XXXXIV

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Sakura

No le basta a Madara con colocarme algo en la boca que también termina vendandome los ojos, ahora no puedo gritar, no puedo ver pero sorprendentemente siento todo aún más intenso, escucho sus respiraciones agitadas, hasta los latidos de sus corazones y me siento demasiado mareada con todas las emociones que estoy sintiendo.

Mi cuerpo se convulsiona cuando su palma vuelve a golpear mis nalgas, estoy tan avergonzada por mis reacciones, porque se que mi sexo está goteando, la necesidad de que me llenen es abrumadora.

- Mira como chorrea hermano, ¿Trajiste tu navaja? - ¿Navaja? ¿Que piensan hacerme estos locos? Intento gritar que se detengan y que ya lo pense mejor, pero con el pañuelo en mi boca no se entiende nada.

Siento el filo de la hoja pasar desde arriba de mi columna hasta llegar a la raja de mi culo y todo mi cuerpo se estremece, mierda, lo que si se entiende perfectamente son mis gemidos, joder.

Pone una mano en mis caderas inclinadome mas hacia a bajo, casi no puedo respirar, casi, mi cuerpo se espasma cuando siento su lengua en ese lugar privado, pero el me sostiene con el peso de una mano en mi cadera, lo que me impide moverme.

- ¿Dime cómo sabe? - Pregunta Obito, hay algo en su voz que me hace pensar que está sujetando fuertemente los bordes del sofá, como si intentará contener al animal que hay dentro de él.

- Es lo más delicioso que he probado - Afirma Madara, mi cuerpo convulsiona nuevamente cuando pasa su lengua de arriba a bajo presionando de una manera perfecta sobre mi clítoris, intento gritar, pero solo salen gemidos amortiguados.

Repite ese mismo patrón, y siento que voy a explotar, el aire me falta, pero lejos de sentir miedo todo, se siente increíble, sentir que el tiene el poder, para hacerme daño en esta situación tan vulnerable o para darme el más grande placer, lo vuelve todo aún más intenso.

Mi piel se eriza cuando comienza a mordisquear mis nalgas y poco a poco va subiendo hasta llegar a la curva de mi espalda, su polla roza mi trasero y me muevo ansiosa por qué termine con mi sufrimiento.

- Chica traviesa - Obito ronronea con aquella jodida voz.

Madara jala el cinturón de mi cuello y me comienza a faltar el aire, al mismo tiempo que comienza a deslizar de arriba a bajo su polla por mi sexo, y siento que todo mi ser y mi alma despierta "Tienes que volver" escucho, pero lo ignoro, ahora no quiero distracciones, sobre todo cuando tengo tiempo sin hablar con mi lazo o mejor dicho no recuerdo si hemos hablado.

Mi piel comienza a arder cuando baja una de sus manos y trabaja mi clítoris con maestría, joder, odio que sea experto, me gustaría que fuera torpe, así sabria que jamás estuvo con nadie, no los recuerdo, no tengo idea de cómo fueron conmigo en este tiempo que según pasamos juntos, pero esto, se siente bien, no se siente incorrecto como con Naruto.

- Ah joder -Gruñe Madara, cuando comienza a introducir la punta de su polla en mi vagina, gimo pero mis sonidos son amortiguados por la venda en mi boca, sin más, alcanzo el orgasmo corriéndome con una fuerza devastadora, Madara se enfunda por completo en mí y mi orgasmo se extiende aún más, que casi siento que voy a morir, mierda, el es demasiado largo y grueso.

Puedo sentir como Obito se acerca y mi cuerpo tiembla, no se porque, pero el me causa miedo y mucho, pero también una gran atracción, una atracción muy peligrosa.

- No te preocupes, no te hare mucho daño - Escucho su cinturón hacer ruido con la hebilla, y me tenso, Madara empieza a embestir y mi cuerpo sin querer se relaja, golpea mis nalgas y pese a que duele un poco, me hace humedecer aun más.

Siento el frío del cuero del cinturón acariciar desde mi espalda hasta llegar a mi culo, cuando siento el primer azote gritó, pero más por la sorpresa que por el dolor, mi cerebro capta que me acaban de golpear, pero mi coño tiene otras ideas, se contrae alrededor de la polla de Madara y este gime.

- Vuelve hacerlo, se porta como si le doliera, pero la muy sucia lo está disfrutando. - Vuelve a acariciarme con el cinturón, y está vez el golpe no me sorprende, lo tolero y aunque quiera mentirme, lo disfruto.

Madara golpea su pelvis contra mi culo rápido, salvaje, mi coño se sigue y sigue contrayendo a su alrededor, que siento que se me está escapando la vida y al mismo tiempo voy renaciendo con cada empuje, se corre dentro de mí, vaciandose hasta la última gota y por unos instantes mi visión se oscurece, y mi alma se funde con la de él, revelando todos sus oscuros secretos, el también observa los míos que a diferencia de los de él, son solo los que yo deseo mostrarle, no deseo que sepa más, aún no.

Obito

Joder, esto era un maldito espectáculo, mi polla me dolía de lo dura que estaba, ver a mi hermano tomarla y unir su alma a la de ella, fue lo más erótico que he visto en mi vida, la sumisión que ella demostró me hizo darme cuenta que ella es perfecta para nosotros, mis hermanos y yo, todos somos diferentes, cada uno tenemos gustos peculiares, y ella se adapta a cada uno, ver las marcas que quedan en su piel pálida, hace que mi control esté por perderse, ella no nos recuerda sin embargo su alma si lo hace y su cuerpo aún más, sabe que nos pertenece, que es nuestra, para siempre "Tómala" grita mi lazo, puedo verlo encerrado aferrado a los barrotes de mi mente, tratando de liberarse y tomar el control pero no puedo permitirlo, no hasta que esté metido en su calor.

Madara se retira de ella dando unos últimos empujes, sus ojos son totalmente negros, perdidos en el control de su lazo, desata a Sakura y mientras lo hace va besando cada uno de los golpes que le dimos, ella solo se deja hacer perdida en el éxtasis de sus orgasmos, camina desnudo con una semi erección hasta el baño y regresa con un paño húmedo y la limpia.

Ella gime dónde el la toca, aún esta muy sensible, después del sexo rudo de mi hermano, yo observo la intimidad de ese acto, pero no dejo de acariciarme, Sakura abre sus ojos, y el negro profundo me recibe.

- He esperado muchos años por volver a tenerlos, y ahora por fin completaremos nuestro vínculo. - La voz ronca de su lazo nos habla. - La última vez, casi lo conseguimos, ahora nadie nos detendrá.

Madara le abre las piernas y la deja expuesta para mí, "hemos de concluir" susurra mi lazo.

Wenas tardes chicas, he volvido 🤣Ya no quiero escribir 😩 Pero finalizare esto, cueste lo que me cueste, x cierto, quiero pedirles un favor, si me pudieran dejar en los comentarios su edad se los agradecería mucho

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Wenas tardes chicas, he volvido 🤣
Ya no quiero escribir 😩 Pero finalizare esto, cueste lo que me cueste, x cierto, quiero pedirles un favor, si me pudieran dejar en los comentarios su edad se los agradecería mucho.

Nuestra (Sakura-Harén Inverso +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora