Oh No, Él Es Un Zombie |Quackbur

Por que lo frágil se puede arreglar

\\\Esto empieza a partir del pequeño paseo de Philza y Wilbur en donde discuten si Tallulah y Quackity debían quedarse en la isla\\\

Detuvo su caminata.

—¿De que hablas?—dijo el mayor mientras miraba a Wilbur con una mirada de extrañeza.

—No puedo ir allá— El castaño tragó saliva observando el grupo y Philza negó con una sonrisa y guió a Wilbur a caminar.—No puedo volver ahí Phil— dijo con una mirada melancolíca mientras seguía el paso sin embargo eso no detuvo a su padre.—Sería un peligro para todos—frunció su cejas para no dejar caer sus lágrimas.—Ellos tienen razón—esas lágrimas no saldrán por que el castaño quiere dejar de dar lástima.

—¿De que estas hablando? Sigue caminando, hace frío y los demás no te quieren cerca—No prestó atención de las palabras de Wilbur, pensó que solo era un vómito de emociones tristes. Algo que solía hacer desde que era un adolescente.—¿Qué hay de Tallulah o de Quackity?—

Los ojos volvieron en el lugar donde Tallulah estaba.

—Ellos—un suspiro tembloroso salió de su boca.— Ellos estarán bien—tosió para aclarar su voz. —Quackity es fuerte, lo superará. Talullah también tiene un abuelo excepcional y un pequeño guardián además de Quackity—se río tratando de aligerar el ambiente.

Pero Philza solo lo miró, para luego suspirar.

—Te pareces a tu madre—fue lo que respondió Philza mirando el horizonte.

—¿Que?—dijo Wilbur sin comprender. Hablar de su madre no era un tema de conversación habitual, la conoció por primera vez cuando tuvo su primera muerte.

—Ella hizo lo mismo— retomó la conversación, Philza se iba explicar sus palabras pero algo le llamó la atención.— Hay alguien más aquí— dijo alertando a su compañero

Wilbur miró a todos los lados sin moverse.

—¡Sal de ahí!—Gritó Philza, estaban desarmados pero aún recuerda bastante luchar cuerpo a cuerpo.

—¿Phil?— dijo un hombre, un rubio saliendo entre la nieve amontonadas sobre el hielo.—¡Phil!—sonrió dirigiéndose hacia mayor.

—¡Puta madre Tommy!— Dijo Wilbur con emoción.

—Tommy— repitió Philza con una sonrisa en sus labios, su hijo a vuelto.

Los tres se abrazaron, no solían abrazarse pero después de un reencuentro de años era inevitable.

—¿Dónde estabas todo todo este tiempo?—dijo Philza rompiendo el abrazo de tres. Sin embargo no están completos, observo la mochila de Tommy que colgaba una corona.— ¿Dónde esta Technoblade?—la cara de Tommy decayó.

— El. . .no lo logró — Tommy llego su mano a su brazo para reconfortarse, odiaba ser el portador de mañas noticias, por que había silencio.

Hubo un silencio ahora.

La muerte de Technoblade fue devastadora para Tommy, el pelirosa dió literalmente su vida para que Tommy escapará sin ningun rasguño de los zombies cuando los rodearon, no tenían armas ni algo con que defenderse.

Technoblade hizo lo que un hermano mayor debía hacer:

Sacrificarse.

Lo que no sabe Tommy es que  después que el peli-rosa obligara a Tommy alejarse y darse como carnada a los muertos, Dream encontró a Technoblade en aquella deplorable condición, entre la vida y la muerte.

La relación de Dream y el pelirosa no era problematica, pero entre sus familiares si y eso hacían que las cosas fueran incómodas pero no era su enemigo.