Ven aquí —dijo aflojando su corbata y yo temblé.
—¿Tae...? ¿Taehyung? —Inhalé bruscamente. Me di cuenta de que no iba a conseguir nada bueno.
—No pongas a prueba mi paciencia y trae tu bonito culo aquí —Haciendo acopio de todas mis fuerzas me dirigí hacia él. Y, no tardó en tirar de mi mano para que me sentara en su muslo.
Yo parpadeaba mirando su boca que casi tocaba mi pecho.
—¿Qué te hace pensar que puedes responderme? ¿Quién eres tú? ¿Mi profesora? ¿Mi madre? ¿Te parezco un niño...?
—Tae... —Traté de aclarar.
—¡Cierra la boca!, aún no he terminado... —Siseó haciendo que me quedara quieta.
—Te tengo aquí para que me relajes. No para tener otra boca con la que lidiar —Mis ojos se llenaron de lágrimas mientras desviaba la mirada para ver a dos hombres que, aunque estaban lejos, ahora sabían que era una esclava de él—. Te lo dije... Odio la boca inteligente en las mujeres... Y recuerda, Lisa... se supone que las personas como tú solo deben mantener la boca cerrada y seguir al hombre del que deciden depender.
Su mano en mi muslo se hizo fuerte, pero rápidamente asentí tratando de tragar lo mejor posible este nudo lleno de emociones en mi garganta.
—¿De qué me sirve tu amor si ni siquiera puedes ser alguien que valga la pena conservar para mí...? —Sonrió mirando mi cara mientras yo me quedaba callada. Sabía que había fracasado estrepitosamente.
Llegó la noche y lo esperé. No apareció tampoco en el comedor. En ese momento, supe que estaba con otra persona.
Me quedé despierta en mi cama. Podía sentir que él ya no estaba interesado en mi cuerpo. ¿Cómo iba a convencerle de que me dejara tener a mi bebé?
Llegó la mañana y supuse que me quedé dormida. Ya eran más de las nueve y me pregunto por qué no me despertó. Al entrar en el armario noté todo intacto. Incluso en el baño pude notar que nadie se bañó. Me pregunto si no llegó a casa anoche. Pero su coche sí llegó a la mansión.
Eran más de las doce cuando encontré al Mayordomo en mi puerta.
—Señora Kim... el señor Kim ha pedido que haga la maleta para dos días. El chófer de la oficina está aquí para recibirla.
¿Qué pretende? Me pregunté y empaqué tres vestidos con muchas joyas y dos tacones. Tardé media hora mientras sentía mis músculos doloridos. En veinte minutos paramos delante de un enorme edificio. Tragué saliva cuando el conductor me abrió la puerta.
Después de tanto tiempo, me encontraba en un lugar normal. Había gente alrededor. Pero sin intentarlo sabía que aquí nadie conocería mi idioma y además su conductor caminaba a mi lado.
—¿Dónde estamos? —Pregunté.
—Estamos en la sede, Sra. Kim —Esta vez me di cuenta de que era el chófer personal de Taehyung...
Le seguí para entrar en el edificio. Su conductor utilizó un pase para hacernos entrar. La recepción era lo primero que se veía al entrar. Giramos a la izquierda y caminamos hasta que apareció un ascensor. También había otros cuatro ascensores. Encontré a una mujer y a otros dos hombres que pasaban y me miraron fijamente antes de pasar por mi lado. Por supuesto, la culpa la tuvo mi vestido. Pero no tenía otra opción sabiendo que él querría que viera en esto. Nunca en mi vida había pensado en convertirme en una marioneta con el pretexto de una esposa.
Giré la cabeza hacia el ascensor y subí. El hombre pulsó el treinta y uno y nos quedamos en absoluto silencio. El ascensor se abrió para revelar un espacio de oficina que tenía algunos asientos a nuestra derecha y una mujer detrás de un escritorio a nuestra izquierda. Ella levantó la cabeza haciendo que el respondiera.
—Es la señora Kim —Esto hizo que la chica se levantara de su asiento. Llevaba una ropa muy profesional que me decía que no era una de ellas.
—El Sr. Kim está en la sala de juntas... —Respondió, pero fue
cortada por Shofer—Está bien. La está esperando —el shofer se adelantó llevándonos a una zona de estar y ese lugar tenía cuatro puertas diferentes. Tomamos la de la izquierda hasta una puerta enorme, al abrirla para mí salté al escuchar los gritos de Taehyung. Entré y me encontré con cinco hombres sentados mientras Taehyung tenía el pelo un poco revuelto.
—¡Sí, estoy loco! ¡Por el amor de Dios!, se supone que eres el mejor. No eres tú quien ha perdido... soy yo... he perdido este caso por... —Sus ojos se posaron en mí y gritó hacia el hombre—. ¡Vete a la mierda...! Y, tú... —señaló a Hwang mientras los demás empezaban a marcharse—. Conoce a esa persona y, sácalo de esto...
Me hice a un lado para dejar pasar a esos señores, pero me sudaron las manos al encontrarlo dando las largas zancadas hacia mí. Puse mis manos en su pecho antes de que me pegara a la pared de atrás. Hwang seguía saliendo mientras empezaba a subirme el vestido. Solo llevaba la camisa de vestir y le sujeté los hombros cuando me levantó. Parecía frustrado, pero luego se detuvo a mirarme como si recordara algo. Dejándome ir se dirigió al asiento principal de la mesa y cogió el teléfono fijo.
—¿Hwang? Tiene hijos, ¿verdad? Secuestra al más joven. Que ella decida si quiere justicia para su marido o prefiere la seguridad para sus hijos... sí... lo sé —Pude ver como sus expresiones faciales se relajaron. Y, eso me dio ganas de vomitar.
Esta persona era un demonio.
—Ven aquí —me miró abriendo los brazos. Caminé hacia él y la sonrisa en su rostro me decía que disfrutaba haciéndome escandalizar. Solo podía esperar que no supiera lo asqueroso que me parecía. Un niño... estaba secuestrando a un niño. ¿Cómo puedo esperar que sea un padre? Pero supongo que no debo esperar que sea un padre. Mientras me dejé ser solo la madre, estaría bien para mí.
—¿Quieres hablar de algo? —Preguntó haciendo que se me secara la garganta...
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CRUEL (Taelice)
FanfictionKim Taehyung un hombre que es conocido en todo asia, europa y norte america. Siendo uno de los hombres mas ricos de asia, con una imagen conservada, y una reputacion a seguir. Pero nadie sabe que en verdad el es un hombre insencible, narcicista y s...