Sakura Senju, una chica que creció con los dones de la telequinesis y telepatía en un mundo donde las personas se dividen por ser dotados con habilidades especiales o ser simples humanos, nació siendo el lazo central destinada a seis hombres pertene...
- ¿Estás de acuerdo con el plan? - Naruto trata de urgar en mi mente y lo empujó de ahí.
- Si tuviera algo que decirte, lo diría de frente, no hace falta que te trates de meterte en mi cabeza. - Me regala esa sonrisa que he llegado a detestar, me mira como si fuera una niña boba que no sabe tomar decisiones.
- No pareces convencida.
- Claro que sí, pero te seré honesta, no me vinculare con ustedes, no me malentiendas, todos son geniales, pero, yo pertenezco a ellos.
- Nosotros somos mejores.
- Naruto - Pongo los ojos en blanco - No es por eso y lo sabes, no me importa lo que hayan descubierto, no me importa si hay una posibilidad de elegirlos a ustedes, lamento lo que le pasó a su lazo central, pero yo no llenare ese hueco al que jamás estuve destinada. - Se acerca a mí, y mi corazón se acelera, me toma del mentón y no mira mis ojos, si no mis labios, dios espero que no intente besarme o pateare su lindo trasero.
- No pienses que eres un reemplazo Sakura, siempre sentí algo por tí, pero, respetaba a mi lazo, no quería causarle daño. - Ojalá así hubieran pensando los míos.
- ¿Cómo fue? ¿Puedes contarme - Se aleja de mí dándome la espalda, se acerca a una de las ventanas y sus ojos se pierden en los recuerdos.
- Ella se llamaba Shion, era una chica dotada, podía cambiar de formas, no nos habíamos conocido aún, cuando Hanzo la mató, no sé muy bien como fue, solo logré averiguar que la tomo prisionera por un mal líder de escuadra - Gira su cuello y me mira a los ojos, hay algo en su mirada que no me gusta.
- Valla que mal, y como fue que Anko entró.
- No nos habíamos vinculado por lo que no nos afectó de inmediato, pero el reloj estaba corriendo - Pone sus manos en su espalda y camina por la habitación - A Anko la rescatamos cuando estaba por ser asesinada por el consejo, se la arrebatamos en sus propias narices. - Sonríe.
- Naruto - Posa sus ojos azules en mí - Yo siempre te he querido, pero como un hermano, recuerdas cuando nos conocimos en el orfanato, la señora Hana me estaba golpeando con aquella vara con la que asustaba a todos los niños y tú llegaste y se la quebraste en su cara - Suelto una risa y el tambien corresponde - La golpiza que te metieron después, dios, fue horrible. - Me toma de las manos y me mira a los ojos.
- Podemos hacer que funcione, solo... Déjate llevar - Toma mi cuello con una de sus manos y con la otra me atrae hacia él por la cintura, bloqueo mi mente, no puedo dejar que Sasuke sienta esto, aún no, pega su boca a la mía, primero en un roce lento y deliberado, cierro los ojos y dejo que su boca explore la mía, es un beso tranquilo, lento, su lengua acaricia la mia, lo tomo por el cuello, sabe a fresas y crema, una combinación rara pero que no me desagrada, me toma por las caderas y me sube a un escritorio, pero al llegar el momento decisivo... No puedo, me detengo y él siente mi cambio, a mi mente llegan los rostros de mis lazos y no puedo hacerlo, por más que sienta rencor hacia ellos, no puedo hacerlo, ¡Joder!.
- Basta Naruto, dejaremos esto para después, es hora de irme.
Ahora es solo un recuerdo, y no uno importante, no cuando por fin estoy con mis lazos, pero, esa zorra quien es y por qué toca a Obito.
- Sakura basta, suelta a Hinata
- ¿Por que mierda la defiendes? ¿También te estás acostando con ella Madara?.
