OCTAVIO
2 meses después.
Salir de Miami había sido un completo infierno, aeropuerto lleno, demasiada gente por donde miraras y lo peor de todo fue cuando mi vuelo se retrasó más de cuatro horas.
Al menos la sala VIP de la aerolínea tenía una buena máquina de cafeína, todos los empleados eran atentos y cordiales, para algo debía valer el precio del ticket, cuando al fin nos llamaron Marcelo que me estaba acompañando justo en la puerta de abordaje olvido su celular en la sala de espera, pensé que lograría alcanzarme a tiempo ya dentro del avión pero no suceden las cosas como queremos, se terminó quedando varado y ahora vengo completamente solo en este vuelo de veinte horas, desde el aeropuerto de Miami hasta Sídney Australia.
Podría decir que han sido horas insufribles, pero no.
Las primeras ocho horas de vuelo he dormido y solo he despertado por la insistencia de la aeromoza para que recibiera los alimentos de la cena no pude terminar de comer todo porque sigo una dieta estricta con algunos alimentos sé que suena exigente y altanero pero es una medida necesaria y más para el estado de retraso que ya estoy presentando.
Debido al régimen alimenticio me considero más vegano que vegetariano y aunque son similares son estilos de alimentación completamente distintos.
Según la pantalla táctil del asiento estamos en medio del océano atlántico la oscuridad detrás de la ventana es espeluznante pero por extraño que suene para mi es fascinante, algo que amo de volar son las noches, para mí se sienten como una experiencia fuera de este mundo es como si una parte de tu mente se concentrara solamente con tus pensamientos más profundos, es avasalladoramente emocionante experimentarlo.
— Señor ¿retiró el plato y los cubiertos?
— Si muchas gracias – todo lo que estaba sobre la bandeja se lo lleva la azafata.
Para matar el tiempo y como me conozco tardaré algún rato en poder dormir, pongo una película y mis audífonos las luces del avión se bajan a modo nocturno y el resto del barbullo entre los pasajeros y la tripulación va desapareciendo poco a poco.
Estaba a punto de caer dormido cuando se activó la modalidad de turbulencia, duró treinta minutos de ruidos y movimientos bruscos que todos podíamos sentir, no me genera temor pero es incómodo tener que pasarlo de mi lado derecho venía una pareja logre ver como ella enterraba su mano más fuerte en la palma del hombre, eso debe doler sin duda, la turbulencia se alargó por otra hora pero afortunadamente se estabilizó nuevamente, por fin podíamos respirar con tranquilidad.
Por ir en asientos de primera clase eran reclinables casi como una cama, a decir verdad quedabas en una posición bastante cómoda, la película inicial que había puesto se terminó y mis parpados ya no podían sostenerse por sí solos, poco a poco perdí el conocimiento para caer en los brazos de Morfeo.
Diez horas después.
La azafata estaba despertándome nuevamente para desayunar y despabilarme un poco antes del aterrizaje.
El desayuno estuvo bastante ligero y fácil de digerir, me quite el pantalón de chándal y la sudadera que traía puesta y me cambie por algo entre comillas más formal como un pantalón formal y camisa de vestir, aun cuando no estuviera invitado para competir venía como delegado de parte de mi equipo y de las marcas que me patrocinaban en muchas de mis competencias, guarde todas mis pertenecías y solo quedaba esperar para el momento del aterrizaje, si mis cálculos del tiempo no me fallan llegare justo a tiempo para la ceremonia de apertura.
El rechinido de las llantas del avión sobre la pista de aterrizaje fue bastante brusco, pero por fin estaba en tierras Australianas, mala idea genio, llevar una camisa formal para este punto en donde debe estar bastante arrugada, los pasajeros de primera clase bajamos del avión primero, pase aduanas sin ningún problema y cruzando las puertas de acceso la ola de reporteros me rodeo, los de seguridad se acercaron para ayudarme a librarme del tumulto y entre empujones y estrés logramos llegar a la salida.
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VICTORIA Y HONOR (COMPLETA)
RomantikArabella Ferrera es la campeona actual de tenis femenil y es la seleccionada nacional para competir en las olimpiadas representando a Estados Unidos, posee más de dieciocho títulos entre ellos es la ganadora del Abierto de Australia y del Wimbledon...