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— DESASTROSO BAILE —
Los seis campeones y sus parejas entraron al baile, hubo expresiones de todo tipo pero claramente abundaban las de desconcierto.
Ver a Stephanie Potter del brazo de Draco Malfoy fue una total sorpresa para todos. Era la pareja inesperada.
Para nadie paso desapercibido la sonrisa incómoda que tenía Emma Lupin en su rostro, sin duda alguna le sucedía algo. Harry tenía cara de póker y parecía no querer estar ahí.
Por primera vez, Cassandra Stivienson se dio cuenta que algo pasaba ahí.
Los campeones se sentaron en la mesa junto a los directores de los tres colegios, Ludo Bagman y Percy Weasley, al parecer en el lugar de Barty Crouch.
— ¡Weatherby! — Exclamó Fred hacia su hermano.
— Fred — Dijo el mientras pasaba su mirada a Cassiopeia — Cassie.
— Percy, ¿que tal? — Saludo la chica.
— Tratando que todo vaya bien, el señor Crouch está enfermo y como su asistente personal me ha tocado asistir en su nombre a varios eventos. Por cierto, felicidades por superar la primera prueba. — Dijo el y Cassie asintió agradecida.
Cassiopeia obviamente no tardó en pedir que le tomaran una foto junto a sus tres amigas, otra con Fred y otra con Draco, por petición de el.
Se sentaron y rápidamente cada pareja se sumergió en una plática distinta. Mientras Hermione y Krum hablaban sobre sus respectivas escuelas, Fleur Delacour se dedicaba a comparar Beauxbatons con Hogwarts y Roger Davies, demasiado idiotizado para responder algo, solo le daba la razón. Fred, Cassiopeia, Stephanie y Draco hablaban sobre Quidditch, mientras Harry hablaba con Percy y Emma se quedaba en silencio.
— ¿Por que Potter ignora a Lupin?— Preguntó Draco en voz baja y los tres se miraron. Después Stephanie acercó su boca al oído de Draco comenzando a susurrar todo lo sucedido los últimos meses.
Draco sintió que los cabellos de su nuca se erizaron ante el aliento de la chica al susurrarle al oído. No podía creer que el chico fuera así, después de literalmente alejar a cualquier chico que tuviera intenciones de pretenderla. El había sido testigo de como Harry había amenazado a su amigo Theodore Nott, el chico Nott decidió alejarse para no generarle algún problema a Emma, pero no por cobarde.
Cuando Stephanie terminó y se alejo, Draco fue el que se acercó ahora al oído de la pelirroja para contarle lo de Nott. Harry observaba eso totalmente enojado.
Fred y Cassiopeia, sin pena alguna, habían comenzado a besarse mientras Madame Máxime los examinaba con aparente incomodidad.
— ¡Ay, el amor! — Exclamaba Dumbledore mientras se inclinaba en su plato — Chuletas de cerdo.
