Huellas | KookV

~ 27 ~

Taehyung decidió regresar a la Gran Casa antes de que oscureciera y tuvieran problemas en el bosque, pero lo suficientemente tarde como para alcanzar a ver los últimos colores en el cielo antes de la monótona oscuridad desde la montura del caballo. Él iba junto a Hoseok, un poco más atrás los seguía Saya, quien se había dado a la tarea de borrar las huellas de los animales para evitar que alguien más llegara hasta la cabaña. De igual forma, Hoseok fue el designado para dejar a los caballos en el establo mientras que Tae ingresaba a la Gran Casa junto a la alfa.

Evitaron la cena, tuvieron que declinar a una paje que ofrecía la invitación de camino a la habitación del omega.

―¿Está seguro de que no quiere cenar? ―preguntó Saya con un deje de indecisión, no es que quisiera cuestionar al omega, pero se preocupaba un poco, después de todo, Taehyung había estado realizando mucho esfuerzo por la tarde.

―Está bien así, será lo mejor ―contestó el omega con calma ―cenaremos en mi habitación, espero que eso no te moleste.

―En absoluto ―negó de inmediato.

Taehyung le mostró una sonrisa pequeña, la chica había resultado ser bastante complaciente tranquila, razones por las que no tardó en sentirse cómodo con ella alrededor. No había mucha diferencia en sus edades, pero Taehyung a veces sentía que ella seguía comportándose como alguien menor, como cuando la vio patear nieve o hablarle a su caballo.Sentía que todavía había algo de inocencia ahí y su omega lo notó rápidamente, siendo empujado por esa vena empática que lo impulsaba a querer ayudar y proteger.

Para él, todavía era extraño sentir algo así por un alfa.

―¿Hace cuánto saliste de la academia? ―preguntó mientras seguían subiendo.

―Hace realmente poco ―contestó de inmediato ―soy de las mayores de la generación, cuando nos graduamos la guerra con tu manada ya había terminado, pero luego comenzó de nuevo.

Taehyung hizo una pequeña mueca triste.

―Debe ser un poco aterrador, ¿no? ―siguió con voz un poco más baja.

―Está bien, es nuestro deber.

―Eso no le quita lo aterrador ―acotó de regreso, pero, al contrario de lo que esperaba, la chica se rio.

―No es tan aterrador. Cuando peleas es como si todos tus sentidos se activaran y fueras capaz de cualquier cosa, los golpes, las caídas y las heridas son poco a comparación del impulso que sientes por ganar ―un deje de emoción se colaba en su voz mientras hablaba ―no soy tonta, sé que la guerra es diferente a la academia, pero el próximo año estaré en edad de ir al frente y una parte de mi quiere hacerlo, quiero proteger a mi manada.

―Todavía eres joven, deberías tomarte las cosas con calma.

―Hay alfas que pelean incluso más jóvenes, el comandante Jeon fue al frente cuando tenía solo 16 años ―dijo la chica incrementando su emoción ―a mí edad él ya era candidato para convertirse en general, incluso el anterior comandante sabía que tomaría su puesto algún día...

―Jungkook está demente ―dijo con cierta gracia al escuchar todo eso, todavía recordaba cuando el mismo Jungkook se lo había contado, lo horrorizado que se sintió al pensar en un joven alfa peleando en medio de la guerra ―no deberías seguir sus pasos.

―Pero eso es lo que siempre he hecho ―dijo la chica incluso más fuerte, Taehyung la miró con una ceja alzada ―si sigo sus pasos entonces me convertiré en una general.

―Wow, tú realmente debes admirarlo.

―Por supuesto que lo admiro ―Taehyung rió por su pequeño desliz ofendido ―es el mejor alfa de la Zona Alta, apuesto a que cualquier otra manada quisiera tener a alguien como él.