Eros, Argentina x Perú

Soy Un Hombre +18, Capítulo 36

Capítulo 36.

Medio día. Verano. Perú se encontraba caminando bajo el sol veraniego en la hora del mediodía ¿porque alguien se someteria a tal tortura? Su madre le había ordenado que vaya a comprar urgentemente unas cosas al supermercado para poder hacer el almuerzo. Como aquel día hacía mucho calor, Perú llevaba puesto ropa ligera, una remera blanca y un pantalón corto de jean, sus mejillas estaban rojas y su paso era lento. Se encontraba volviendo a su casa con la bolsa de compras cuando unos chicos que nunca había visto y más jóvenes que él (como de 13 años) le obstruyeron el camino.

―¿Eres Perú? ¿eres el de la foto?―preguntaron entre risas.

Había algo que Perú nunca haría, y aquello era negar a Argentina. Perú estaba orgulloso de que Argentina fuera su novio y aquel tiempo había podido lentamente superar sus miedos. Ahora no temía que todo el mundo supiera que ellos dos eran pareja, pero cuando te interceptan de esa forma es inesperado y solo te congelas sin saber qué hacer.

―¿y? ¿Te comieron la lengua los ratones? ―dijo otro chico que se encontraba en el grupo. Eran alrededor de cinco.

―yo...

Los chicos se miraban y se reían entre ellos, como si peru fuera algún tipo de atracción de circo, como si de un fenómeno se tratara.

―¿es en serió que tienes un novio hombre?

―si.

Los chicos al escuchar su respuesta se miraron entre ellos y se reían aunque contenían su verdadera risa.

―¿y tú eres un hombre?

―no pareces uno.

Dijeron otros dos. Perú supo en ese instante que tenía que irse de allí, sabía que la intención de aquellos niños solo era molestarlo. Perú no respondió a sus preguntas e intentó seguir caminando en dirección a su casa.

―espera, espera, espera ¿a dónde crees que vas? No respondiste a nuestra pregunta―dijo uno obstruyendole el paso nuevamente.

―no te podemos dejar ir, queremos hablar contigo―dijo otro con una sonrisa en su rostro.

Perú conocía aquella sonrisa, en el pasado la había visto un par de veces. Era aquella típica sonrisa espeluznante. Es irónico, la sonrisa es símbolo de felicidad y amabilidad, pero hay personas que tienen la capacidad de distorsionarla, de cambiar la naturaleza de un gesto, de transformar amabilidad con maldad pura.

Los cinco chicos rodearon a Perú, a pesar de que eran sólo unos niños al ser varios Perú estaba en desventaja. Perú miraba a su alrededor buscando rutas de escape, pero se encontraba solo, todo parecía perdido. Los chicos empezaron a pecharlo y cuando Perú se estaba preparando para una paliza, alguien salió a su rescate.

Uno de los cinco chicos sintió como una piedra golpeó su cabeza, cuando se dio la vuelta para ver quien la había lanzado vio a Canadá con otra piedra en la mano y algunas en sus bolsillos.

―¡dejen de molestarlo!―exclamó.

Los chicos retrocedieron unos pasos al ver que Canadá estaba apuntando para tirar otra piedra.

―no te metas niña, no es tu asunto.

Canadá le tiró una piedra al que había dicho aquello.

―¡¿cuál es tu puto problema Canadá?!

―¡ustedes son el problema! ¡largensen o tiraré otra piedra y esta irá directo a tus bolas!

Los chicos retrocedieron aún más, algunos salieron corriendo, el que amenazó Canadá se quedó mirándolo un rato y se fue con los otros.