La dulce voz de Jimin provocó que el corazón de Jungkook latiera fuertemente por la emoción, el pelinegro nunca creyó que el día en que pudiera escuchar hablar al títere de forma tan clara llegaría, pero ahí estaba.
Le había cantado el abecedario para lograr calmarlo, y lo logró.
La respiración de Jungkook ahora se encontraba de forma regular, podía inhalar y exhalar como lo hace normalmente, las lágrimas habían cesado, el sudor se había detenido y agradeció mucho por ello.
Nunca había experimentado un ataque de pánico como el que tuvo y joder, la sensación era horrible.
No quería experimentar algo así otra vez.
La mirada del sastre estaba enfocada en aquellos ojos cafés que lo veían también a él y quiso retroceder el tiempo para que pudiera escucharlo cantar una vez más porque ahora Jimin estaba callado, pero no dejaba de acariciarle sus mejillas.
No hasta que estuviera seguro de que todo había pasado.
Jungkook no pudo evitar sentir la presencia de alguien más observándolos, se alejó un poco de la cercanía que tenía con el rubio y volteó su cabeza para encontrarse consigo mismo en aquella versión títere de su pesadilla, de pie en la bañera, mirando a ambos sin expresión alguna, sólo estaba ahí de pie, inmóvil, como si estuviera en pausa, como si se hubiera congelado... pero no dejaba de causar miedo y perturbación.
El pelinegro soltó un suspiro pesado.
— Lárgate por favor...— comentó cansando y en voz baja sorbiendo su nariz.
Jimin observó de igual manera a la dirección que estaba viendo Jungkook, frunciendo el entrecejo al no encontrar nada y sin entender para quién eran esas palabras.
Pero algo tenía en claro, sea lo que sea, estaba atormentando a Jungkook así que con su mano tocó el cuello del pelinegro para que regresara a verlo y lo acercó hacia él haciendo que Jungkook escondiera su cabeza en el hueco de su cuello mientras lo estrechaba con sus brazos.
Jungkook podía respirar el dulce aroma natural que desprendía la piel del títere, se sentía tan bien... se sentía relajado, se sentía tranquilo.
Se sentía en paz.
Y Jungkook no la había sentido desde hace semanas desde que todo comenzó.
Ese pequeño rinconcito se sentía a hogar...
Nuevamente, el pelinegro miró de reojo a la dirección donde se encontraba Jungkook títere, pero para su sorpresa, este ya no estaba ahí.
Cerró sus ojos suspirando de alivio y se quedó en aquel espacio por unos minutos más hasta que comenzó a hablar.
— Estoy hecho mierda... soy un puto desastre.— dijo en su susurro, arrugando su cara.
Jimin no contestó, simplemente siguió acunando a Jungkook en sus brazos.
El pelinegro aspiró el aroma ajeno una vez más antes de volver a hablar.
— Así que ya puedes hablar...— sonrío olvidándose del episodio que había tenido para enfocarse ahora en el hecho de que Jimin por fin le habló.
— Mmmm...
Jungkook río un poco.
— ¿Ya no dirás nada?
Silencio.
— ¿Jimin?
Silencio.
Jungkook se separó del rubio y se puso frente a él, dándose cuenta de la enorme lucha interna que estaba teniendo el títere para quedarse despierto ya que sus ojitos se estaban cerrando, pero al notar a Jungkook frente a él, parpadeó un par de veces para tratar de regularse y seguir atento.
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Títere - Kookmin (+18)
Fantasy"Sí yo jalo de sus cuerdas mi títere me sonríe, sí yo jalo de sus cuerdas me abraza y juega conmigo. Mi títere me alienta y me habla, mi títere me hace sentir acompañado... me hace sentir amado y siento que por primera vez alguien me escucha de verd...