Capítulo 25

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Eros:

Estamos en la sala de ensayo, Julián habla con Hathor sobre unas publicaciones que quiere hacer en sus redes y sobre unas noticias que salieron sobre ella.

Me resulta un poco tedioso tener que estar fijándose en cada mínimo detalle sobre qué publican, dicen o hacen en sus redes, pero supongo que ellos están acostumbrados.

Samuel y Aria están hablando en el sofá y yo estoy con Romeo que insistió en que venga ya que estoy de vacaciones. Estamos los dos parados a un lado de la batería ya que está ajustando algunas cosas.

—Pero dile a Ryden que venga también —me dice cuando me comenta que quiere hacerle una fiesta sorpresa a su madre por su cumpleaños.

—Pero no sé si va a estar aquí.

—Pues dile que se quede —dice haciendo una cara de obviedad que me hace reír—. Mejor le pregunto yo.

—¿Preguntarle u obligarlo? —digo divertido y él se encoge de hombros.

—Yo le pregunto, si él acepta porque tiene una pistola apuntando su cabeza es cosa de él —me saca una risa que le contagio.

—Ro —llega Samuel a donde estamos, mirándolo fijamente a él—. ¿Tu sabías que Hat tiene canciones enteras que nunca nos mostró?

Mierda.

Me quedo mirando a Samuel sin decir nada, atónito.

¿Cómo se enteró?

—Aria me lo acaba de contar.

Así se enteró.

Dudo que esto le guste a Hathor.

No le va a gustar.

—No, no sabía —dice entre sorprendido y desconcertado—. ¿Tú sabías? —me pregunta mirándome.

—Sí, pero son muy personales y por eso no se las mostró —aclaro enseguida.

—¿Muy personales? —pregunta y asiento.

—Creo que son sobre Ane —dice Samuel.

—¿Hathor sabe que Aria te dijo? —le pregunto y niega.

—Me lo acaba de decir porque dice que esas canciones merecen salir a la luz de lo hermosas que son.

—¿O sea que pretende que convenzamos a Hat de grabarlas? —pregunta Romeo y Samuel asiente.

—Pero no sé si sea buena idea si son tan personales —dice su amigo con una mueca—, no quiero que incomodemos a Hat con eso, aún le duele.

—Todos aquí sabemos que ella retiene más de lo que ella misma cree —comienzo y ambos asienten.

—Quizás el grabar esas canciones la ayude a largar algo de lo que contiene siempre —piensa en voz alta Romeo mirando el suelo, cuando levanta la mirada nos mira a ambos esperando una respuesta a eso.

Con Samuel nos miramos no muy convencidos de hacerlo.

—No lo sé... —dice él.

—Probemos —insiste Romeo—. Si dice que no, lo respetamos, pero si quizás acepte.

Con Samuel nos volvemos a mirar y ambos suspiramos al mismo tiempo asintiendo.

Vemos que Romeo va con Aria que le dice algo y ella asiente contenta y se levanta del sofá para acercarse a Hathor.

—¿Crees que va a aceptar? —me susurra Samuel mientras nos acercamos a donde están ellos.

—Realmente no lo sé —le susurro de vuelta antes de llegar.

HATHORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora