiento.

-Si amor- mientras tomaba un poco de su helado reía al ver a boemgyu mirándolo fijamente esperando pacientemente por probar "solo un poquito" tal y como lo había prometido.

Delicadamente metió una cucharada llena de helado de chocolate en la boca de su pequeño cuñado, viendo como este sonreía con emoción al sentir otro sabor diferente al suyo.

-El helado de fresa café es muy rico sungie!- externo feliz por probar el helado de su Sungie el cual se veía realmente apetitoso en el momento y no sabía porqué.

Han comenzó a reír sin poder aguantar, algún día beomye  lo mataría de tanta ocurrencia que pasaba por su pequeña cabecita, que era eso de fresa café? Era un muy buen nombre para cambiarlo por 'chocolate'

-Amor es helado de chocolate- hablo jisung marcando la palabra que el niño había cambiado.

-Fresa café!- Respondió feliz beomgyu alzando las manitas con el helado de fresa en una mano y un poco de este por la mejilla.

-Eres único en serio- decía el mayor riendo caminando con el niño de la mano hacia la tienda donde arreglaban el cabello y vendían muchos accesorios para el mismo.

En cuanto llegaron Beomgyu miraba con los ojitos brillantes a su cuñado.

-Es una esquetica  Sungie! Una esquetica- gritaba feliz dando saltitos muy pegado a Jisung.

Tal vez y solo tal vez cambiar las palabras hacia la vida más feliz y divertida a como parecía.

Espero les guste!

Cómo están? Qué  comieron hoy?

Les quería contar que compre un poquito más de crayones de colores! Son muy bonitos ૮₍⑅˶•▿•˶⑅₎ა

𝕠𝕤𝕚𝕥𝕠 bebé! TXT  𝒍𝒊𝒕𝒕𝒍𝒆 𝑺𝒑𝒂𝒄𝒆! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora