Capitulo 3

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-Buenas noches, Kirito...*Dijo Liz en voz baja, con una mano en la puerta mientras lo miraba con silenciosa satisfacción después de su sabrosa cena.

-Buenas noches, Liz. Nos vemos mañana...*Respondió Kirito, cerrando la puerta de su propia habitación.

Al cerrar la puerta de su habitación, Liz vio a Asuna, Argo y Sillica ya acostadas en sus camas. Liz compartía la cama de la izquierda con Argo mientras que Sillica dormía con Asuna. Era una situación nueva para todas ellas, ya que normalmente se unía a Sillica para el ritual nocturno de dormir. Liz cambio su ropa casual por su ropa de dormir y se acostó en el cómodo entorno de su cama.

-Buenas noches a todas.

-Buenas noches...

Fue la respuesta colaborativa antes de que Liz apagara las luces y se acostara cómodamente debajo de la manta. Esta cama fue definitivamente la mejor hasta ahora, superando fácilmente sus estadías anteriores por una milla. A pesar de esto, la herrera aun no podía llegar a la tierra de los sueños. Parecía que su compañera de cama tenía el mismo problema, de acuerdo con sus movimientos y giros bastante agresivos.

-¿Sigues despierta?*Pregunto, unos minutos después del último giro.

Era un susurro practicado, no uno que había escuchado mucho de Argo cuando respondió...

-Sí ¿Tampoco puedes dormir, Li-chan?

-No he tenido una buena noche de sueño desde el comienzo de este juego...*Respondió Liz con los ojos fijos en el techo liso. Susurrando, para asegurarse de que Sillica y Asuna pudieran al menos dormir, Liz comenzó la conversación y pregunto*. Me preguntaba algo ¿Cómo conociste a Kirito?

En la oscuridad, la famosa sonrisa de Argo apareció cuando respondió...

-No me importa decírtelo, pero te costara ¿Qué tal si te digo el mío y tú me dices el tuyo a cambio?

Liz simplemente no pudo evitar reírse de la actitud siempre profesional de Argo the Rat, pero no tuvo ningún problema en compartir su historia. Argo tenía algo increíble, pero Liz aun no sabía que. Veía a Argo como una buena amiga, incluso si solo había pasado tres días con ella.

-De acuerdo.

-Bueno, te dije antes que soy una Beta Tester...*Comenzó Argo, acostándose boca arriba mientras apoyaba la cabeza en sus manos*. En la versión Beta, siempre estaba en primera línea, tratando de aprender todo el juego para cuando salió la versión real. Veras, tengo muy buena memoria. No fotográfica, pero soy particularmente buena para recordar información. Escrita, hablada, ect... puedo recordarlo todo sin siquiera confundirme de palabra o carta durante toda una semana. Pero un buen recuerdo como ese tiene sus inconvenientes. La mayoría de las personas nacen egoístas y solo piden lo que necesitan. No les importa la persona, sino solo fortalecerse.

Argo miro al techo mientras una pequeña sonrisa se formaba alrededor de esos bigotes dibujados...

-Luego conocí a Kii-bou. Al principio lo encontré molesto. Pensé que se sentía atraído por mi avatar, así que mantuve mi distancia. Eso fue durante la primera semana. Un día, necesite ayuda con cierta búsqueda en la línea del frente y él era el jugador más fuerte que tenía en mi lista de contactos, así que le pedí que me ayudara. Durante ese tiempo, aprendí sobre la persona detrás de su avatar. Se tomaba cada batalla en serio, pero siempre con la misma sonrisa en su rostro.

Tal vez parecía que estaba mirando al techo, pero de hecho, los ojos de Argo no registraron nada de eso. Estaba pensando en el momento en que caminaba junto a Kirito en una de esas misiones; los cañones del 4to Piso no son una vista acogedora en lo más mínimo.

Sword Art Online: Aincrad, but differentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora