CAPÍTULO 7

1.2K 75 47
                                    

De nuevo en la habitación donde Brunhilde escogía a los humanos que iban a representar a la humanidad.

Estaba sentada sosteniendo su cabeza con ambas manos, mientras que a su lado, soltando lágrimas, estaba Göll, quién el dolor por la perdida de su querida hermana Hrist le impedía siquiera pronunciar una sola palabra. La más jóven de todas las Valkirias lloraba amargamente, mientras su hermana Brunhilde guardaba silencio.

—No, hermana Hrist, nunca pude hacer algo bueno por ella —dijo Göll entre lágrimas.

.
.
.
.

MINUTOS ATRÁS...

Después del increíble temblor que Shirohige creó para reventar a Poseídon, toda la arena del Valhalla quedó hecha pedazos, gradas destruidas, pilares caídos, muros agrietados, tanto dioses como humanos estaban alterados. Shiva tuvo que dejar a un lado su cómoda alfombra y utilizar uno de sus brazos para detener un enorme pilar que se le venía encima, y Zeus tuvo que usar un increíble poder para frenar el temblor, creando una onda con ambas manos, de no hacerlo, era posible que la arena quede totalmente inservible para los siguientes combates.

Cuando el temblor pasó, y todo el polvo se disipó por completo, se pudo apreciar lo que pasaba en lo que quedaba de la arena. Shirohige estaba de pie, y bajo sus pies había un gran charco de sangre, su Naginata estaba intacta, salvo manchada en la hoja con la sangre de Poseídon.

El yonkou más fuerte estaba inmóvil, solo seguía parado, y muy cerca suyo, tirado en el suelo, estaba Poseídon, sin poder moverse, gravemente herido por el ataque que Shirohige le realizó hace solo momentos atrás.

—Ma... Ma... ¡Agh! —vomitó sangre, bastante sangre—, ¡Maldito imbécil! —le gritó al imponente Barbablanca ahí, desde el suelo, donde su arrogancia y orgulloso quedaron hechos pedazos—, ¡Agh! —volvió a vomitar sangre—, n-no puedo moverme, ese imbécil me destrozó la columna... ¡Agh!

Poseídon seguía vomitando sangre, maldiciendo a Shirohige por haberlo dejado en ese estado, completamente fuera de los combates para toda la eternidad, claro, si es que lograba sobrevivir.

En las gradas, los hijos del emperador celebraban que su padre había dejado incapacitado al tirano, solo faltaba atravesarle el pecho con la naginata y el combate se acabaría, todos vitoreaban, alababan a Shirohige, al monstruo legendario, al emperador más fuerte de todos; mas sin embargo la realidad era completamente diferente.

Shirohige comenzó a brillar, tomando un color verde aperlado, y poco a poco se fué desvaneciendo en el aire junto a su naginata. Sus hijos, que anteriormente estaban celebrando, ahora estaban llorando, gritando de manera desesperada la palabra "Padre", por más que luchó con todas sus fuerzas, el emperador no pudo ganar el combate, dejó a su enemigo hecho más que mierda, con la columna destrozada, un brazo menos, un ojo destruido en su totalidad, y medio rostro casi desfigurado.

Shirohige murió...

Durante su combate recibió 985 estocadas en todo su cuerpo, 367 cortadas, y su corazón y pulmón izquierdo fueron perforados completamente. Pero aún así, el emperador no se rindió, y usando las últimas fuerzas que le quedaban, atacó a su rival antes de perder la vida.

En las gradas, Göll, con ambas manos en su rostro, no podía creer que alguien tan imponente como Barbablanca haya muerto antes que Poseídon, pero dió todo de sí y les demostró a los dioses que los humanos podían ser seres con un potencial imparable.

Hrist antes de desvanecerse observó a su hermana Brunhilde, y solo le sonrió. Brunhilde solo cerró sus ojos, aunque tenía una expresión poco expresiva, por dentro era otra cosa. Göll estiró su brazo, como si quisiera alcanzar a su hermana, pero fué tarde, muy tarde, ella junto con el humano que hizo volundr se desvanecieron por completo.

RECORD OF RAGNAROK "LA ÚLTIMA ESPERANZA"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora