Limbo

#5

Desperté sobre las seis de la mañana, llegué a dormir un poco más como me prometí, pero no tanto como a Minho le hubiese gustado supongo. Tenía que tomarme la medicina. Me levanté un tanto resacoso, intenté no molestar a Minho que dormía plácidamente, me vestí y salí para fuera, a prepararles el desayuno a los miembros. Primero debía tomarme la medicación, así que desayuné algo ligero.

- Un kiwi... y ah sí. Un yogurt natural.... - Estaba todo en un silencio absoluto, desayuné con calma, y para cuando dieron y cuarto me puse manos a la obra.

I.N y Seungmin no tardarían mucho en despertar, puesto que son los primeros que dejan la casa. Así que les preparé a ellos primero las tostadas, el café y algo de fruta para aligerar. Me puse los cascos y decidí ponerme una playlist de música soft, para seguir lo más tranquilo que pudiese antes de que llegasen los torbellinos.

- Buenos días hyung. - Dijo I.N bostezando, entrando con los ojos cerrados aún. Sonreí.

- Buenos días Jeongin, ¿qué tal dormiste? - Le pregunté en lo que cogía asiento en la mesa y yo le acercaba el desayuno. Seungmin no tardó en entrar también. - Buenos días.

- Buenos días. - Responde adormilado.

- Bien, pero hubiese sido mejor acostarme tres horas antes por lo mínimo. - Contesta I.N.

- Sí, unas cuantas horas más de sueño hubieran venido genial. - Apoya Seungmin a la afirmación de I.N.

- Bueno tú al menos vives aquí en Seúl, así que podrás dormir en cuanto llegues a casa.

- Tu puedes dormir en el tren Jeongin. - Le dije para darle animo también. - Así se te harán más cortas las cuatro horas de viaje. - El asiente.

- Gracias por el desayuno Channie hyung. - Señala Seungmin. Les sonrío, y sigo con el desayuno de los demás, mientras ellos comen e intercambian sus planes de vacaciones, preparo también unas cuantas pastillas para los borrachos de Han, Felix, Hyunjin y Minho.

- ¿Tú que harás estas vacaciones aquí hyung? - Me pregunta I.N. Tomo asiento entre ellos, el desayuno para los demás ya está preparado, así que pueden ir desayunando nada más se levanten.

- Ah... pues no lo sé aún. Tal vez salga por ahí de paseo, intentaré trabajar en el siguiente álbum.

- Wow, Wow. WOW. Para el carro hyung. ¡¿De verdad seguirás trabajando en vacaciones?! - Dice I.N negando con indignación. - Tómate un respiro, tienes preparados por lo menos los próximos tres años de nuestra carrera musical. Ese álbum puede esperar hasta dentro de dos años por lo menos.

- Sí, Jeongin tiene razón hyung. - Salta Han justo detrás de Hyunjin, quien aparecía con una de sus peores caras. Automáticamente todos ríen.

- Creo que no os ha sentado muy bien el alcohol de ayer. Nunca os he visto con tan mala cara.

- Si no quieres morir, calla esa pequeña bocaza que tienes Kim Seungmin. - Dice de manera amenazante Hyunjin.

- Uy, pasar tanto tiempo con Lee Know hyung está afectando a las pocas neuronas que tienes ahí arriba.

Comienzan a batallar de manera amistosa, niego despacio aguantando la risa. Les voy a echar de menos estas vacaciones. Toman asiento y comenzamos a conversar con normalidad, compartimos planes, experiencias de navidades pasadas, bromeamos, nos reímos... así empieza nuestro día de Navidad, y no puedo estar más feliz.

- Bueno bueno bueeeno, la parejita feliz despertó. Aplausos. - Dice Han burlándose de Changbin y Felix. Ambos sonríen. Toman asiento en la mesa y el desayuno sigue.

- Ah cierto casi se me olvida, tomad. - Me acerco a una de las estanterías de la cocina y saco tres pastillas. - Para vosotros, para que se os pase antes la resaca.

- WUAA, gracias hyung. - Dicen los borrachos de la noche haciendo gestos llorones.

- No sabía si seguir haciéndome el duro, pero realmente estaba falleciendo por dentro, tengo un dolor de cabeza horrible. - Confiesa Han, con cara de póker.

