Twenty three

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Jimin revolvió con la cucharita de plata el café que se encontraba en la pequeña taza blanca en sus manos, eran las seis y cuarenta de la mañana, el sol ya alumbraba alto en el cielo y para ser honestos, lo odiaba, aunque lo preferia mil veces, estar en la terraza del restaurante del hotel era mucho que mejor a estar dentro donde las miradas ansiosas de las personas que estaban ahí le siguieron apenas entró,

-Lo lamento mucho Jimin.-dijo Jungkook y el peliazul le miró de inmediato.-Lo que sucedió anoche está en boca de todos, mi equipo se está encargando de aclarar todo para que esto no nos afecte.

El omega alzó su taza y la llevó a sus labios para darle un sorbo al liquido amargo y caliente.

Se preguntaba porqué Jungkook se estaba disculpando cuando él simplemente le ayudó contra la basura esa.

-Deja de disculparte, Jeon.-murmuró para luego suspirar.-Ya suponía que lo que pasó daría de que hablar ahora.

Jungkook mordisqueó su labio inferior mientras parecía meditar en algo de hecho se notaba que algo quería preguntar pero que no se atrevía y suponiendo lo que era, Jimin le brindó la respuesta a su pregunta silenciosa.

-Kangjoon era mi pareja destinada, hace como una semana corté nuestro lazo y antes de que empieces a pedir perdón otra vez, lo hice porque llevaba mucho tiempo queriendo romperlo, él no es lo que necesito ni lo que necesitaré, no porque te contestó para mí celo.

De hecho, era lo único bueno que había hecho para él en tantos años de conocerlo.

El alfa se vio sorprendido pero no duró tanto hasta que la molestia se reflejó en su rostro, se acomodó mejor en su asiento mientras apretaba con demasiada fuerza la servilleta de tela blanca con la que había estado jugueteando.

-¿Pareja?-repitió como si le costara creerlo.
Y como no, no podía entender cómo alguien podía ofrecer a su pareja a un sustituto.

Jimin dejó la taza sobre la mesa y se inclinó sobre la mesa para así poder posar su mano sobre la de Jungkook, era una suerte que la mesa no fuera tan grande y así pudo hacerlo sin problemas.

-No quiero que te molestes por esa escoria, de hecho estoy agradecido de que me dieras una excusa para acabar con él, no éramos para nada una pareja, él es un puto alfa heterosexual que quiso mantenerme escondido porque no estaba de acuerdo en estar con otro hombre.

-Es un idiota.-gruñó Jungkook tratando de calmarse y relajando sus manos.

-Y uno de los grandes.-concordó Jimin divertido.-En fin, no sé que buscaba al venir anoche, pero de todas formas solo iba a perder el tiempo.

Jungkook no dijo nada y simplemente bajó la mirada ya que igual se sentía culpable aunque Jimin dijera que no era su culpa, si él hubiera sabido de esta información mucho antes, probablemente se hubiera ido a los golpes directamente contra Kangjoon.

Se sintió fatal con el solo recuerdo de Jimin en su celo, diciéndole en indirectas que Kangjoon no le quería.

Un apretón sobre su mano fue lo que hizo que alzara la mirada hacia el omega quien le sonrió ladino.

-No pongas esa cara, ni siquiera Kangjoon se mostró tan arrepentido como tú te ves.-murmuró Jimin mientras se alejaba y se cruzaba de brazos.-Aunque más te vale que no estés arrepentido de haber follado conmigo porque si es así te patearé.

Jungkook soltó una corta risa y negó.

-Te lo dijo aquella mañana antes de irme y lo digo ahora de nuevo.-murmuró en tono suave.-No me arrepiento de haber estado contigo.

-Más te vale.-dijo Jimin tomando su taza otra vez y posicionándola contra sus labios.-Porque habrá más de ahora en adelante.

El alfa que había decidido a prestarle atención a su taza con té de manzanilla no captó las palabras al instante, de hecho consideró haberse distraído y entendido mal, por ello, con las cejas fruncidas miró confundido al omega.

Daiyō -Kookmin-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora