CRUEL (Taelice)

Cap 40

Una de ellas parecía tener Veinticinco años, mientras que la otra parecía ser una adolescente. La mayor tenía tinta en cada parte de su piel y eso la hacía parecer realmente fuera de lugar.

—Hola, mi nombre es Soyeon. ¿Supongo que es la Sra. Kim? Tenemos una cita —Su voz suave contraindicaba bastante sus rasgos, pero dejé de juzgar a las personas desde la primera impresión.

—No quiero ningún tatuaje. Es solo un malentendido —expliqué y recuperé una risa de su lado.

—Puede ser intimidante, pero son geniales. El Sr. Kim me dijo que todavía no estás segura… —dijo la mujer mayor.

—No… no estoy segura. No quiero ningún tatuaje —Mi voz sonó grosera sin que yo lo supiera. La chica más joven a su lado puso los ojos en blanco antes de salir de mi habitación.

—Bien… Por el tatuaje, estabas a punto de conseguirlo, pensé que eras… ya sabes, una persona genial, pero… ya está.

—¿Qué tipo de tatuaje era? —Pregunté, pero solo obtuve:

—Eso no lo voy a decir ahora… que tengas un buen día.

Las mujeres se fueron y yo estaba con Hye soo que me miraba fijamente. Como si me importara. Entré en mi armario para ponerme un vestido y salí a escuchar:

—¿Por qué no puedes ser obediente? —Arqueé las cejas y sentí náuseas.

—Hye soo, no necesitamos hablar. ¿Por qué no sigues en silencio como antes? Preferiré eso…

—¿Disculpa? No actúes como si fueras mejor que sus otras mujeres. Aceptaste dinero para estar con él. Todos en esta casa lo saben. Puede pedir un tatuaje si quiere —Hye soo esbozó mientras yo sabía que no tenía una sola célula cerebral que desperdiciar con ella.

—Como sea —dije en voz baja antes de entrar al baño.

El baño estaba listo y le pedí a la criada que se fuera. Todavía me costaba respirar. Me pregunto cómo reaccionará Taehyung después de esto, pero supongo que tenía derecho como ser humano vivo a negarlo. No me gustan los tatuajes.

Salí y encontré a Hye soo sentada en el sillón reclinable.

—Me pregunto si realmente no quieres que hable, porque podría ser la única persona en esta tierra que conoce a tu esposo —No lo sé, pero su declaración realmente me asustó.

—No… no quiero conocerlo. Sé lo suficiente sobre él. No puedes decir nada que cambie su imagen. Él… es un psicópata —

—No es su culpa. Fue construido para actuar así —Su explicación me amargó la boca.

—¿Cómo qué? Ya no es un niño. Él es el único responsable de sus acciones —miré a Hye soo por unos segundos y ella estaba paseando como se supone que lo hacen las personas de su edad.

Salté sobre mi cama para dormir un poco cuando la escuché decir:

—Tenía tres años cuando lo vi por primera vez. En una mesa interminable, estaba sentado solo. Había todo lo que a un niño le encantaría, pero habían pasado dos días desde que se negó a comer… Tenía una cuidadora que fue despedida porque la sorprendieron sosteniendo a Taehyung en sus brazos. Sin embargo, no fue su culpa, ella estaba cuidando a Taehyung desde su nacimiento y no tenía hijos propios. En la investigación, también se descubrió que ella solía referirse a él como su hijo y Taehyung había comenzado a llamarla a su madre. Se reveló que Taehyung a menudo había compartido sus juguetes y chocolates con ella.

Ella hizo una pausa. Tal vez esperaba que yo hablara, pero no lo hice.

—No abrazar era una regla. A nadie se le permitía abrazar o consentir a Taehyung… sin importar qué. Era parte de su entrenamiento, su abuelo estaba tratando de inculcarle algo desde el principio. Y, no tener apegos a los humanos siempre había encabezado la lista… no ser tolerante, odiar a los pobres, no ver a alguien más que para ganar, y debía pensar que todos no son más importantes que él, entre otros. Nos pidieron que lo tratáramos como a la realeza. Kim tiene una regla. No quitan a sus herederos de sus esposas. Al hacerlo, tienen total autoridad sobre la crianza del niño.