- En realidad fue Itachi pero hace tiempo - Murmura Obito con una sonrisa.
- ¡Joder! - Murmura Itachi, dirijo mis ojos a él y lo veo tragar saliva. - Sakura yo... Todos estábamos molestos por tu partida.
- Seguimos - Susurra Obito, lo ignoró y me concentro en Itachi sin soltar el cuello de aquella chica.
- ¿Sí? Y dónde estaban mis lazos cuando me quede sin mis padres, cuando me llevaron aquel maldito orfanato, cuando me golpeaban y me dejaban sin comer en días - Los miró a todos y sonrió - Pero eso da igual verdad, por qué aquí el problema es que huí cuando llegó el tiempo de follarme - Recupero el control de mi mente y cuerpo y suelto aquella chica, cae al suelo tosiendo y agarrándose el cuello donde han quedado marcas, y en un instante desaparece.
- Sakura - Itachi intenta tocarme pero me alejo de él.
- No son unos santos, no son nadie para juzgarme, ustedes no saben mis motivos, ni los sabrán. - Me doy la vuelta y vuelvo a la cascada, me sumergo en el agua, y les doy la espalda.
- Sakura, se que estás molesta, pero en nuestro mundo hay reglas, nosotros no podíamos tener algún contacto contigo hasta que llegara el tiempo establecido, el vínculo se hubiera desatado y habríamos hecho cosas de las que nos arrepentiriamos.
- Da igual. - Respondo.
- Solo para que sepas, para mí era igual si hubieras huido o no, jamás te tocaría - Obito sale de escena y regresa al campamento que habían montado, sus palabras causan una brecha en mi corazón, no entiendo por qué de todos ellos, él es el que más me detesta, no lo entiendo.
Itachi
Les pido a mis hermanos que se marchen, a regañadientes lo hace Madara no confiando en que no termine vinculandome, Sasuke tiene que ser arrastrado por Madara, y nos maldice a todos mientras lucha contra nuestro hermano por soltarse, Sakura sigue en el agua, y continua ignoradome, al fin los pierdo de vista y me acerco hasta ella.
- Sakura - Alza su mano y pide que me calle y por ahora lo hago, pero, comienzo a quítarme la ropa hasta quedar desnudo frente a ella, suprimo a mi lazo hasta bloquearlo por completo, no dejaré que tome el control y la oblige a vincularse conmigo, no hasta que ella lo deseé.
- ¡¿Que haces?! - Me pregunta cuando mira mi desnudes, se cubre su rostro y me vuelve a dar la espalda, entro al agua y la calidez del agua relaja mi cuerpo, me pongo a su espalda y la abrazó, ella se pone rígida al instante, y comienzo con mi plan, le masajeo su espalda, cada nudo y cada músculo de su cuerpo, hasta lograr relajarla en mis brazos.
- Sakura, yo... Lamento todo, quizás Madara y Obito estén resentidos, pero yo jamás lo estuve, se que tuviste tus motivos y cuando llegue el momento espero que confies en mí como para contarme, perdóname por no haber estado a tu lado cuando más nos necesitabas - Siento su cuerpo sacudirse, joder está llorando, no soy bueno con el llanto, diablos, no soy bueno con nada más que asesinar - Mírame cariño - La giró y tomo su rostro en mis manos, sus ojos verdes están enrojecidos y con lágrimas. - ¿Puedes perdonarme?. - Se aferra a mi cuerpo y comienza a besarme el cuello - Sakura, detente, no podemos hacer esto - Ella me ignora, enreda sus piernas en mis caderas y por más que intento frenarla ella comienza a moverse encima de mí, no soy de piedra joder, ni un maldito santo, mi cuerpo comienza a responder, la tomo de la cara y beso sus labios, paso una de mis manos por su espalda hasta llegar a sus nalgas y apretarlas. - Sakura ¿Estás segura?
- Si - Jadea - Lo estoy, te quiero dentro de mí Itachi.
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