Eighteen

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El desfile fue de lo más aburrido para Jimin, como era la primera vez que se presentaba en un evento social desde hace un año, debido a ello fue la sensación del momento y tuvo sobre él tanto a la prensa como a otros invitados, especialmente empresarios interesados en que sea la imagen de sus marcas, pero para él, ya llevaba un tiempo en que el modelaje y ese tipo de cosas ya no le llamaban la atención, especialmente porque sus pocas pinturas eran todo un éxito.

Era una suerte que Hoseok le acompañaba, siempre lo cuidaba muy bien y lo salvaba de situaciones incómodas.

No vio a Jungkook en ninguna parte y eso vaya que lo decepcionó, ahora que iba rumbo a la fiesta, esperaba verlo o se iría lo más pronto posible.

Una corta risa de Hoseok le hizo apartar la mirada de la ventana hacia él, encontrándolo entretenido en su celular.

-Tan rápido eres tendencia en Twitter ya, ¿Listo para recibir infinidad de propuestas? Probablemente empezará desde ahora en la cena.

Jimin hizo una mueca y volvió a desviar su mirada, ya había tenido suficiente en el desfile, por ese tipo de razones era que no le gustaba salir a eventos públicos, admitía que le gustaba la atención, pero no la excesiva ya que su lobo se ponía muy nervioso.

-Por eso quería traer mis lentes y cubrebocas, así disimulo un poco.

-Entonces te hubieran atacado en las redes, Jimin, mejor que digan cosas buenas, recuerda que tienes que ayudarle a la empresa de tu padre, ahora que volvió a ser independiente, han perdido marcas.

Jimin apretó sus manos hasta hacerlas puño, por supuesto que el imbécil de Kangjoon se encargaría de quitarle accionista al cancelar el contrato entre las empresas.

-Tienes razón, ¿Debería de aceptar algunas propuestas, no?

-Lo veremos en el momento, hay que saber aceptar a las personas correctas.

Jimin asintió y no volvieron a hablar lo quedaba de viaje, Jimin supo que habían llegado al escuchar el alboroto, con solo dar un vistazo al frente y ver la aglomeración de personas, sintió como su lobo se inquietaba.

Inspiró profundo y se preparó, toda la situación le parecía innecesaria, pero a Tiffany le encantaba exagerar sus eventos, así que solo rodó los ojos cuando vio la alfombra roja en
la calle.

Una vez estacionados en la acera, el conductor bajó y abrió la puerta al lado de Hoseok quien salió primero y tendió su mano para Jimin. El omega se deslizó hacia afuera y tomó la mano de Hoseok para ayudarse, luego la soltó y se sujetó de su antebrazo.

Los flashes de las cámaras lo segaron instantáneamente hasta que se acostumbró y con una gran sonrisa que no era del todo genuina, caminó al lado de su mejor amigo hasta llegar a la entrada, el portero ni siquiera pidió su nombre, lo dejó entrar sin percances.

-Odio los flashes, no puedo ver.-refunfuñó Hoseok caminando al interior del lujoso hotel.

-Ya se te pasará, tranquilo, a la salida buscamos la puerta de salida de emergencia ¿De acuerdo?-murmuró Jimin ahora.

Hoseok asintió y un hombre de edad avanzada se acercó para llevarlos al salón principal.

Pasaron por un pasillo largo que tenía tres puertas, una a cada lado, llegaron a la última, la cual el hombre les abrió y un gran salón iluminado los recibió.

-Ugh.-murmuró Jimin viendo lo lleno que estaba, había una pista de baile donde solo se veían unos cuantos adolescentes con pasos epilépticos, a cada lado había mesas que los rodeaban y en la pared derecha, un tanto alejadas, se encontraban otras mesas llenas de comida.

Por suerte era un salón abierto, Jimin podía ver las puertas de vidrio del fondo del salón, estas se encontraban abiertas y lograba vislumbrar desde su lugar, un bonito jardín.

Uno muy ideal para que un omega y un alfa puedan hablar sin interrupciones.

-¡Jimin!

El peliazul contuvo la mueca que amenazó con salir al escuchar aquella voz femenina que reconoció fácilmente.

Giró en la dirección de aquella voz y no se sorprendió al ver a Tiffany caminando con un vestido corto de color dorado hacia él, junto a ella estaba Taemin vestido con colores similares.

Si Tiffany no fuera tan interesada respecto a adquirir fama a costa de él, tal vez le caería bien, pero con lo poco que trató con ella en el pasado y como realmente sólo estuvo presente cuando necesitó un modelo y nada más, no creía que algún día podría considerarla una amiga.

-Tiffany.-dijo con una pequeña sonrisa.

La omega de cabello castaño y cuerpo delgado abrió los brazos para envolverlo en un abrazo que por supuesto no correspondió porque tampoco era hipócrita , solo estaba ahí para encontrar a su presa.

Taemin frente a él solo alzó una ceja con disgusto y Jimin no dudó en regresar el gesto.

-Me sorprende que hayas venido, nunca te apareces.-dijo la omega separándose por fin de él y mirando ahora a Hoseok por un segundo.-Y con tu novio por lo que veo.

Jimin sonrió un poco y quiso rodar los ojos, bueno, no era la primera vez que decían que Hoseok era su pareja, ya estaba acostumbrado.

-Si bueno, siendo honesto vine porque estoy buscando a alguien.-fue lo único que dijo Jimin cruzándose de brazos y mirando a su alrededor.

 
-¿Y no podías siquiera seguir el reglamento de vestimenta?-preguntó ahora Taemin con fastidio.

Le pareció ridículo y muy gastado, los omegas de blanco, alfas de negro, los que todavía no se presentaban debían usar azul al igual que los betas.

Jimin vestía con un pantalón negro ajustado a sus glúteos y muslos, una camisa roja con decorados blancos , sus zapatillas siendo del mismo color que sus pantalones, de igual forma Hoseok vestía de negro con la camisa de botones color crema.

Se maquilló un poco, casi ni se notaba a excepción de sus ojos donde se veía perfectamente su delineado.

Jimin observó un poco su ropa y Tiffany rió con nerviosismo.

-Pero está bien, lo más seguro es que Jimin no leyó lo de la etiqueta.-dijo ella como si nada, no queriendo problemas.-Así que ¿A quién...?

Tiffany no completó su pregunta debido a que Taemin le sujetó del brazo con un poco de fuerza de manera repentina, Jimin solo pudo escuchar que le murmuraba cerca de su rostro un "es él".

Jimin con su instinto de curioso y chismoso, se giró para ver de quien hablaban, al encontrarlo, su corazón latió de prisa al ver el motivo por el que estaba en ese evento.

Sonrió sin poder evitarlo, su lobo removiéndose feliz por verlo, pero un segundo después, gruñó al ver que no estaba solo.

¿Cómo se supone que hablaría con Jungkook si de su brazo traía prendado al gamma del que Hyejin le habló?

En esos momentos el alfa a cierta distancia alzó la mirada y se encontró directamente con sus ojos, se vio sorprendido al encontrarle, la sonrisa de Jimin creció más, pasó su mano por su cuello con malicia, Jungkook removió la corbata negra que llevaba puesta, hizo un corto asentimiento y sonrió un poco con nerviosismo, como si le estuviera saludando de esa forma.

¿No planeaba acercarse?

De todas formas y confirmando ahora que el castaño se encontraba ahí, sabía que podrían hablar y aclarar todo como tanto lo necesitaba.

Daiyō -Kookmin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora