Nuestra (Sakura-Harén Inverso +18)

XXV

Sakura

Estoy hundiendome más y cada vez más en todas las sensaciones, me siento flotar y navegar a la deriva, y realmente no me importaría quedarme así, me siento tan fuera de mí, y es increíble, vuelvo a la realidad después de que pasen los resultados de un orgasmo devastador, y es cuando Itachi aprovecha a tomarme por las caderas y con una facilidad sorprendente, me gira sobre mi misma, él es veloz y con una fuerza bruta pero me sigue tratando como si fuera lo más frágil que ha tenido en sus manos, por la posición en que estoy me doy cuenta que a estos hermanos les gusta follarme poniéndome de rodillas, no es que me disguste.

Busca mis labios en un beso crudo y posesivo, y me pruebo a mi misma en sus labios, no deja de tomar mis cabellos en un puño con su mano, y joder si eso no me excita aún más, hay algo en el dolor que no sabía que podía llegar a gustarme como me gusta, "Él es nuestro lazo que tiene un pie en la oscuridad" murmura mi propio lazo en mi cabeza, "Debemos impedir que él caiga" no entiendo que quiere decirme, pero supongo que algo que veré al completar la vinculación me hará comprender, se posiciona en la entrada de mi coño y siento la punta gruesa de su polla ir presionando por entrar, jadeo al sentir la presión, a pasado unas semanas desde mi primera vez, aún no me acostumbró al tamaño de estos hermanos, giró mi rostro hasta encontrar sus ojos, que son dos pozos negros sin fondo, pero se que sigue siendo Itachi, mi Itachi.

- Joder - Gruñe, muerde mi cuello y siento mis paredes contraerse alrededor de su polla, gimo y me retuerso de bajo de él, cada que estoy con uno de ellos me llevan al límite, cuando logra entrar completamente siento el poder del vínculo uniendo nuestras almas como una máquina de costuras, que va cosiendo nuestros lazos.

Itachi no se detiene, comienza a embestirme como un animal, cuando me escucha gritar se detiene y comprueba que este bien, pero se da cuenta que mis gritos no son de dolor, si no de placer, placer en estado puro, no suelta mi cabello, una mano me sujeta por el cabello y la otra acaricia mis tetas, apretando, masajeando y pellizcando mis pezones, los ruidos de nuestra unión son tan ruidosos que es vergonzoso lo mojada que estoy.

- Itachi, bésame - Ordenó, él no lo duda, introduce su lengua en mi boca y toma todo de mí.

- Sakura, mi Sakura, años para volvernos a encontrar - Es su lazo el que me hablá pero se que el también lo siente.

Baja su mano a mi clítoris y vuelve a masajearlo, mi cabeza da vueltas, esto... Es demasiado, gimo y muevo mis caderas al compás de sus embestidas, golpea mis nalgas y mi sexo se contrae, maldita sea, no sé cuánto aguantaré.

Nuestro lazo termina de unirse y pierdo la conciencia...

Nuevamente estoy en ese lugar donde todo es blanco, las imágenes de su vida pasan frente a mí como una película, ahora entiendo por qué mi lazo me decía que tiene un pie en el lado oscuro, hay mucho odio y resentimiento, floto hasta llegar a una imagen de él, sus ojos son aún más negros como el carbón, de sus manos sale fuego en formas de serpientes que se lanzan por sus enemigos y los consume desde adentro, hay mucha sangre y cuerpos incinerados, pero Itachi tiene una sonrisa sádica e imperturbable, hay sangre salpicada en su rostro y él parece extasiado por todas esas escenas de muertes y de destrucción, un escalofrío recorre mi cuerpo ante tal muestra de falta de amor por la vida, pero si pasión por acabar con ella.

La escena cambia y me muestran a un Itachi pequeño, observando a sus padres, observando como van perdiendo las ganas de luchar, por vivir, por salir adelante por ellos.

Salgo de ahí, y me encuentro que estoy encima de él, ambos salimos de aquel infierno que es nuestro pasado y regresamos al presente, nuestras pechos están agitados y ambos respiramos con dificultad, su mirada es aguda, y la mía está llena de cautela, no se que tanto vio, y espero que haya sido poco, trate de reforzar mis defensas lo más que pude, nuestra piel está pegajosa por el sudor, siento su semen escurrirse por mis piernas y no puedo evitar sonrojarme, él sonríe sabiendo mi vergüenza, no dudo en golpearle el hombro y devolverle la sonrisa.

Lo estoy montando, no se en que momento cambiamos de posición, pero aún está duro dentro de mí, sale y vuelve a entrar y ambos jadeamos, Dios, es magnífico, todo lo que siento, lo que él siente, ambos sentimos todo y más multiplicado, se levanta conmigo en sus brazos, y entramos al agua nuevamente, no hablamos, no sé si debería sentirme bien o preocupada de que no me pregunte nada de mi vida.

Sasuke llega poco despues y sin decir nada se mete al agua, me da un beso posesivo e introduce su lengua en mi boca, pero Itachi parece tranquilo, al contrario, sus ojos nuevamente son rojos.

- ¿Dime Sakura, estás lista para tu primera compartida? - ¡Que me jodan!, había oído hablar de las compartidas y realmente no había pensado en eso mucho, por qué no pensaba vincularme, pero antes mi plan era que si algún día me llegará a vincular con todos mis lazos, a cada uno le asignaría un día para follar, sí así con uno me cuesta, no se que pasara con otro más o con todos al mismo tiempo, probablemente seré la primera mujer en morir por culpa del sexo, escucho sus risas, porque mi cara delata lo que estoy pensando y sobre todo, ellos saben lo que pienso.

- ¿Que? Es la verdad - Se siguen riendo y lo único que puedo hacer es mirar sus majestuosos cuerpos desnudos, como esos músculos están perfectamente cincelados por los dioses, estoy tentada a morderles el abdomen solo para ver si saben a chocolate, levanto mis ojos y ellos se miran entre sí y rompen a reír, por dios, necesito reforzar mi mente o sabrán cada cosa que pienso y es demasiado vergonzoso, pero... Verlos reír es maravilloso, es como si el sol saliera después de un crudo invierno.

Avanzo hasta ellos y me pongo en medio, le doy la espalda a Itachi y me enfoco en Sasuke, está vez empezaré con él, está noche será para ellos dos...

😮‍💨 Ahora sí, a ver cuándo regreso con otra actualización 🥺