Capítulo 31

11.5K 1.4K 652
                                    


Jimin comenzó a abrir los ojos suavemente a la par que escuchaba los cantos de los pajaritos provenientes del exterior, alzó sus brazos mientras bostezaba y estiraba su cuerpo.

Decidió voltearse para poder saludar a su novio, quién todavía se encontraba durmiendo plácidamente.

Se acercó a él y recostó su torso encima del pecho ajeno, comenzando a ronronear.

Un sonidito salió de la garganta de Jungkook, dándole a entender que se estaba despertando.

— Buenos días.

El pelinegro abrió un ojo nada más para poder visualizar a su novio, y cubrió a Jimin con sus brazos.

— Buenos días, precioso.

Jimin alzó su cabeza y le dejó un beso en la barbilla para luego dejarle uno en sus labios.

— Mmm... que lindo despertar así.— canturreó gustoso.— Ya hasta me dio hambre.— comentó Jungkook moviendo su cabeza hacia un lado y hacia el otro, sugerente.

Pero Jimin no captó el comentario.

— ¿Tienes hambre?— alzó una ceja.— Después de tu cena extra de la madrugada, me sorprendería.— río haciendo dibujitos en el pecho de su novio.

— ¿Eh?— preguntó Jungkook, confuso.

— ¿No te acuerdas?

— ¿De qué?— el pelinegro finalmente abrió los ojos y miró a Jimin rápidamente para tener una respuesta.

El rubio soltó otra risita.

— Sí, en la madrugada sentí que ya no estabas en la cama. Me levanté y vi que te estabas lavando las manos en la cocina. Llevabas puesta la misma sudadera que tienes ahora.— explicó mirando a su novio.

Jungkook ladeó su cabeza, tratando de recordar lo que había pasado la noche anterior.

Él no se había levantado para comer...

Él no...

Ah.

Mierda.

El pelinegro sintió que su pecho se hundía, pero no podía recordar nada.

Dios, ¿por qué no podía recordar nada?

— Dijiste que te habías preparado algo de cenar y luego regresamos a dormir.— concluyó Jimin, sentándose en la cama.

Jungkook se sintió preocupado al no tener claro que había sucedido anoche, sólo recuerda haberse puesto la sudadera, pero... nada más.

¿Jimin lo encontró lavándose las manos?

¿Porque había cenado algo?

Pero...

— Ah sí. Lo recuerdo.— mintió— debe ser el cansancio, amor. Estoy como loco por tanto trabajo.— soltó un bufido.

— ¿Cansancio? ¿Ahora le dirás así a nuestros paseos nocturnos, Kookie?

¿Qué dices?... — pronunció en voz baja.

— ¿Um?

Jungkook negó y sacudió su cabeza, se sentó en la cama y tomó a Jimin, cubriéndolo con sus brazos. — No, nada.— le sonrió y tocó la cadenita del cuello del rubio.— Mmm... hoy es sábado. ¿Qué te parece si nos quedamos en la cama?— bajó su playera ligeramente para poder besarle el hombro con cariño.

— ¿Haciendo qué?— río el rubio por las cosquillas que le provocaban los besos de su novio en su hombro.

— Todo lo que quieras.— Jungkook prosiguió a besar su cuello deleitándose con su suavidad y sabor. — Tú solo pide, yo te lo cumplo.—

Títere - Kookmin (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora