Amor A Primera... ¡¿Broma?! •♡ Markhyuck ♡• NCT

Flores de papel y... demasiada información

Mark

Me siento un poco culpable por haber plantado a Hyuck estos días, me he apresurado en salir de clases directo a preparar todo para el viernes. Dijo que estaba bien y prometí llamarlo en la noche, ―cosa que, por supuesto, cumplí. ― pero pude notar en como reaccionaba y el tono de su voz del otro lado de la línea que no estaba contento con eso, luego lo compensaría por haberme aguantado, sin embargo eso no quitaba que me doliera el pecho su voz decepcionada.

Chenle me había estado interrogando sobre Hyuck y yo, porque sabe que sacarme información a mí era más fácil que a él y en el fondo sabe que me muero por hablar de eso.

Con tanta pregunta acabó implantando en mí la idea de celebrar nuestro...  nuestro primer mes ¿saliendo? ¡Ah! De solo pensarlo me avergüenzo, es más fácil solo hacerlo que ponerle nombre, es demasiado cursi hasta para mí. De cualquier forma me emociona pensar en eso, así que Chenle se ofreció forzosamente a ayudarme.

― ¿Seguro que Hyuck no sabe que estamos aquí?
― ¿Estás loco? No voy a arruinar la mejor parte del dorama.

Chenle terminó de mover el último ladrillo de la salida secreta de Hyuck y su hermano e hizo un ademán para que pasara primero. Dejamos todo en su lugar y volvimos a salir del internado, jamás me imaginé haciendo este tipo de cosas tan tranquilamente ¿debería avisarle a Tae? sé que prometí hacerlo pero tampoco quería preocuparlo.

Supuse que sería mejor hacerlo, pero cuando lo llamé no contestó, después de que no contestara varias veces decidí dejarle un mensaje, así que yo cumplo con mi parte del trato.

Nos fuimos al barrio bohemio que estaba cerca, ese donde estuvimos él y yo juntos comiendo pastel y acabamos rociados por los aspersores, de seguro es de las memorias más lindas que voy a guardar.

― ¡Mark mira! ― apuntó el escaparate de una librería. ― ¡Esas guirnaldas están perfectas! y... ¡Mira, mira! ¡Esas lucecitas quedarían adorables! ― tiró de mi chaqueta.
― ¡Ah Chenle! Cálmate un poco.
― ¡¿Cómo quieres que me calme!? Es que ya veo la cara de Haechan cuando vea la sorpresa. ― miró al horizonte con ojos de ensueño.
― No me hagas pensar en eso. ―cubrí mi sonrojo con el brazo.
― ¡Se va a derretir! ¡Vamos!

Tomó mi mano y me arrastró al local. Chenle daba brincos por toda la tienda y le hacía miles de preguntas al vendedor, aunque creo que fue más porque era guapo que por curiosidad.

Decidimos que darle una temática a la celebración era lo mejor, la idea me encanta y supe que lo haría más especial. El tema serían las flores y tengo buenas razones para haberlo escogido.

También resolví hacerle tres regalos distintos, de a poco me explicaré.

Compramos un montón de artículos de papelería, la enredadera de luces cálidas que le gustaron a Chenle, globos de colores pastel y quién sabe qué más, ni siquiera quise ver cuánto gasté en eso.

No teníamos mucho tiempo para comprar así que lo hicimos tan rápido como el déficit atencional de Chenle nos lo permitió y emprendimos marcha de vuelta a la escuela.

Entonces supe que ese era el momento perfecto para sacar el tema. En todo este tiempo ni Chenle ni Renjun han dicho una sola palabra sobre lo que tenían y todos nos moríamos por saber, un poco por curiosidad pero más por preocupación, son mis amigos y quiero saber qué está pasando por su cabeza, sobre todo considerando que estar juntos no es algo para tomarse a la ligera, al menos sé que para Chenle no lo sería.