ESTABA DESTINADO A AMARTE (Jikook / Kookmin / Mingukkie)

27. Amenaza

Los chicos regresaron a Seúl tras la gira y se disponían a descansar unos días, pero al día siguiente el jefe llamó a su despacho a Jimin y Jungkook. Cuando llegaron al despacho, el jefe estaba muy enfadado.

-Jungkook, ¿puedes explicarme para qué hiciste semejante papelón en el escenario? ¿No te da vergüenza? ¿No ves que todo el mundo está hablando de lo que hiciste? ¿Acaso no piensas? ¿Ahora cómo explicamos esto?

-No fue ningún papelón. Jimin estaba mal y quise calmarlo. Y no, no me da vergüenza porque lo amo.

-Muy bien. Hasta aquí llegó tu falta de respeto hacia la empresa. O dices en una rueda de prensa que era puro fan service o saco a Jimin del grupo. Fue el último en entrar y será el primero en salir.

La expresión de Jungkook cambió por completo y su rostro comenzó a ponerse rojo de ira. Jimin lo agarró para que no se abalanzara contra el jefe, pues sabía que en ese momento era muy capaz de cometer una locura. Jungkook se giró a mirar a Jimin y le sonrió. Luego se giró hacia el jefe.

-Está bien. Hagamos esa rueda de prensa. Que sea mañana temprano, ya que luego quiero irme a disfrutar de mis merecidas vacaciones con mi marido.

Jimin no entendía por qué Jungkook le sonrió y cambió de actitud, pero sabía que algo tramaba su inquieta mente.

Cuando llegaron al apartamento, Jungkook abrazó y besó a Jimin con dulzura.

-No pienso tolerar que te echen del grupo por algo que yo hice.

-Diremos que fue fan service, ¿verdad?

-Hazme un favor, bebé. En la rueda de prensa déjame hablar a mí. Sólo estate ahí conmigo. Te voy a necesitar.

-Por supuesto, Kookie. Allí estaré contigo. Sé que tu mente trama algo y que no me lo vas a decir.

-Mañana lo sabrás, amor. Tan sólo confía en mí.

-Te confiaría mi vida entera, bebé.

Jungkook volvió a besar a Jimin y luego lo abrazó muy fuerte, apretándolo contra él.

-Pronto acabará todo, mi vida. Tú no mereces sufrir. Yo siempre estaré ahí para ti. - Dijo Jungkook.

Jimin sintió un escalofrío por su cuerpo y Jungkook sonrió.

-Nada malo te va a ocurrir mientras yo esté vivo, Mochi, porque te protegeré con mi vida si es necesario.

Jimin sonrió y besó a Jungkook. Después, prepararon la cena y cenaron mientras veían la televisión un rato.

Jimin seguía un poco inquieto por lo que pasaría mañana. Conocía muy bien a su marido y sabía que no aceptaría tan fácil lo que dijo el jefe.

-Kookie, quiero que sepas que si me echan del grupo seguiré apoyándoos a los seis.

-Nadie te va a echar del grupo, amor. Y si te echan, me voy contigo.

-¡Nooo! No quiero que renuncies a tu sueño.

-Mi sueño ha cambiado. Mi sueño eres tú, y sólo tú. Dejaría la música por ti.

-No quiero que hagas eso. - Dijo Jimin. - Prométeme que, si me echan, tú seguirás en la banda con los chicos.

-Te prometo que siempre estaré a tu lado.

-Eso no es lo que te he dicho. - Dijo Jimin.

-No te voy a prometer algo que no pueda cumplir. Lo único que te puedo prometer es que no te dejaré solo, ni mañana ni nunca.

Los chicos se fueron a dormir. Esa noche fue tranquila porque querían estar bien descansados para la rueda de prensa del día siguiente.