Finalmente decidí que la serie me ha gustado lo suficiente como para comprarme los libros de la saga que tan famosa se ha hecho de Julia Quinn. Me he enamorado por completo del duque de Hastings y no puedo esperar a saber sobre las demás historias.
Si esa época fuera tan bonita como la pintan en las series sería ideal experimentar como sería la vida en ella por un día. Cuando antes el romance era tan cautivador y romántico, sin dejar atrás esos bailes que formaban parte de las galas a las que los miembros de la alta sociedad debían asistir.
Aunque mi género favorito siempre ha sido el thriller y el lado más romántico le pertenece a Beth, yo también tengo mis momentos. Además, de que en libros es uno de mis géneros favoritos. La razón por la que me gustan más las películas del primer género es porque prefiero ver algo emocionante que empalagoso. Con los libros ya es otra historia.
Otro de los motivos por los que he decidido venir a la librería a por el primero de dicha saga es porque hace tiempo que no leo y mi estantería necesita ser más rellenada. Además, puede que me lleve alguna que otra cosa para escribir.
Escribir siempre me ha gustado y desde que tenía unos catorce años he ido escribiendo gran variedad de cosas en libretas que mi madre ha ido regalándome. Historias cortas, frases que nunca quería olvidar e incluso un intento de poema.
Algunos se preguntan porque no me he dedicado a escribir libros, y simplemente es porque todo aquello que se quedaba en las libretas no salía de ahí. Las palabras escritas en sus hojas las quería para mí, es algo privado que nadie ha leído. O al menos casi nadie, la única persona que sabe de eso es Beth, y solo porque es demasiado insistente.
Hablando de mi loca amiga, es con quien me dirijo hacia la librería. Ha querido acompañarme hoy porque según ella estaba aburrida en nuestro apartamento y no tenía nada mejor que hacer. Así que, cuando he salido del trabajo ya la tenía esperándome para ir.
Me alegro de que se haya ofrecido, siempre es mejor ir en su compañía que sola.
—¿Me vas a decir ya si tengo cuñado? — pregunta deseosa de obtener información por mi parte.
Desde que me vio ayer tras haber estado con Jareth no ha parado de intentar sacarme respuestas que aún no le han llegado. Yo creo que ese ha sido el motivo principal de venir conmigo. Típico de mi mejor amiga.
—Oficialmente estamos saliendo — le confirmo, contenta de que sea una realidad.
Beth, como la chica expresiva que es cuando quiere, me atrae hacia ella para darme un fuerte abrazo. Demasiada celebración para lo que le he dicho.
—Un día conseguirás estrangularme y te quedarás sin amiga — digo soltándome de su agarre.
—Pobre Jareth como te gusten igual de poco sus muestras afectivas como las mías — contesta ella fingiendo enfadarse.
—A veces te pasas de emocionada — la pico.
—Es que a este paso siempre pensé que te quedarías soltera, nunca te he visto así con un chico.
—Eres como una madre desesperada por que su hija no sea una solterona — bufo rodando mis ojos.
—Porque te quiero mucho — se justifica.
Ambas nos reímos de la mueca tan estúpida, pero a la vez graciosa, que ha puesto y seguimos caminando por un poco más, ya que, cuando giramos en la esquina de la calle nos encontramos el lugar.
Es una calle con varias tiendas, pero no de ropa, zapatos o bolsos caros como las de la quinta avenida. Esta calle es algo menos glamurosa y más sencilla, con algunas tiendas vintage y cafeterías en las que personas pasan un rato tranquilo tomando café o cualquier otra bebida caliente.
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Entre un amor y medio (Entre amores #1)
Romance¿Qué ocurre cuando comienzas a sentir por dos personas totalmente distintas? Un cantante famoso. Un chico encantador. Y una periodista un tanto curiosa. Por motivos laborales, Iris Cooper debe conocer a Hudson Allen, la sensación del momento. Un can...