- Igual. - Contestan también Hyunjin y Felix.

- Sois un caso perdido. - Dice Changbin, en lo que se lleva su tostada a la boca.

- Procurad beber por lo mínimo dos litros de agua, seguro seguís con el alcohol en vena. - Se burla Seungmin.

La charla sigue.

- Y Minho ¿aún no despierta? - Me pregunta Changbin para que solo lo escuche yo, en lo que el resto debaten quien fue el más consentido en los regalos de ayer.

- Nop. - Contesto, alzando los hombros para hacerle saber que no tengo idea. - Ayer iba demasiado mal.

- ¿Dormiste con él? - Asiento. Y Changbin sube las cejas pervertidamente, yo le levanto el puño, pero no para. - No imagines tantas cosas, porque no pasó nada.

- Bueno, tendré que creerte pues Chan. - Le miré amenazante, pero no para de reírse de la situación. Suspiro y sonrío.

- Me invitó a que gastásemos las entradas para el camping esta semana, al parecer sus padres han decidido hacer una escapada ellos dos solos antes de año nuevo. Por lo que Minho no vuelve a Gimpo hasta esas fechas. - Changbin pega un pequeño brinco en la silla y empieza a aplaudir sin hacer ruido. Yo niego sonrojándome. - Pero dudo que se acuerde, o que me lo vuelva a sugerir hoy para ir, así que no te emociones tanto. Iba muy pedo Bin. - Changbin me pega una pequeña patada por debajo de la mesa.

- Deja de ser tan pesimista, confía en él. Lo mismo te da una sorpresa.

- Dudo que le diga que sí, realmente no sé qué hacer en caso de que me lo vuelva a proponer. - Changbin se lleva una mano a la cara, masajeándose los ojos, suspira y me mira no creyéndose lo que le acabo de decir.

- ¿De verdad lo rechazarás?, Bang Christopher Chan, por la virgen. Tu solo di que sí. - Dice Changbin asintiendo. - Y si en mitad de la semana, decides que fue mala idea, entonces te vienes y Minho no te volverá a dirigir la palabra ni a contar contigo para algún plan nunca más. - Sonríe sarcásticamente, yo niego y volteo mis ojos.

- Bueno, ya veré que hago, hasta que se levante tengo tiempo para pensar la respuesta.

Y como si supiese que estábamos hablando de él, aparece Minho por la puerta.

- Hablando del rey de Roma. - Dice Changbin con una sonrisilla en sus labios, en lo que nos miramos de reojo.

- Wow hyung, tu sí que tienes mala cara. - Dice Hyunjin riéndose, arrepintiéndose al segundo, pues la mirada de asco que le dedica Minho es como para correr y temer por su vida. Todos ríen. Minho no se caracteriza por tener muy buenos despertares, y supongo que con la resaca que tendrá que llevar encima menos todavía.

Me levanto y voy hacia la cocina con Minho. El parece molesto, dudo que sea por lo que le ha dicho Hyunjin en sí. Tal vez sí que recuerda un poco de lo que pasó ayer por la noche.

- Buenos días. - Le digo, el mira hacia la encimera, en lo que saca un té verde de uno de los cajones.

- Hola. - Dice en un susurro prácticamente y voz ronca.

- ¿Pudiste dormir bien? ¿o te molesté un poco? - Le miro de reojo, en lo que le cojo otra pastilla para él.

- Si. No. - Bueno, supongo que le tendré que dar un poco de tiempo para que se espabile.

- Ten, tómala. Te vendrá bien para aliviar la resaca.

- Gracias.

De repente, comienza a sonar mi teléfono. Todos pasan a prestarme atención a mí. Saco el móvil del bolsillo de los pantalones y veo que es un número bastante largo. Minho mira de reojo lo más disimuladamente que puede, haciendo ver como que no le importa.

- Enseguida vengo, tengo que contestar. - Le dedico una mirada a Changbin, este asiente, y salgo del apartamento, cierro la puerta tras de mí y tomo aire.

Cojo la llamada.

- ¿Dígame?

Sr. Bang. -

- Sí.

Soy Seok. -

- Ah sí buenas, dígame doctor.