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— FLEUR DELACOUR —
La mañana después de la noche del baile de Navidad fue muy emotiva. Cassiopeia y Fred se despertaron temprano para ir a las cocinas donde se encargaron de pedirle amablemente a los elfos si preparaban pastas con cortes de res y jugo de arándanos, la comida favorita de Emma.
Cuando iban de regreso a la torre de Gryffindor se sorprendieron de lo solo que se veía el castillo. La mayoría debía estar durmiendo.
— ¡Oh no! — Exclamó Cassiopeia cuando llegaron a las escaleras del dormitorio femenino.
Primero subió a dejar la comida y regreso, Fred se subió en la espalda de Cassiopeia y la chica, difícilmente, logro llegar hasta el final.
Fred se bajó y tomo la comida, mientras Cassiopeia entraba a su habitación. El se quedaría afuera mientras Cassiopeia entraba, después saldría por el.
Cassiopeia entro y busco a las chicas, pero las encontró en la cama de Emma. Estaban las tres abrazadas o bueno, Stephanie y Leila abrazaban a Emma. Aún tenían sus vestidos puestos y el maquillaje de la chica Lupin estaba corrido.
Suspiro y se acercó a la pelirroja para comenzar a moverla. Stephanie se despertó pareciendo desorientada, pero al ver a su alrededor recordó todo lo sucedido la noche anterior. Leila se despertó al sentir que Stephanie lo hacía.
— ¿Que hora es? — preguntó la rubia.
— Las nueve o algo así — Respondió Cassiopeia mientras abría la puerta del baño y comenzaba a preparar un baño para Emma.
— Lloro demasiado — Stephanie entro al baño.
— Lo se — Le dijo Cassiopeia. — Leila y tú pueden dormir, Fred y yo nos encargaremos de Emma. La vamos a distraer.
— ¿Que harán? — Preguntó la pelirroja.
— No lo sé — Dijo Cassiopeia — Creo que Fred quiere mostrarle los nuevos sortilegios Weasley.
Después, Cassiopeia fue la encargada de despertar a Emma. Se sentó a un lado de ella en la cama y suspiro antes de comenzar a moverla.
Emma abrió los ojos y por la luz los volvió a cerrar. Después se sentó y se froto con sus manos los ojos. Todo lo sucedido la noche anterior llegaron como flashbacks a su mente. De pronto, una tristeza invadió su cuerpo y no pudo evitar soltar un sollozo mientras llevaba sus manos a su rostro.
Cassiopeia se acercó a ella y la rodeo con sus brazos mientras dejaba caricias en su cabeza.
— Toma una ducha — Le dijo Cassiopeia a Emma — He preparado el baño para ti.
Emma se separó de Cassiopeia y la Black le comenzó a limpiar las lágrimas.
— Ve, toma un baño y regresas para desayunar — Le dijo Cassiopeia — Eres Emma Lupin, puedes con todo.
