When it comes to you, the rest doesn't matter.

Capitulo 46: Dos estrellas

— Creo que sería bastante bueno que sientan un poco de lo que han hecho cariño — Respondió Angel sonriendo con sorna, disfrazando un poco su intención con una sonrisa inocente cuando sus palabras demostraban lo contrario. Esto provoco una carcajada en Alastor, se divertiría mucho torturando ese par de sacos, los haría arrepentirse como también lo convertiría en algo absolutamente nuevo, unos pequeños perritos falderos de los cuales no habrá rastro alguno de lo que fueron alguna vez, su arrogancia, su extravagancia, su elocuencia e incluso tal vez su inteligencia se verían completamente afectadas. 

— Muy bien querido, será todo un placer mon amour ¿No deseas participar en esta función? — Pregunto Alastor comenzando a caminar con su pareja a lado de él quien estaba sentado en el tentáculo sombra que había invocado, solo por mantener mucho mas cuidado en el arácnido.

— Sinceramente no creo ser capaz en participar en esto cielo, fuera de mi estado actual, sabes que no soy de torturar querido, no a menos que necesite conseguir información específica y aun con eso no lo disfruto demasiado cariño, prefiero disparar directo a la cabeza y acabar con todo— Respondió Angel. Antes de que pudieran seguir conversando, una tercera voz los interrumpió, tratándose de Asmodeus acompañado de Fizzarolli.

— Disculpe su majestad —Hablo el Rey de la lujuria mirando a la pareja de forma despectiva mientras Fizzarolli los observaba con los brazos cruzados siendo sostenido por el Rey en su mano—Pero alguien deberá pagarme por los destrozos causados—Dijo señalando lo que antes había sido el establecimiento siendo que de entre los escombros un diablillo salía para finalmente ser aplastado por una roca gigante.

— Oh, mis disculpas Asmodeus, en el momento que todo se ponga en orden en el castillo atenderé su petición, tengo varios deberes que hacer, lo que me va a mantener bastante ocupado — Respondió volteándose un poco, mientras sonreía como normalmente lo hacía aunque siendo Asmodeus sintió una leve amenaza en el modo en el que hablaba el ciervo, soltando un suspiro aunque un levemente molesto, pero consciente de que no quiere meterse en una pelea absurda, simplemente acepto lo dicho.

— Por supuesto, entonces esperare a que haya alguna información al respecto majestad — Dijo Asmodeus, por debajo recibía una mirada de reproche de parte de Fizz, no muy contento con la decisión que había tomado su pareja siendo este ultimo quien le devolvía la mirada de una forma más tranquila pero dándole entender que no llegaría a meterse con el gobernante de todo el infierno, haciendo que Fizz simplemente suspire aun levemente molesto, moviéndose hacia su hombro — Nos vemos luego Angel Dust, es agradable saber que estas bien, además de que por fin te deshiciste de esos idiotas— Dijo Fizzarolli— Espero que me invites cuando hagas una fiesta por tus crías—Dijo soltando una carcajada divertida—Mierda, realmente no esperaba que estuvieras en cinta ¿Acaso eso es posible?— Pregunto divertido Fizz acercándose a Angel y mirándolo de arriba y abajo. 

— ¿Quieres intentarlo Fizzy?— Pregunto Asmodeus— Es completamente posible, no me molestaría en absoluto tener pequeños mini Fizzys corriendo por la mansión—Comento divertido Asmodeus causándole un fuerte sonrojo al diablillo— Por cierto, majestad, joven Dust: mis felicitaciones por ello, es agradable saber que podrán tener herederos, mas aun viniendo del mas puro placer— Dijo, haciendo una ligera reverencia en señal de respeto

—Muchas gracias Asmodeus, espero que tengan la dicha de poder compartir un momento como este— Dijo Alastor divertido.

— Y por supuesto, en caso de realizar algún tipo de evento, serán invitados, se los agradezco a ustedes, en especial a ti Fizz— Dijo Angel, sonriendo — Y también espero verte cargando con bebés de Asmodeus, seguro se verán adorables— Dijo de forma burlona, causando un sonrojo mayor en el diablillo, quien le respondió con un grito y diciendo "cállate" y de respuesta por el señor de la lujuria, un "próximamente estará así". Después de una pequeña charla y prometiéndole al rey de la lujuria que su establecimiento estará reconstruido lo antes posible, cada pareja se despidió; Angel despidiéndose de Fizz con la mano, acariciando levemente con la otra su vientre.