Capitulo 9: Siete Meses

58 7 20
                                    

Lucifer se encuentra acariciando a Umbra, el cual ha crecido bastante en ese tiempo, ya qué cuando él se encuentra parado, ese animal le llega al hombro.

Suspira, ha estado mejor respecto a lo qué siente, no lo niega, pero aún sigue teniendo algunas pesadillas, no tantas como al principio, además de qué aún conserva esas ganas de lastimarse, lo cual no puede evitar hacérselo, ya qué es un mal hábito qué ha adquirido, pero espera que en algún momento lo pueda dejar de hacer.

Suspira un poco, tiene siete meses y su vientre ha crecido bien, se siente un poco feliz por eso; piensa en esa vida que crece dentro suyo, por lo cual sus labios se curvan en una sonrisa triste ya qué no quiere qué los primeros recuerdos qué obtenga ese bebé, sean viéndolo lastimarse ni qué sus hermanos lo traten mal por ser producto de una violación, no le gustaría para nada porque sabe qué ese pequeño sufriría de esa manera, por lo cual se podría volver alguien cruel y destructivo en algún futuro, además de qué si hereda los poderes de Dios... Tiene que evitar qué se vuelva malo.

—Mamá —escuchó como se alargaba la "á", sabe qué cuando Belcebú hace aquello, es para llamar su atención.

—Dime.

—¿Vamos a pasear? —lo ve, por lo cual logra apreciar como le hace ojos de cachorro— ¿Si?

Se puso a pensar sobre aquel tema, si sale, puede hacerle bien para distraerse y no querer lastimarse, además de qué así puede conocer otros lugares del infierno, por lo qué podría ver si hay otro tipo de vegetación y animales por el lugar.

—Está bien —suspira después de darle aquella respuesta.

Se levanta con cuidado, además de qué esa decisión también es para consentir al omega menor y qué así puedan hacer cosas productivas y pasar tiempo juntos. Se toman de las manos, salen de la cueva junto a Umbra y empiezan a caminar con calma, él solamente se deja guiar por Belcebú, yendo por un camino en donde la tierra esta movida, dando la perspectiva qué por ese lugar deben ir. Sonríe un poco porqué ve como Umbra esta en guardia para protegerlos mientras los sigue, se pregunta si aún seguirá siendo aquel animal qué se la pasaba jugando como si no hubiera un mañana, esperaba qué sí.

Esa paz sabe qué no le durará mucho por lo qué ha pasado recientemente gracias a lo qué dijeron los menores cuando pudo sacarles información y lo qué supo qué han dicho sus subordinados, por eso lo sabe bastante bien; suspira, aunque le dijeron qué se mantuviera en calma, qué ellos se encargarían de todo si es qué en algún momento se llegarán a enfrentar a más ángeles, si es que llegarán a aparecer nuevamente en el infierno, y por lo que se han dado cuenta gracias a las cosas dichas, pareciera qué esos seres del cielo lo hacen por su propia voluntad.

Traga saliva, aunque sus hermanos le hallan dicho qué debe estar en paz y él sabe qué no debe alterarse, no puede estar tranquilo, tiene terror del porqué hacen eso los del cielo, ¿como no se dan cuenta de la verdadera naturaleza de Dios? ¿Porqué lo ven a ellos como los malos?

Suspira negando un poco, intentando disipar esos pensamientos, además esta otro tema, más ángeles caídos han llegado al infierno por distintos motivos, aveces junto a Belfegor han encontrado a alguno cuando salen a caminar un poco por su pedido de ver algo más del infierno después de escuchar las cosas que le cuenta Belcebú, claramente él no se acerca a hablarle a los nuevos, ya qué no se siente listo para hablar con "desconocidos", su cuerpo no para de temblar y no poder reaccionar bien ante las nuevas presencias.

—¡Llegamos!

Sale de sus pensamientos al oír aquel gritó, viendo finalmente lo qué tiene por delante, lo cual es un campo completamente rodeado por flores rojas, las cuales no recuerda haber visto antes o siquiera el olor qué desprenden, pero por algún motivo le recordaban vagamente a algunos lirios qué estaban en el cielo.

A Su Debido tiempo (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora