Capítulo 27

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Eran las diez de la mañana, tendríamos que abandonar Hawaii en media hora y Will y Ashby no aparecían.

–Gea, mientras esperamos quería decirte que ha sido un placer pasar contigo el día de ayer, y que si tú quieres me gustaría repetirlo en Nueva York  –Levi me acariciaba la mano mientras me hablaba.

–Por supuesto –respondí y le besé con ternura.

En cierta manera, aunque no nos habíamos acostado, nos habíamos comportado como una pareja. Ninguno de los dos tenía reparo ninguno en besar al otro cuando sentía la necesidad, y el hecho de no tener que pensar cada uno de mis actos me aliviaba enormemente.

–Empezáis muy temprano de besitos –habló Will a nuestro lado–. Podría vomitar aquí mismo.

Tanto Will como Ashby iban en gafas de sol, y parecían agotados.

–No pongo en duda que pudieses potar aquí mismo, pero no sería por nosotros si no por la resaca que llevas –se rió Levi, que debía conocer lo suficientemente bien a su amigo como para deducir cuando iba con resaca.

Me acerqué a Ashby y levanté sus gafas de sol con mi mano derecha. Sus preciosos ojos se cerraron inmediatamente por la luz.

–Necesito oscuridad –volvió a bajarse las gafas.

–Oh Dios Ash –me reí a carcajadas–. Me habría encantado verte borracho.

–Lo daba todo –le dio un codazo Will riendo.

–Creo que habíamos acordado que no hablaríamos de esto, ¿verdad, Minimaxín? –le devolvió el codazo Ashby siguiéndole la broma.

Me sorprendió la relación que habían desarrollado en tan sólo un día, hasta hacía 24h Ashby no se habría acercado a Will a menos de un metro de no ser por obligación, ya que su presencia le intimidaba increíblemente.

Tras 10 horas de viaje, que fueron extremadamente tranquilas ya que Will y Ash habían estado durmiendo durante todo el trayecto, aterrizamos en Nueva York.

Estaba anocheciendo, y la temperatura era considerablemente más fría que en Hawaii.

Levi y Will nos acercaron en la limusina al piso, dónde Levi decidió despedirse de mí con un beso apasionado, y Will se despidió de ambos con un abrazo.

–Veo que ahora tienes un nuevo amigo –le dije a Ashby riendo mientras dejaba mi maleta junto al sofá.

No contestó, se quedó quieto junto a la puerta cerrada, con su mano golpeando el manillar de su maleta. Su mirada fija en el suelo.

–¿Ocurre algo Ash? –pregunté.

­–Dijiste que tenías miedo –comenzó a hablar, sin apartar la mirada del suelo, con la voz suave y tranquila­–. Pero parece que no lo tienes con Levi.

–¿A qué te refieres?

–A tu relación con Levi –respondió y me miró con esos ojos de cachorro que me hacían sentir tantas emociones contradictorias.

­–No tengo ninguna relación con Levi, Ash –contesté, intentando mantener el tono calmado que él mantenía.

Pero sabía que era una calma ilusoria ya que sus ojos reflejaban la tempestad.

–No es lo que a mí me ha parecido.

–Te puedo asegurar que así es.

–¿Qué significo para ti Gea? –preguntó serio.

–Eres mi amigo, te adoro Ashby ya lo sabes –odiaba al punto en el que se dirigía aquella conversación.

Se rió. Una risa desganada.

–Tu amigo, supongo que por eso no tengo lo que tienes con Levi, o lo que tenías con Will.

­–No lo tienes porque creo que te mereces algo mejor –le miré fijamente. Tenía los ojos llorosos y yo sentía como mi corazón se iba rompiendo pedazo a pedazo.

–¿Por qué no puedo decidir yo lo que me merezco? Te quiero Gea, y es algo que has sabido siempre, por mucho que lo creas no me haces ningún favor apartándome de ti –aparté mi mirada de él, verle así estaba resultando más de lo que podía soportar.

–No hay nada bueno en la profesión de reparador de corazones rotos Ash –y no sé como pasó, pero yo también comencé a llorar.

–Estoy dispuesto a aceptar el riesgo –sus ojos azules clavados en mi.

Dudé. Aquella mirada, su pelo oscuro, sus lunares, su nariz respingona... me volvía loca. Pero Ashby no era sólo una cara bonita, era un corazón más bonito aún, y sabía que mi próximo movimiento le iba a doler, pero era la única manera de evitarle lo peor.

–Yo... no estoy dispuesta –traté de ponerme seria, quería que me odiase, que no soportase mirarme siquiera, así era la única manera en la que podría protegerle–. Deberías volver a casa. 



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¡Buenas tardes! He tardado unos días en subiros nuevo capítulo pero aquí está finalmente. Un poco triste ¿verdad?

¿Qué creéis que pasará ahora? ¿Creéis que Gea ha actuado como debería? Comentad, quiero saber que opináis jaja

Y tampoco os olvidéis de votar!


Muchas gracias a todos los que estáis ahí y que leéis la historia de Gea.


Un besazo,


–G.Bo

Killing Gea (hot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora