🍁 27. Amor propio del fuerte

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𝑺𝒊𝒏 𝒑𝒆𝒓𝒎𝒊𝒔𝒐 𝒑𝒂' 𝒏𝒐𝒎𝒃𝒓𝒂𝒓𝒍𝒐

―Es de los que se creen la gran vaina porque son bonitos...como Alejandro, pero Alejandro es feo pues.

La señora Carolina le dio un coñacito en el brazo a la chama. ―Tu hermano es lindo.

―Porque lo ves con ojos de madre, pero mis ojos de hermana dicen que es un tuqueque.

La señora se cagó de la risa mientras Mari asentía totalmente segura, remojando el pancito en la taza de café. La señora se sobó la barriga mientras se ponía roja por la risa.

Mariangel mordió el pan, saboreando la delicia en su boca.

―Creo que él es un año mayor que Ale...o algo así me había dicho tu hermano.

―Sí pero ya la cagó...o en parte porque lo escucharas hablando ―la chama gruñó como un perro, recordando la conversación de los dos pajuos―. Me dan ganas de darle un coñazo pa' que deje de creerse la gran vaina.

Porque Mari no era que lo había sentenciado de una...

Mentira, sí lo hizo.

Porque le fue suficiente escuchar al catire conversando con el mongólico de su hermano para darse cuenta que no perdía mucho si no quería entablar una relación con el chamito.

Tenía una relación con su hermano porque vivían bajo el mismo techo y si no se medio llevaban bien la mai los sentaba a hablar sobre que tenían que amarse porque cuando ella no esté, y vainas que terminaban en un abrazo familiar, amor y cariño...

Hasta que Alejandro dejaba el baño encharcado y Mariangel le gritaba sus vainas.

Y volviendo a la carajita, estaba medio ladillada que la gente que conocía o le interesaba conocer, terminara siendo similar a su hermano en la parte de "mamaguevismo".

Porque tampoco que Alejandro la peor persona, el carajo las hacía reír con unas loqueras que se le salían de la nada, era colaborador y ese si no se podía de una forma, buscaba de otra, pasaban momentos chéveres...cuando no se andaban matando por el cargador.

―Bueno mami, no todos son David.

Mari sorbió lo que quedaba de su taza, pasándolo con el pan que aún tenía en la jeta.

―David...naguará, yo no sé cuándo iré a visitar a ese loco.

―Dile que venga un domingo que hagamos sopa.

―A él no le gusta la sopa.

―Bueno que vaya a freír mono.

La chamita se echó a reír, desbloqueando su teléfono para escribirle a su pana pa' ver qué hacía el carajo.

David 💎


Bro

Qué haces?


Mariiiii

Te iba a escribir

Bicho mana, fuera brujería


El loco


Mari, creo que no voy a poder ir

A la putirumba de tu hermano

Perdón


𝑫𝒆 𝒂𝒎𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒚 𝒂𝒓𝒓𝒆𝒄𝒉𝒆𝒓𝒂𝒔  «𝙴𝙽𝙷𝚈𝙿𝙴𝙽»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora