Capítulo 41

10.4K 1.3K 588
                                    



Jungkook suspiraba a la par que arrugaba y arrancaba la quinta hoja del cuaderno que tenía sobre la mesa, tirándola en el suelo y tocando el puente de su nariz, frustrado.

Se había dedicado a realizar diseños de prendas los últimos días, y es que, sabía que su liquidación y ahorros no podían durarle mucho tiempo así que decidió que tal vez era una buena idea comenzar a diseñar y realizar prendas para hacer venta en línea y poder tener algunos ingresos.

Pero la realidad era que no podía concentrarse, se sentía triste y un poco extraño... no tenía mucha motivación y todo el tiempo sobre pensaba cada situación que había ocurrido.

Estaba cansado.

Mentalmente cansado.

El pelinegro alzó la mirada observando a Jungkook títere quién tenía la cabeza apoyada en la palma de su mano, mirándolo con odio y rencor.

— Estoy aburrido, quiero joderme a alguien Jungkook, andas bien desobedi...

— Vete a la mierda.— espetó el sastre arrugando su cara por el repentino dolor de cabeza que sintió. Echó sus mechones hacia atrás y trató de continuar con su trabajo hasta que después de 10 minutos escuchó que tocaban a la puerta.

Jungkook giró su cabeza y se quedó estático por unos segundos, pensando en quién podría ser.

Escuchó que volvieron a tocar a la puerta y decidió levantarse de su lugar, tal vez se trataba de un vecino que necesitaba ayuda o tal vez la señora Hyun.

Arregló ligeramente su camisa y abrió la puerta, quedándose completamente paralizado al ver a la persona frente a él.

Jimin.

Ninguno de los dos pronunció nada mientras se miraban detenidamente, no se habían visto en muchos días, no eran bastantes, pero ellos sentían que había pasado una eternidad y sus corazones no pudieron evitar comenzar a latir nerviosamente.

Y pareciera que el tiempo se detuvo por unos segundos.

Su primera reacción fue acercarse, como dos imanes reaccionando juntos, sintiendo que habían encontrado agua en el desierto, por lo que no pudieron evitar hacer un ademán de abrazarse, queriendo cercanía de forma automática, pero ambos se detuvieron rápidamente cuando sus mentes recordaron todo.

Ellos no estaban juntos.

Jungkook carraspeó su garganta y puso su mano detrás de su nuca. Nervioso.

— Ah... Ji-Jimin... 

¿Qué se supone que debía de decir?

— ¿Qué-qué haces aquí?

Escuchar la voz de Jungkook después de tanto tiempo provocó que los ojos de Jimin brillaran, por lo que no pudo evitar que en su rostro se formara una dulce y nostálgica sonrisa.

El pelinegro se emocionó ante la acción, pero trató de mantenerse sereno y le sonrió de regreso, quiso acercarse un poco más, pero Jimin de repente cambió su expresión a una seria, como si hubiera recordado algo.

Y sí.

Jimin recordó uno de los tantos consejos que venían en el libro y definitivamente no debía estarle sonriendo a su ex así que enderezó su espalda y cambió su rostro, tratándose de ver serio, provocando una mirada curiosa en el pelinegro.

— Ajam... — carraspeó su garganta.—Yo solo vengo a ver a Bam. — lo miró de arriba hacia abajo con el dedo.

Jungkook achicó sus ojos.

Títere - Kookmin (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora