Valerian

42. сорок два.

Habían pasado unos días "normales" y rutinarios hasta que... metí la pata.

Un día estaba viendo tele en la sala.
Había terminado de hacer ejercicios y me senté en el suelo a coger aire y me quedé inmerso viendo las noticias. Aveces me gustaría saber qué pasa afuera de mi burbuja.

De repente escucho a Viktor gritar mi nombre... lo miré exaltado...

Vino hacia mi desde la cocina, galopando y furioso... me agarró la mano izquierda y la apretó con fuerzas; me quejé porque dolió su agarre, Viktor gritó que soy un asqueroso de mierda.

No me di cuenta que me estaba comiendo las uñas.
- ¿Acaso no estoy pagando tremenda pasta para arreglarte esas manos cada 2 semanas? -

Lo mire adolorido, y sin soltarme, siguió:

- ¡Para que vengas a destrozarte las uñas con los dientes pedazo de animal de mierda. Por eso es que eres una puta inepta que nunca piensas nada porque eres una bestia descerebrada!-
Me cacheteo con fuerzas y me amenazó que si me veía de nuevo haciendo lo mismo, lo iba a lamentar.

No pasó ni una semana y lo hice sin darme cuenta y me pillaron.
Yo estaba acostado en la cama, muy distraído, viendo una revista vieja, Yulia andaba en el baño haciéndose un facial y de la nada entra Serge y nos dice que no hagamos ni un ruido porque venía gente y que si hacíamos algo raro nos iban a meter el palo de la escoba por atrás por toda la noche.
De verdad que me lo imagine.
Viktor se asomó al cuarto y de lejos me visualizo justo cuando me llevé la mano a la boca. Enseguida la baje y sentí el miedo de verlo como le cambió la mirada pasiva a una de furia.

Entró al cuarto y me jaló de la mano, me tiro al piso mientras me gritaba que me arrodillara. Me pateo la cabeza y quedé en el piso cubriéndome el rostro conteniéndome de llorar.

- ¿Qué debería hacerte ? -
Volvió a patear con fuerzas mi cabeza.
Me quedé inmóvil en silencio muerto de miedo.
- ¿Te corto los dedos?-
Me jaló de nuevo, esta vez por el cabello para verme a los ojos. Yo no pude mirarlo y mantuve los ojos al suelo.
Me va a matar. Pensé.
- ¡Arrodillado!-
Después que me acomodé torpemente como ordeno, se inclinó frente a mi y empujó mi cara contra el mueble golpeándome de nuevo la cabeza.
Me dijo que no me cortaría los dedos porque eso lo haría perder dinero ya que nadie sacaría cita con un asqueroso mocho de mierda.
- ¿Sabes cómo te puedo hacer entender?- volvió a empujarme la cabeza.
- Te voy a arrancar las uñas con pinzas, te puedo poner un parche y te vuelve a crecer la mierda esa. Los animales como tú solo entienden así, a las malas... tenías que hacer otra estupidez más para recordarme que aún no puedo subirte al pedestal. ¡MIERDA! -

Le pidió a Serge que estaba parado mirando todo con cara de sueño que trajera una pinza de alicate.
Serge salió del cuarto y regresó enseguida con la pinza.

¡Él no va en serio!

Estaba asustado hiperventilando del pánico.

- Agárralo para que no se mueva. -

Susurré "no"

- ¿Dijiste algo? - preguntó Serge encabronado mientras me sostenía contra su pecho. Negué con la cabeza mientras apretaba los labios y él me subía a la cama para ponerme a la altura de Viktor.
Viktor hablo entre dientes y me ordeno a ver cómo me iba a arrancar la última uña de la mano izquierda. Serge no tenía que poner mucha fuerza porque me deje por completo.
-¡SI NO MIRAS, TE ARRANCO DOS MÁS! -

- VIKTOR... por favor, por favor por favor, no lo haré, lo juro lo jur. -

- ¡CÁLLATE! Así nunca más tendrás ganas de comerte las uñas, Animal de Mierda. -