Amara

44. Blood The Flour. I

Pov. Cazador

No podía dejar de pensar en que hacer con respecto a mi situación con Amara, tenía una ganas jodidas de follarmela a lo Bestia contra la primera superficie que tuviera cerca, pero tenía que pensar como alguien civilizado, aunque fuera por esta vez.

Recordé el viejo invernadero en donde sabía, que Dominic pasaba mayor parte del tiempo, y hablando de Dominic, ¿por qué no encargarme de él?

Podría matarlo.

No, no podría...

No es que no fuera fácil, por que en realidad lo era, después de todo, lo conocía desde hace años, sabía todos sus debilidades y defectos, pero no podía matarlo.

¿Como podría matar a mi creación más perfecta?

***************************

Pov. Amara Riddle.

Los rayos del sol me molestaban en el rostro, mientras que el frío de mi dormitorio me acariciaba la piel....

Espera....en mi dormitorio no entra la luz, y no es frío.

Abrí los ojos de golpe, para luego cerrarlos mientras maldecia, parpadee un par de veces para acostumbrarme a la luz del bosque.

Mire mi entorno y Recordé que estaba en el bosque, Recordé que anoche no habíamos vuelto al psiquiátrico, y recordé todo lo que hice anoche, con Dominic. Me di la vuelta sobre mi costado, encontrándome con su rostro relajado y tranquilo, una pequeña sonrisa adorno mis labios al ver como la manta cubría desde su cintura para abajo, acaricia con la punta de mi dedo índice la línea de su mandíbula.

- me siento violado - murmuró con voz ronca mientras abría los ojos de golpe, yo aparte la mano y reí. - buenos días para ti también. - respondí yo.

- vaya, si esto es un buen día, quiero tenerlos todo la vida - respondió mientras se abalanzaba sobre mi para abrazarme y rodar.

Yo reí mientras rodaba con él, quedé boca arriba y el sobre mí, le mire con una amplia sonrisa divertida mientras el me devolvía el gesto, y así de cerca, pude ver como sus ojos se achinaban en las comisuras cada que sonreía, pude ver las - casi - imperceptibles pecas que tenía en las mejillas y el puente de la nariz, pude ver también, la pequeña cicatriz sobre una de sus cejas, era muy pequeña, y que su piel fuera tan blanca ayudaba muy bien a discimularla.

- parece que alguien se levantó de buen ánimo - bromee yo, el volvió a sonreír. - digamos que si, pues una semidiósa del Olimpo bajó anoche y se fijo en este humilde ser mundano - dijo mientras recorría mis facciones con la mirada.

- vaya, hasta suena poético - respondí yo y el hecho a reír.

*************************

Volvimos poco antes del medio día, pero por supuesto, cada uno duvo que tomar su camino.

Entrando a mi dormitorio me encontré con la extensa soledad, lo cual me extraño, supuce que Carolina estaba en clase o en algún lugar del psiquiátrico, así que deje mis zapatilla en su citio y quitándome la camisa que Dominic me dio - su camisa - me metí al baño, deje el vestido que estaba super sucio en la canasta de la colada y me dedique a relajarme bajo el agua caliente de la regadera.

Joder, que bien se siente.

El agua cálida corriendo por mi cuerpo borra los rastros del frío de la noche en mi piel, borra las partículas de tierra y de cierta manera logra purificar mi físico. Es entonces cuando recuerdo todo lo que me hizo Dominic, y todo lo que sentí....

Una pequeña sonrisa se instala en mis labios, y mientras meditaba lo que haría hoy, planeaba una reunión con Morgan para hablar sobre los datos encontrados, los planes o cualquier cosa que fuéramos a hacer dentro de los próximos meses, sino, se acercaría pronto el mes de noviembre y las temperaturas empezarían a bajar, pronto iba a nevar.