Capitulo 34

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Una música rápida y constante resonó en el aire mientras un dúo maniobraba sobre el suelo, para que los NPCs y los jugadores lo vieran. Un vestido largo rojo giraba sobre la pista de baile, seguido de un traje blanco y negro con vuelo.

El candelabro que estaba iluminado intensamente por las mil velas que había en el mismo, los cientos de NPCs que rodeaban a la pareja de baile o a los demás de su gremio; todos eran un extra. Para Liz, sólo hubo una cosa que hizo que este momento fuera especial.

Aunque no sabía el arte de bailar, casi se sentía como si volara sobre la pista. El suave toque que la ayudó a tener ese sentimiento provino de la misma persona que la miraba con una mirada tan confiada pero impresionante que ella solo pensó que era posible en las películas románticas. Cuando la música paró, los dos jugadores dejaron de bailar y Liz dio un paso atrás para recuperar el aliento.

-Eso fue... Increíble, Kirito...*Dijo ella, pero cuando quiso dar un paso atrás, su compañero de baile dio un paso adelante.

-¿Fue? ¿No me digas que te estás aburriendo de mí?*Preguntó el pelinegro con una sonrisa descarada antes de que una canción más lenta sonara en el aire y Kirito llevara a una Liz completamente sorprendida de regreso a la pista de baile.

-¿Kir...rito? ¿Qué estás haciendo?*Preguntó la herrera pelirosa, su rubor ahora hacía juego con su cabello.

Ese parecido terminó cuando un Kirito confiado respondió a esa pregunta con...

-Bailando con la persona que amo...*Bajando la cabeza hacia su oído, le susurró*¿A menos que quieras continuar este baile en un ambiente más privado?

Sentada erguida en su cama, Liz miró a su alrededor en estado de shock. Cuando se dio cuenta de que no estaba en un lugar elegante como el palacio, que no llevaba el vestido de esa noche sino un simple pijama y, sobre todo, que la que yacía a su lado era Silica, se calmó un poco.

-Realmente debería dejar de ver esas películas...*Se dijo Liz en voz baja antes de volver a dejarse caer sobre la almohada. Sintiendo que no podía conciliar el sueño, o sin saber si quería que ese sueño continuara o no, decidió revisar su menú.

Una parte de ella realmente quería seguir inspeccionando los artículos de su inventario, pero simplemente no había forma de escapar del sueño que la había despertado tan repentinamente. Liz pensó que la razón del sueño era por los cambios que notó en Kirito en los últimos días, que él estaba más cerca de ella y escuchándola de manera diferente.

No podía ubicarlo, pero algo había cambiado desde el día de San Valentín y solo esperaba que fuera por esas misiones en el 10mo Piso que quería hacer con él. Las hermosas cuevas eran un espectáculo digno de contemplar, especialmente cuando sabía que estaba a salvo con él cerca.

Una ventana emergente sacó su atención de esos pensamientos y, sin pensarlo, Liz la presionó. Casi de inmediato desapareció sin dar una indicación clara de para qué servía. Antes de que Liz pudiera volver a pensar en los pensamientos anteriores, otro mensaje del sistema apareció frente a ella.

-[Tienes un espacio de habilidad sin usar]

-¿Conjunto de habilidades no utilizadas? Eso no debería suceder hasta dentro de al menos cinco niveles más...*Cambiando su inventario a su conjunto de habilidades, Liz miró sus cinco habilidades que estaban asignadas a sus respectivos lugares.

-[Refinación de metales, 513/1000.]

-[Forja de armas de empuje, 509/1000]

-[Forja de armas cortantes, 430/1000]

-[Reparación de equipos metálicos, 415/1000]

-[Forja de armas contundentes, 230/1000]

-En la botella de Kales,0h [Martillo de guerra de una mano, 265/1000.]

Sword Art Online: Aincrad, but differentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora