Eros, Argentina x Perú

Un Encuentro Familiar, Capitulo 18

Capítulo 18.

Bolivia suspiro, lo único que podía hacer era esperar a que perú dejara ese trance de completa desesperación.

―no entiendo cual es el problema―dijo el amigo boliviano suspirando, había tratado de calmar a Perú pero no tuvo éxito― ¿por qué tanto drama? dile que sí, ¿qué esperas?

Bolivia y Perú se encontraban juntos en la casa del primero como semanalmente hacían, Perú le había contado acerca de la propuesta de Uruguay que le había dado hasta el miércoles para que le diga si quiere ser su novio o no, y ese día era miércoles. Tenía exactamente unas pocas horas para que perú diera su respuesta, Perú estaba en una completa crisis que su amigo bolivia no podía llegar a empatizar, y no es por mal amigo, si no que él no lograba entender porque perú demoraba tanto en darle una respuesta a uruguay, no lograba entender el porqué un chico como perú no quisiera estar de novio con una chica tan linda como uruguay, de alguna manera bolivia proyectaba sus propios deseos en Perú lo que hacía que realmente no escuchara el sufrimiento de su amigo.

―mira, hay que racionar la situación, ella te dio hasta el miércoles para que le dijeras si serias su novio oficial, hoy es miércoles y son las...―dijo bolivia mientras revisaba su reloj―son las 20:23, literalmente tienes apenas unas horas para dar tu respuesta, tardaste 3 días y hasta el día de hoy no tienes una respuesta, no puedes seguir estirando el tiempo, ¿qué es lo que te cuenta en decir sí?
―aunque te lo explicara no lo entenderias...
―obviamente no te entiendo, no entiendo como tu desaprovecharias una oportunidad tan grande de estar con una chica como uruguay, ella lo tiene todo en todo sentido, ¿porque no ser su novio?

Perú se quedó sentado sin responder a aquella pregunta, la respuesta le carcomia por dentro, le dolía seguir amando a Argentina, había hecho todo para borrar aquellos sentimientos, pero apesar de sus esfuerzos parecía que con el tiempo sus sentimientos incrementaban, lo amaba cada día más y no podía detener aquel progreso.
estaba deprimido y al mismo tiempo se sentía tan solo, no le había podido contar a nadie sobre lo que realmente sentía, aquello era su secreto más guardado.

―Perú ¿acaso no recuerdas todo el acoso que sufriste a principios de secundaria porque todos pensaban que eras gay? esta es una perfecta oportunidad de demostrarles que no lo eres.

Perú al escuchar lo mencionado por bolivia recordó un poco su pasado, todavía no había llegado a cicatrizar, le seguía doliendo aquellos años de burla y sufrimiento. Perú pensó en lo que dijo su amigo, tenía razón, esa era una perfecta oportunidad para demostrarles que no era gay, el tema en cuestión era que Perú había aceptado que era gay, además estar con Uruguay solo para aparentar era algo que le parecía horrible.

―eres un tonto perú―comentó bolivia.

perú se enojo al escuchar aquel comentario, la ira y el dolor lo consumieron.

―si no me vas a escuchar prefiero irme.
―te estoy escuchando pero no tiene sentido lo que dices.
―¡literalmente no me escuchas, lo único que haces es criticarme! ¡si me escucharas te darías cuenta que realmente no quiero ser el novio de Uruguay! ¡pero en vez de escucharme lo único que haces es meterme presión para que haga lo que se supone que es lo mejor según tu criterio!―dijo Perú a los gritos―... lo único que haces es reflejar tus deseos en mí, tu quieres una novia, yo no.

Bolivia se quedó como piedra, Perú no acostumbraba a levantar la voz con nadie. No supo qué decir, algo de razón tenía perú en sus palabras, pero era muy orgulloso para admitir su equivocación, Perú respiró unos segundo, agarró sus cosas y se marchó, Bolivia quería detenerlo y disculparse con él pero su orgullo lo detenía. Perú salió de aquella casa pensando en lo que había dicho su amigo, directamente iba a la casa de Uruguay para por fin darle un final a la situación tan estresante.
Mientras se dirigía a la casa de Uruguay recordaba los años cuando tenía 13/12 años de edad. Le daban pequeñas puntadas en el pecho cada vez que los fotogramas del pasado cruzaban por su mente, no quería repetir para nada el acoso que sufrió, sabía que si pasaba por lo mismo no podría resistir y llegaría a hacer cosas extremas...
suspiro cuando se encontro al frente de la puerta de la casa de Uruguay, realmente no tenía idea que le iba a decir, quizás improvisaria un poco, pero a la hora de decirle que aceptaba o no su propuesta todavía no estaba seguro cual era su decisión.
Finalmente luego de tanto barullo mental tocó la puerta, lo atendió un señor de aspecto intimidante, era el papá de Uruguay.
Se quedó mirando a Perú unos segundos, este se quedó congelado, no sabía que decir, no se esperaba para nada este encuentro.