SOBREVIVIENDO A MI EX

CAPITULO 16 PONER DISTANCIA

Un día alzare el vuelo como el ave
Me perderé entre la bruma
Desapareceré sin mirar atrás
Porque uno no es de un lugar específico
es de quien te a abierto los brazos y te ha dado el corazón por completo

Dos semanas después los lazos de amistad con Cristhofer se habían afianzado y ella sentía que en cualquier momento dirían el siguiente paso.

Por otra parte la relación con Luka aunque no era irascible si era distante, el fue esta vez quien erigió una barrera entre ellos y se pregunto si el motivo era porque se había enterado que ella estaba saliendo con Cristhofer.

Esa mañana coincidieron en el stand del café donde la nueva chica de encomiendas le entregaba un café humeante y que olía delicioso.

— Buenos días – saluda en general pero enseguida su mirada involuntariamente se clava en Luka que ha recostado a la encimera y su mirada profunda la arropa.

— Buenos días Srta. Carpentier- la saluda con formalismo la pelirroja llamada Lale que es un amor de chica- ¿se tomara su capuchino?

— Si Lale.

Espera que Luka se retire pero sigue clavado allí tomando su café pero observándola y eso la pone muy nerviosa.

— La gente de Caplan esta encantado con tu trabajo, no es de sorprender- suelta el primer dardo envenenado.

— Si sugiere que hay alguna especie de favoritismo déjeme decirle...

La chica que siente que va a presenciar una discusión incomoda carraspea e interviene.

— Me disculpan, ire a llevarle el café a la Srta. Mía y el Sr. Nicholas- y rápidamente sale con una bandeja con los dos café.

Tan pronto se retira Luka continua en ese tono mordaz, que solo disfraza los celos que siente y no puedo controlar.

— Eres su favorita, obviamente.

Indignada se defiende

— Mi relación personal no interfiere con mi trabajo, tu sabes que hice un buen trabajo, así que Luka ¡no me jodas!-le replica furiosa, dolida, terriblemente decepcionada.

Pasa por su lado pero él la retiene y tras lanzar un bufido cansado puntualiza.

— Lo siento me ganaron los celos

Siente su aliento en su cuello cuando la mantiene abrazada por al cintura, ella intenta evitar que su cercanía la afecte tanto, pero le afecta porque sigue enamorado de ese desgraciado, pero una cosa es amarlo y una muy diferente volver a permitir que el trapee el piso con ella de nuevo.

Se suelta de su agarre y lo confronta echando chispas por sus ojos de lo furiosa que esta.

— ¡Celos!- exclama con ironía- Luka, uno no cela lo que no le pertenece, mucho menos a quien no ama.

— No puedes negar que aun eso que nos unía sigue estando-la contradice afectado por su rechazo- eres un imán que me atrae, ¿crees en el destino? En que aunque tu estés con alguien más y yo también siempre habrá un cordón invisible que nos mantiene atados, que puede estirarse, encogerse pero que inevitablemente nos jala el uno al otro.

— Suéltame Luka- le pide ahora en tono casi suplicante porque siente que su fuerza de voluntad mengua ante su cercanía, intenta desviar la mirada pero el pone su mano debajo de su barbilla y le obliga a conectar sus miradas.

Porque ve tanta profundidad en su mirada, esa forma como la veía antes, como si ella realmente le importara.

— Déjame ir- insiste pero el le niega con la cabeza.