CAPITULO 46

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Lucero pidió una cita con Manuel para hablar con el acerca de los regalos y más.

- ¡Lucero Hogaza!- exclamó la secretaria- el licenciado Mijares la espera en su oficina-.

- Gracias lucy- dijo con una sonrisa.

Lucero respiró profundo y entró a la oficina. No sabía lo que la esperaba ahí dentro.

Manuel estaba de espaldas mirando a la ventana y cuando escuchó que la puerta se cerró se volteó.

- ¡Mi vida!- exclamó y la fue a abrazar- Te he extrañado demasiado Lucero, perdoname por favor, fui un estúpido, jamás debí de haber dudado de ti, ¡jamás!-.

- Licenciado le pido de favor que me suelte-.

El la soltó.

- ¿Que pasa?- preguntó él- ¿de qué querías hablar conmigo entonces?-.

- Le pido que se me otorgue mi año sabático- dijo sin más.

Manuel se volteó y se sentó en su silla.

- ¿De cuántos meses estaríamos hablando?- dijo de una manera más seria, ese era un Manuel que Lucero desconocía.

- Los doce meses licenciado-.

- ¿Cuál es la causa de su reclamo?- preguntó.

- Quiero tomarme un tiempo para mí misma-.

- ¿Problemas personales licenciada?-.

¡Auch! Ese fue un golpe inesperado. "Licenciada" ya no mas "mi vida", "mi amor", "mi lucero", "mi reina", etcétera.

- Eh... si licenciado-.

- Entendible, ¿se puede saber el lugar en el que estará?-.

- Me iré a España- al decir eso, notó perfectamente como a Manuel se le bajó la presión y se le subió el azúcar.

- ¿¡España!?- exclamó inconscientemente- una... Una disculpa licenciada, eh, su año sabático se le será otorgado, no habrá ningún problema-.

- Muchas gracias- dijo y se fue prácticamente corriendo de ahí.

Al llegar a su casa, le entraron unas náuseas horribles. Corrió al baño y vomitó todo su desayuno. Al reincorporarse, se cepillo los dientes y comenzó a marearse.

Pasaron dos días y Lucero no sabía que era lo que tenía, hasta que descubrió que tenía un retraso, decidió esperarse unos días más aún sabiendo que ella era muy regular. Simplemente la regla no le llegaba, se temía lo peor pero no quería aceptarlo hasta que se armó de valor y corrió a la farmacia, se compró la dichosa prueba de embarazo y se la hizo.

Positivo.

Estaba embarazada de Manuel. La desesperación se apoderó de su mente. No sabía que hacer. No se lo podría esconder, o al menos ya no por los últimos meses pero tampoco quería decirle porque eso implicaría que volverían sus intenciones de que regresaran con el pretexto del bebé y ella no era tan fuerte como para seguir rechazandolo, sabía que en cualquier momento caería. ¿Debía llamarlo o no?

De repente recordó.

- ¡Mi año sabático!- exclamó.

Problema resuelto, por un año no vería a Manuel para nada. Se iría a España como lo tenía planeado y allí tendría a su bebé. Regresaría con su hijo y hablaría con Manuel pero le dejaría en claro que no regresaría con él. Esperaba que para esto, Manuel ya la abría olvidado.

Por otro lado, Manuel sufría una agonía terrible. No la vería por un maldito año. Quería ir corriendo a España para verla de lejos siquiera pero sabía que debía de respetar su espacio. Comprendía que ella también necesitaba sanar muchas heridas provocadas por el.

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Habemus bebe 😩🤚

<3

F.C.

Amor por VegasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora