CRUEL (Taelice)

Cap 28

Por cierto, no volviste a ver a tus hermanas.

—Realmente no tengo mucho tiempo aquí… pero voy a ver si puedo traerlas a vivir conmigo Le envío un mensaje todos los días para contarle sobre mi día…

—¡sí! —respondió, pero abrí mi teléfono celular para ver los mensajes.

Había pasado una semana desde la última vez que hablé con Ryujin. Y el grupo con mis amigas también estaba lleno de mensajes de texto. Lo abrí para ver varios mensajes en donde me mencionaban. Algunos tenían videos del hijo de Irene. O sus encuentros para la boda de Nayeon.

“Hola, chicas”, envié el mensaje con corazones.

Nadie estaba en línea en este momento, pero pude ver las fotos de irene con su esposo. Me pregunté si alguna vez haré clic en una imagen con Taehyung como esta. Pero, no… ya sabía la respuesta.

El auto fue estacionado. Me recibieron dos mujeres que ya sabían de mi llegada. Me llevaron a una sección algo de VIP… y me ofrecieron té con diferentes tipos de galletas.

— ¿Puedes traer a Jungkook aquí también? No me sentiré bien si se queda afuera. Era mi amigo antes de ser mi conductor — Me dirigi hacia el Mayordomo, Me miró y trató de decir algo, pero luego decidió no hacerlo y se fue. 

Solo después de unos segundos, las mujeres salieron con cinco vestidos… el verde era largo y no tenía espalda. Recordé las huellas de las manos que podría tener en mi espalda. El azul parecía real y me encantó, pero tenía un cuello profundo… creo que podría ir con este. Porque sería fácil aplicar el maquillaje en la parte delantera. Y luego vino el negro que tenía un corte largo en la pierna y tenía mangas largas. A mí también me encantó este.

Pronto, me di cuenta de que entraban Jungkook y el Mayordomo y también les sirvieron el té. 

—Me gustaron estos tres… pero … ¿Piensan que debo escoger algo más?

—No… no, el negro —ambos hombres hablaron y me pregunté por qué, pero sonreí antes de responder.

—Me gusta… pero miren este…

Compartieron una mirada como si supieran algo que yo no sabía, pero me levanté antes de decir:

—Probaré el negro —Me fui, pero encontré al Mayordomo diciéndole a la vendedora que mostrara más ropa.

Salí vistiendo el negro y por sus reacciones, no me pareció nada mal. Incluso en el espejo, era fabuloso.

—Pero… hay muchos otros colores —Jungkook habló antes de agregar—. Ya tienes mucho vestido de negro —Esto le valió una mirada del  Mayordomo, pero supongo que tenía razón. 

—Bien… intentaré con este —Señalé el azul, pero en el momento en que me cambié a este me miré al espejo para notar sus marcas en mis pechos. Y, había muchas… algunas de hace tres días, algunos de la última noche, y otros de la última semana que todavía tenían una pequeña marca.

Así que me puse mi vestido antes de anunciar.

—Me quedo con este vestido…

—Eso no es justo. Deberías habernos mostrado los otros —Jungkookhabló haciendo que el Mayordomo se aclarara la garganta.

Probé el vestido solo después e hicieron algunos cambios necesarios, y los dejé allí para que consiguieran mi talla. Todavía pude encontrar cuatro vestidos más y luego compramos zapatos antes de que mi próxima parada fuera una peluquería. 

Me dijeron que estaba aquí para retocar su cabello.

—Disculpe… —me reí un poco —Le pregunté al Mayordomo lo que respondió:

—El señor Kim lo ha solicitado —respondió el Mayordomo con el rostro escondido detrás de una revista. Pero sabía que no lo solicitó. Él lo ordenó. Continué con el procedimiento asustada de cómo resultaría.

Tenía mi cabello ya un poco oscuro desde la ultima vez que lo pintaron después del procedimiento y salí luciendo como una persona nueva. No lo sé, pero estaba ansiosa por saber qué diría Jungkook sobre esto.

—Te ves bien —dijo en el momento en que estaba de vuelta en el coche—. Pero… —Se apagó y eso se apoderó de mi corazón—. El rubio Te hace ver un poco mayor para tu edad. Ya no pareces tener dieciocho años —No sabía si reírme o enojarme.

—No tengo dieciocho años… Entonces, no sé… tal vez debería tener este aspecto ahora, Jungkook —Esto hizo que se volviera a mirarme.

—¿Por qué? —Preguntó haciéndome encoger de hombros.

—No quiero que nadie me mire y se pregunte si todavía voy a la escuela secundaria —Me reí.

Eran las cuatro cuando volvimos y volví a pedir el almuerzo. Saqué cosas para prepararme para la cena. Estaba lista para irme a las seis de la tarde y comencé a esperar. Eran más de las ocho cuando ese hombre llegó su coche… Esperé a que saliera, pero en lugar de eso, el conductor entró para informar:

—Señora Kim… el Señor, Kim te está esperando afuera —No sé por qué estaba preocupada… pero esperaba que esta noche pasara sin ningún problema.

Salí y el conductor abrió la puerta, para que solo inhalara su espesa colonia. Entré mirando a Taehyung que tenía la cabeza apoyada en el asiento y tenía una copa en la mano. Estaba sentado muy cerca de mí… apenas me daba lugar para sentarme.

—Buenas noches —lo saludé haciéndolo mirarme con pereza y él sonrió antes de pronunciar:

—Hoy… estás tan… —interrumpió mirándome—. ¡Valla! Te ves muy buena  —Su brazo se posó sobre mis hombros antes de tirar de mí. Llevaba el mismo vestido azul, pero tenía un chaleco para cubrir mis brazos.

Parecía divertido.

—Dije que te llevaría a cenar, ¿verdad? Y… a un paseo… un paseo… pero me encanta montarte —dijo arrastrando las palabras inclinándose hacia mi oído.

 Su cálida boca pasó de mi oreja a mi mandíbula, haciendo que mi respiración se detuviera, pero luego se giró para tomar toda su bebida. Inhalé profundamente cuando arrancó el motor del coche.  

—Pero ahora creo que te voy a comer… —El vaso de su mano cayó sobre el piso densamente alfombrado del coche mientras sin esfuerzo sacaba mis pechos de mi vestido. Me estremecí cuando un escalofrío recorrió mi cuerpo con sus dedos tirando de mi cuerpo hacia él. Sus ojos parecían oscuros cuando miró mi boca. 

Sabía que nunca debería haber comprado este vestido revelador cuando me tiró del pelo hacia abajo y ya tenía los dientes hundiéndose y chupando mi carne.