Oh No, Él Es Un Zombie |Quackbur

El frio en tu piel

Después de una frías caminata, los pies de Wilbur tocaron su antigua tierra, cubierta de nieve blanca, L'mangerb no era un acampamento  en donde solia nevar pero aun asi el castaño sintió nuevamente la nostalgia.

Tal como lo había dicho Phil estaba totalmente destruida, escombros y grandes astillas. Con el pie apartaba algunos materiales para encontrar alguna pieza útil mientras Big Q estaba en una reunión con los demás mientras que otros se preparaban para establecerse. Entre los escombros encontró su guitarra, milagrosamente intacta pero sin aquella cuerda que ahora posaba en el dedo anular de Quackity, sonrió al verla y rápidamente la tomó con la ilusión de mostrar su instrumento.

Tallulah quién estaba concentrada con su flauta, escuchó los pasos de su padre que se detuvieron al sentarse en frente de ella.

El castaño empezó a tocar una que otra nota. Los ojos de la menor empezaron a brillar cuando escucho la suave melodía que venía de las cuerdas.

—¿Te gusta?— dijo Wilbur sin dejar de tocar las cuerdas. Recibió un asentímiento emocionado de parte de su hija.— ¿Por que no te unes con tu flauta?— Tallulah con ilusión y un rápido asentímiento estuvo de acuerdo.

— Bien, empezamos con una simple ¿Te acuerdas de la melodía que te enseñe?— dijo el castaño. Su sol asintió y comenzó a tocar la melodía, Wilbur no tardo en unirse con la Guitarra.

Quackity quién estaba concentrado en la charla y de vez en cuando observando el mar; el hielo era de un color blanquecino, por lo cual el mar no se había congelado por completo. Suspiró, lo único que puede hacer es esperar pensó.

— No te preocupes, mis sentidos arácnidos dicen que en dos días estará todo listo— dijo Roier tratando de animar.

— Atravesar el mar congelado es algo muy arriesgado pero no imposible— comentó Cellbit.

— Cuándo lleguemos, nuestra vida será distinta—sonrió Quackity.

— ¿Tu crees?— habló Roier con una sonrisa.

— Pues claro— comentó Quackity.— es un buen lugar, es una isla increíble, además es de un buen tamaño y no hay habitantes, esta completamente inexplorada—

— Disculpa que me meta en la conversación chicos— interrumpió Jaiden con algo de preocupación.— ¿Pero no es peligroso explorar una isla? Tampoco quiero arriesgar a los niños en atravesar el hielo—

— Jaiden tiene razón— comentó Roier.

— Pero creo que es un riesgo que debemos tomar para no tener que que convivir con los Zombies— agregó Cellbit, enfatizado la última palabra.

— Podríamos crear un trineo o una base a partir de madera— comentó Badboyhalo.

—Se que hay una manera en donde los humanos y zombies puedan convivir— dijo Jaiden con algo de angustia ante la respuesta de Cellbit.

Roier le dio una mirada de lástima, y Cellbit una mirada incrédula. Realmente a Jaiden le afecto la desaparición de Bobby.

La conversación iba por un camino tenso pero se alivio  al escuchar un grito de parte del castaño de mechón blanco.

Quackity junto al grupo fue donde estaba Wilbur quién tenía en sus manos el mástil de la guitarra mientras respiraba desordenado y al lado un zombie en el suelo.

— ¡Me asustó ese hijo de puta!—se defendió Wilbur. Le había dado un guitarrazo al muerto.

— Estamos tocando música hasta que apareció— agregó Tallulah con temor.