🍁 39. El tira y encoge

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𝑴𝒂́𝒔 𝒍𝒆𝒋𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆𝒍 𝒄𝒐𝒏̃𝒐

―Ya comenzaron las inscripciones en la Simón Rodríguez.

Mari frunció el ceño mientras terminaba de masticar el pedazo de carne que parecía una chola de lo tiesa. Alejandro peló los ojos cuando le echó un coñazo de salsa de tomate a la pasta, se encogió de hombros y murmuró un "qué más".

La señora Carolina alzó una ceja, pasando la mirada de uno al otro. ―Les digo por si les nace, si les da la gana, si de repente quieren seguir estudiando, siempre andan corriendo a última hora pa' todo.

Alejandro se metió un poco 'e pasta, negando mientras. ―Yo quiero un año libre.

―Llevas dos años libres, flojo er coño ―se rió su hermana.

―Tú qué vas a esta' hablando, tu llevas como cuatro.

Mari le soltó un coquito a su hermano, pasando la comida con un traguito de jugo. ―Pero yo me puse a hacer cursos.

El chamito aplaudió llamando la atención de las dos mujeres, tenía una care' loco habitual pero de ese tipo con una idea rebotándole en el coco. ― ¿Por qué no montamos una panadería? Tú sabes recetas, mi amá también y yo sé comer, estamos hechos.

Mari intercambió una mirada con su mamá, señalando al chamito con la jeta mientras se aguantaban la risa, la señora carraspeó pa' hablar. ―Trae la plata pal emprendimiento.

Alejandro se echó pa' atrás, siseando. ―Pa' eso está mi apá, que suelte los riales porque una inversión es...un futuro asegurao, yo los administro.

Mariangel soltó el tenedor mientras se cagaba de la risa intentando no ahogarse con el pedazo de carne que seguía masticando. ―Coño, 'ta forzao eso, yo creo que el primer día no trabajamos porque el gerente se quedó dormido.

―Naguará de fe, con esa mentalidad no vas a llegar lejos, gafa.

La chama lo remedó, sobándose la pierna cuando el chamito le lanzó un coñacito.

―Hablo de pana, yo no quiero estudiar, quiero trabajar, ¿Pa' qué voy a estar gastando mi juventud en estudiar? Yo quiero empezar a asegurar mi futuro, tenemos potencia.

―Aragua... ―murmuró Mari, dejando la mirada perdía en la esquina de la mesa.

― ¿Qué? ―Ale chasqueó la lengua, dejando pasar la broma―. ¿Sisa o Nelson?

―Tania ―dijo la doña, recogiendo los cubiertos―. Tal vez, pue', ¿no está dentro de tu vocabulario malandro?

Alejandro arrugó la cara con disgusto. ―Ay má, quejesa vaina.

Mari desbloqueó el teléfono por debajo de la mesa, viendo los mensajes que le habían llegado mientras que su mamá le echaba vaina a Alejandro.

Jake <3

Buen provecho, fresita.

Buen provecho bro

¿Y dónde está mi amor?

No sé, no veo el futuro pero porai debe andar

Esperando que le llegues

Como un bono en pelazón

Tú si tienes vainas, Mari.

Voy a salir a casa de un pana.

𝑫𝒆 𝒂𝒎𝒐𝒓𝒆𝒔 𝒚 𝒂𝒓𝒓𝒆𝒄𝒉𝒆𝒓𝒂𝒔  «𝙴𝙽𝙷𝚈𝙿𝙴𝙽»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora