CEREZOS DE PRIMAVERA.

🌓 𝙆𝙖𝙥𝙞𝙩𝙚𝙡 〉⋋✿ 30 ✿⋌.

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Entonces, cuando abrió sus cansados ojos lo primero que vió fué una ventana, las cortinas se balanceaban tranquilamente debido a la brisa que entraba en la blanca habitación.

Estaba recostado y su cuerpo, definitivamente dolía. Su cabeza martillaba dolorosamente. Pero al bajar la mirada cuando intentó reincorporarse lo primero que vió fué una mata de cabello recostada en la orilla de la cama.

Su mano ahora que lo pensaba, se sentía caliente, bastante cálida y quizá también un poco sudorosa.

Marlon parpadeó repetidas veces y reconoció al joven que se encontraba en el lugar como Anton, el chico estaba dormido mientras sostenía su mano y se inclinaba para descansar.

La alegría que se arremolinó en su pecho se disipó tan rápido como Marlon se reprendió mentalmente. Frunció sus cejas y se mantuvo quieto sin apartar la mano que era sostenida por el espía.

Pensó en su hija, ¿cómo estará Hannah?.

También pensó en el tiempo.

Era de día, recordaba que, antes de que todo sucediera, Lesly lo llamó a su oficina, luego lo guió hasta el sótano de la nueva mansión donde Marlon se enteró de que, Lesly había contratado a otro hombre

Tan alto que era intimidante.

Entonces supo que Lesly no había planeado nada bueno para él. De inmediato y con una sola orden de Gutiérrez ese hombre enorme empezó a agredirlo.

Aunque lo esquivó el lugar no era enorme y tampoco era tan ágil como para escapar de la cadena y guadaña del tipo. Afortunadamente Lesly le impidió a ese tipo envenenarlo.

Aunque hubiese sido mejor. Marlon recibió una brutal lluvia de golpes y perdió el conocimiento al menos tres veces solo para despertar y ver cómo ese tipo aún se abalanzaba contra él, golpeándolo.

Se tocó la cara con su mano libre y se dió cuenta de que había un yeso en su antebrazo, podía mover sus dedos así que supone debía estar más o menos bien. Había una venda alrededor de su frente rodeando toda su cabeza y al tocar dolía horriblemente.

¿Cómo es que seguía vivo?.

Sus tranquilos ojos se movieron en dirección de la persona que empezó a removerse hasta que lentamente se enderezó bostezando con la cabeza caída.

Parecía un poco deprimido.

Marlon: ¿A qué velatorio vas con esa cara?.

El hombre vió con diversión como Anton se tensaba en su totalidad y se quedaba quieto para luego lentamente elevar su cabeza.

En cuanto sus ojos hicieron contacto visual con los de Anton, Marlon de nuevo sintió el calor inundar su pecho al ver como los ojos del chico parecían empezar a brillar con emoción.

Y una vez más, lo ignoró.

Anton: . . .―Decidió callar y no decir algo tan obvio como, "estás despierto".― ¿Cómo te sientes?.―

Su cara se relajó y sonrió levemente, manteniéndose en calma, observando al otro.

Marlon: Como si un tipo de dos metros me haya golpeado hasta la muerte.― Bromeó con la verdad. Sus ojos se deslizaron a su mano.

Anton siguió la línea de visión y volvió a tensarse rápidamente. Carraspeó y lentamente retiró su mano, rozando con sus dedos el dorso de la mano ajena.