Cap 1 - al menos traje mis audífonos.

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—¡Ya me voy! —gritó, colocando la mochila en su espalda. —¡Te enviaré un mensaje cuando lleguemos!

Una persona de la tercera edad salió. Era una mujer de cabellos blancos, portando unos lentes con aumento y una taza de café en sus manos.

—¿Llevas todo? —preguntó.

—Sí, tía. —respondió con una sonrisa. —Todo.

—Cuídate, mi amor. —dijo, acercándose para acariciar su cabello. —No olvides lo mucho que te queremos.

—¡El tío Ben sabe que lo queremos más! —gritó, mientras corría, para subirse al autobús de la escuela.

Ella vivía con sus tíos/abuelos.

Oh bueno... con su tía.

Después de la muerte de sus padres en un accidente automovilístico, quedó en manos de ellos.

La tía May... aunque su tío había muerto en un trágico asalto, pudieron seguir adelante... ellas lo sentían como si el viviera, al menos en sus corazones.

Típica historia en donde la chica lista consigue una beca prestigiosa, por su inteligencia extraordinaria, después de enterarse que sus padres están en la otra vida.

Lo más extraño fue, que años atrás, había recibido el piquete de una araña radioactiva, cual le dio habilidades extraordinarias; trepar paredes, lanzar telarañas de sus propias muñecas y ese sentido arácnido que era asombroso.

O la "punzada".

Pero como el tío Ben siempre le decía; un poder siempre conlleva una gran responsabilidad.

Había creado enemigos por todas partes, algunos mafiosos, caza recompensas e incluso un sensible simbionte, que después de una dura pelea y casi morir, se hizo amigo.

Eddie Brock.

Un ex-millonario periodista y fotógrafo, que fue secuestrado por Venom, un casi hermano para esos 2 raros de New York.

Después de haber terminado su carrera de ingeniería Mecánica Cuántica, decidió estudiar lo que realmente ella quería; ingeniería bioquímica.

Iba en el autobús directo a un viaje escolar, ella vivía en Queens, así que debía estar lista para salir de la ciudad unos cuantos días, aunque la tranquilidad se quitó, hasta que los vellos de su brazo se levantaron, haciéndola girar a su ventana de la izquierda.

Un agujero oscuro se formó a mitad de New York, en el cielo.

Suspiró viendo, ya que, al saber que no había otras personas cerca, sabía que nadie con habilidades necesarias vendría ayudar, teniéndolo que hacer ella.

—Gwen. —susurró.

Su amiga, que iba a un lado durmiendo, como siempre lo hacía en cualquier viaje, llevaba sus audífonos puestos.

—¡Gwen! —le gritó, levantándola.

—¿Qué pasó? —preguntó, estirando su cuerpo. —Por favor, Parker, déjame descansar... un minuto más.

May le señaló la ventana, haciendo que ella abriera sus ojos entendiendo.

—No...

—Por favor. —suplicó, mientras veía como la rubia negaba con su cabeza.

Gwen se levantó corriendo, pegándole a los demás en los hombros para alertarlos y llamar su atención.

—¡Vamos a morir! —gritó. —¡Se cae el cielo dijo el Chicken Little!

Todos sus compañeros fueron detrás y ella tomó su mochila con las cosas más importantes, colocándola de nuevo en su espalda.

Abrió una ventana y trepó por los lados laterales del autobús, hasta que llegó al frente, sacando su máscara roja con detalles negros.

Calling || Doctor StrangeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora