~ 40 ~

12.3K 1.2K 2.2K
                                    

Jungkook tuvo la sensación de que algo pesado había caído sobre él cuando abrió los ojos. Lo primero que vio fue el cabello dorado de Taehyung y el color canela de su piel escondido por la oscuridad, el aroma del omega llenaba sus pulmones dejándolo en completa tranquilidad. Tardó todavía un segundo más en ser consciente de su alrededor, su brazo derecho hormigueaba, entumecido por encontrarse bajo el peso del contrario, mientras que el izquierdo rodeaba al más delgado de forma protectora.

La espalda de Taehyung estaba completamente pegada al pecho de Jungkook y sus piernas estaban recogidas de tal manera que lo hacían ver más pequeño, un ovillo rodeado por el cuerpo del mayor. Al alfa solo le hizo falta levantar ligeramente la cabeza para ver un poco del rostro sumamente tranquilo de Taehyung, pero su mirada rápidamente se dirigió un poco más abajo en donde en el cuello del omega se podía apreciar la reciente marca.

La marca de sus colmillos se veía profunda, aunque alrededor de la herida apenas y había un ligero color rosado, lo que era una buena señal.

Casi como una necesidad, Jungkook volvió a bajar su cabeza para enterrar su rostro en el cuello del menor. Su nariz pasó ligeramente por la marca que desprendía un exquisito aroma a canela para después depositar un beso rápido en el lugar. Durante la academia los alfas debían tomar lecciones sobre el buen cuidado de una marca, especialmente cuando el establecimiento del lazo era un largo proceso posterior. Puede que en ese entonces Jungkook hubiera sido de los menos emocionados al respecto, pero ahora estaba feliz de haber prestado atención a aquellas lecciones.

Jungkook sabía que algunos alfas no le daban mayor importancia a los pequeños detalles que respecta al establecimiento de un lazo, después de todo eran los instintos quienes se encargaban de la mayor parte del trabajo. No obstante, él nunca se había tomado a la ligera el cuidado de Taehyung y no empezaría a hacerlo ese día.

Volvió a besar la zona de la marca con especial cuidado, había escuchado que el contacto directo ayudaba a una rápida cicatrización, además de ser parte esencial del establecimiento del lazo. Las próximas horas eran primordiales y él debía estar cerca de Taehyung en todo momento, pues era cuando el omega necesitaría más de su presencia y aroma. Del mismo modo su alfa también lo necesitaba, pues podía sentir una urgencia que nunca había sentido antes por el aroma del contrario. Volvió a aspirar, llenando sus pulmones de aquella esencia, y solo así sintió un poco de aquel peso desaparecer.

Apretó un poco más el cuerpo del rubio contra el suyo, ahora mismo cualquier centímetro de espacio entre ambos no era bienvenido. Siguió con su trabajo de mimar la zona herida en la piel del omega mientras su mano ya se encargaba de acariciar el pecho y estómago del menor.

―Kookie ―balbuceó Taehyung todavía sumido en su sueño.

Jungkook sonrió ante sus palabras inconscientes y detuvo sus movimientos, dejaría al omega dormir un poco más. Así pues, ajustó sus brazos alrededor del omega y no se movió más de lo necesario para mirar alrededor. La habitación se veía más oscura que cuando llegó, pero aparte de eso todo estaba completamente igual. Ellos estaban rodeados de las mantas de la cama y la ropa que habían estado utilizando los últimos días, Jungkook había utilizado una de ellas para limpiar un poco su desastre antes de caer finalmente rendido por el sueño.

Se había sentido completamente exhausto después de la marca, no le sorprendía en absoluto que Taehyung cayera inconsciente de inmediato.

Volvió a dejar caer su cabeza justo en el cuello del contrario y suspiró con satisfacción ante la tranquilidad de su alrededor. Todo rastro de cansancio había desaparecido, pero la necesidad de estar con Taehyung no se había mitigado ni un poco. Su lobo seguía empujándolo para estar un poco más cerca del omega, como si esperara que su piel se fundiera con la del otro, si es que lo abrazaba un poco más fuerte, como si esperara que ambos se convirtieran en un solo ser. Aunque, en cierta forma, ahora lo eran.

Huellas | KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora