𝐍𝐨𝐯𝐚 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫 | 𝐃𝐌

23. Nuevas emociones

Las vacaciones terminaron tan pronto, mientras Harry había sido llevado con los Weasley, Nova se había quedado con los Dursley esperando a que su hermano regresara por ella. Finalmente, preparo ella sola sus cosas y salio de la casa de los Dursley.

—Eso es, al fin te vas —dijo Dudley burlandose,— Tonta, te estoy hablando —se acerco a ella.

—¿Por qué no vas a llorarle a Petunia? —dijo Nova con un tono de voz helado, sus ojos centelleaban con una mezcla de enojo y desprecio.

Dudley retrocedió un paso, sorprendido por el enojo reflejado en los ojos de Nova y la varita que tenía apuntándole. Era la primera vez que la veía tomar una actitud tan firme.

—Tú... tú no te atreverías a...

Nova no le dio oportunidad de terminar la frase. Sabía que lo que estaba a punto de hacer era incorrecto, que usar la magia para amenazar a su primo era inaceptable, pero no pudo evitarlo. La furia que había acumulado durante años en esa casa, la injusticia, el maltrato y la soledad, todo estalló en ese momento.

—¿Qué, Dudley? ¿Tienes miedo de mí ahora? ¿Temes que te haga lo mismo que me has hecho toda la vida? —sus palabras eran crudas y cortantes como cuchillas afiladas.

Dudley se quedó sin habla, paralizado por la situación. Nunca antes había visto a Nova responder de esa manera. La miró con ojos asustados, como si de repente se hubiera dado cuenta de que ella ya no era la niña asustada que solía ser.

Nova aprovechó ese momento de desconcierto para dar media vuelta y alejarse de él. Llegando a la estación todos estaban listos para subir al tren, Nova dejo sus cosas para poder entrar. Cuando se giro para entrar al compartimento chocó con alguien.

—Ten más cuidado —respondió Nova sumergida en su enojo.

—Nova, soy Ron —Nova lo miró y dejo de fruncir el ceño,— ¿No te alegras de verme?

Ron era el único que le había comunicado que Harry estaba en la Madriguera casi de inmediato, deseando que ella pronto estuviera con ellos.

—Claro que sí, solo que no la he pasado muy bien —admitió apenada,— Lo lamento, Ron.

—Te entiendo, le dije a Harry que debíamos ir por ti, pero al parecer Dumbledore fue quien planeo solo llevarlo a él —dijo Ron recordando la plática que había tenido con Harry.

—No es de sorprenderse que a Dumbledore también se le olvide mi propia existencia —se burló Nova, pero Ron no lo tomó con gracia y la miró con cierta tristeza,— Hay que entrar.

Ron asintió ante Nova y ambos continuaron su camino hasta la entrada del tren, Nova alzó la mirada y se encontro con Harry caminando junto a Hermione. 

—¿No piensas hablarme? —escucho preguntar a Harry.

Nova le lanzó una mirada de enojo al ver que estaba indignado por no saludarlo. No tenía intención de hablar con él, no después de lo que había pasado durante su estancia en la casa de los Dursley. La rabia ardía en su interior, pero también una profunda decepción hacia su hermano.

—Deja de comportarte como una niña, Nova. No siempre ibamos a estar juntos, tuve que irme por otras razones y...

Le molestaba que él tratara de justificar su ausencia con excusas vacías. Nova estaba herida y enojada, y no estaba dispuesta a dejar que él se saliera con la suya.

—Te fuiste dejandome con ellos, sin importar que Dudley pudiera repetir su maldita broma.

—Esa vez se salió de control porque eramos unos niños, supera esa etapa —dijo Harry.