Oh No, Él Es Un Zombie |Quackbur

Sobrevivir

Wilbur y Quackity corrían, tratando de salir del hospital, abrían puertas tras puerta;parecía un laberinto, incluso no conocían esa parte del lugar. Frente a los dos habían dos puertas, estaban bajo presión y abrió la derecha,un mal momento para saber que en esta clínica habia una morgue, al no tener otra salida fueron a ver la puerta de la izquierda, mostraba el pequeño cuartesito de la limpieza.

Sin pensarlo ambos entraron y cerraron, el espacio era reducido, por lo cual ambos estaban apretados e incómodos pero sobretodo asustados.

— ¿¡Viste cuantos eran!?— dijo aterrorizado; por poco lo agarraban si no fuera que el castaño metió a Quackity primero al pequeño espacio.

— Estamos atrapados— se rindió Wilbur. Suspirando y mirando hacia bajo, aún estaba tenso por toda la acción.

— Vamos a morir— Dijo Quackity aún asombrado. Lo cual Wilbur al escuchar soltó un gemido decepcionado.

Wilbur puso su cara en el cuello del pelingro, Quackity miraba hacia la puerta escuchando los intensos ruidos de los infectados. Wil sabía perfectamente la ansia que sentían los zombies al querer probar la carne humana.

—Estamos jodidos — susurró Quackity cuando abrazo al castaño.

Estaban atrapados en un comportamiento de elimpieza. Se preguntaba si los demás estaban vivos, ¿George habrá salido? Podría venir a salvarlos si gritaban, pero eso traería más caníbales. El sonido de golpes en las pared uno tras otro los ponían tenso.

—Wil, por que destruiste L'mangerbug — Quackity comentó, esperando que el castaño aclarará el tema.

—Quackity, no— Wilbur movió su cabeza de una lado a otro mientras se hundía mas en su cuello ,no quería hablar de eso.

—Vamos a morir—miró hacia adelante — Da igual si . . .—

— Simplemente no estaba destinado a ser — interrumpió Wilbur.

— Eres. . .— Quackity tenía miedo, desconfiaba de Wilbur, no lo entendía  y eso temía. Tenía miedo de lo que podría ocultar el castaño.— ¿Eres el malo?—

—¿Soy el villano?— se alejó del cuello  del pelingro para levantar su cabeza y mirar a Quackity en busca de una respuesta.

—No lo se —Quackity tomó su cabeza para atraerlo a cerca de su cuello nuevamente al parecer tenia un efecto calmante para el de la gabardina. Acaricio el pelo del castaño de modo conformante.— No te mentiré Wilbur, te tengo miedo— Quackity sintió como el pelicastaño se tenso ante sus palabras. —No tenias planeado hacerme nada malo ¿cierto?— hubo un silencio.

—No — Wilbur cerró sus ojos— claro que no—

Wilbur no era un tipo en quién confiar, nadie confiaba en el castaño pero Quackity decidió confiar en él, no podía negar el creciente cariño que tenía con el castaño. Mantenerlo cerca de él se sentía tan cómodo y reconfortante; como un lugar seguro.

Sintió un abrazo y un beso rápido en su cuello y en respuesta Quackity lo besó en su cabello. Sintió su cuello húmedo, era las pequeñas gotas que dejaba Wilbur, lágrimas.

Como odiarlo si se veía tan indefeso.

—Quackity, mereces más que esto— musitó el castaño.

— Claro que no, me salvaste la vida muchas veces, y no me dejaste solo— Trato de cambiar la opinión del castaño mientras relataba su primer encuentro.

—no, claro que no— sonrió melancólicamente.

Quackity merecía vivir. No merecía morir por culpa de Wilbur. No dejaría que Quackity muriera, no mientras este vivo.