Año nuevo II, Capítulo 13.

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Capítulo 13.

Año Nuevo parte 2.
"La relación con Brasil"

Argentina se encontraba en la bañera, había estado ahí durante una hora, sus dedos ya se encontraban arrugados cual pasas de uva. Lo único que escuchaba era la gotera producida por la canilla mal cerrada y en lo único que podía pensar era en el pasado.

Hace un año atrás, exactamente en la primera fiesta del año, Argentina conoció a Brasil. Fue en la fiesta de bienvenida al 2022 cuando México los presentó.

―creeme cuando te digo que ella es una mujer hermosa Argentina― le dijo méxico aquella noche.

Al estar en una fiesta, dificilmente las voces se escuchaban por ello mexico arrastro a una esquina a argentina, por alguna razon tenia ganas de que argentina conociera a Brasil, quizás impulsado por el destino.

―ella vino hoy junto a sus amigas, cuando la veas la vas a reconocer al instante― dijo mexico con los ojos brillantes.

Y fue así, no tardo en que argentina viera a lo lejos a Brasil, ella aquella noche se veia realmente hermosa, las luces reflejaban sus aros de plata y su vertido se reflejaba al compás de la música. Al instante argentina se enamoró de Brasil, aquel amor de argentina había nacido desde la ceguera, ya que por más que la fiesta fuera iluminada por luces de colores y el gloss en los labios de brasil brillarán hasta la distancia, no vislumbraba el alma de aquella chica, el glitter no hacía que se reflejara su interno ser.

 Al principio lo único que podía hacer era verla de lejos, no se animaba a iniciar una conversación con ella, ni si quiera podía pensar en una manera de hacerlo lo cual era extraño, generalmente todas las mujeres estaban a los pies de argentina, pero ella en particular se veía inalcanzable.

Quien podría imaginar que luego de unos meses se harían pareja aquellos dos.

Argentina volvió en sí, vio el reloj que colgaba de la pared del baño, marcaban las 18:32, tendría que apurarse para estar listo para la noche, era año nuevo y había quedado de festejarlo con sus amigos, aunque luego de algunas noches de insomnio y quedarse hasta las 3 de la mañana cuestionando su existencia y su toma de decisiones, había llegado a la conclusión de que aquellos realmente no eran sus amigos, quizás habían sido amigos del viejo argentina pero ahora, el nuevo argentina, no podía confiar en ellos, ni pensar en tener algún vínculo profundo con alguno de sus amigos, solo eran amigos vacíos, de plástico hueco de aparente calidad. Era desolador ya que lo que más necesitaba argentina eran amigos, pero estos no dejaban de hablar de cosas superficiales.

Brasil lo iría a buscar a las 8 en punto en su nuevo auto, sus padres se lo habían comprado como regalo de sus 17. Realmente argentina no quería ir, prefería quedarse con su madre a brindar con champagne y luego ver una película romántica, las películas de este género eran el gusto culposo de argentina, especialmente Orgullo y Prejuicio, La Dama y El Vagabundo entre otras. 

Ya no se sentía cómodo en aquel círculo, no congeniaba con nadie, era como estar desconectado de aquella realidad, no era auténtico con ninguno de aquel círculo, el solo era un fragmento que proyectaba las personalidades de los demás, estaba atado de alguna forma a querer agradarles a todos, no podía darse el lujo de rechazarlos.

―¿a qué hora te viene a buscar Brasil hijo?― preguntó Italia al ver a argentina sentado en un sillón del comedor.

―a las 20:00 en punto―respondió secamente.

―tienes tiempo de arrepentirte y no ir

―¡mama!―reprocho argentina, Italia solo sonrió―no puedo cancelarles ahora…

Eros, Argentina x PerúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora