Capítulo 7

107 9 0
                                    

El boggart en el ropero.
✦•···················•✦•···················•✦

A Harriet ese día le tocaba Pociones avanzadas, estaba muy nerviosa, el simplemente hecho de tener pociones le ponía nerviosa, no porque no supiera o no pudiera, sino por el aura era pesada, callada y fría. Draco la esperó en el pasillo para ir juntos las masmorras, a Harriet le impresionó. Cuando Harriet preguntaba acerca de su brazo, Draco respondía de forma fría y cortante. Había un silencio incómodo.

-Así que...- dijo Harriet intentando romper esa incomodidad mientras caminaban a las masmorras.- Entraste a pociones avanzadas.

-Sí, mi padre insistió, Snape es mi padrino entonces tuvo influencia.- dijo Draco sin importancia.

-Ya veo.- de pronto recordó - Hablando de padres, ¿Sabes si la madre de Parkinson está en El Consejo Estudiantil?

-Claro que lo está. Es realmente fastidiosa, supongo que es hereditario. ¿Ella y yo? ¿Casandonos?- dijo Malfoy con una cara de terror.- No sé cuál es el precio para soportarla, por más dinero que tenga. Casi todos los padres sangre pura están ahí.

-Excepto la señora Weasley.- añadió Harriet.

-Excepto la señora Weasley.- Dijo Draco.- Entre ellos se odian, los de El Consejo, compiten por quién tiene más que quién, hacen donativos como rivalidad o para pagar las consecuencias de uno de sus hijos...

-¿Cómo estás, Draco? -dijo Pansy Parkinson, sonriendo como una tonta cuando llegaron a las masmorras, empujó a Harriet "sutilmente" con el codo en sus costillas. - ¿Te duele mucho? He estado muy preocupada por ti.

-Siéntate -le dijo el profesor Snape bruscamente. -Buenos días, jóvenes, no puedo creer que están en la clase más competitiva y se están quedando dormidos, que desepción.- el aula estaba en un profundo silencio, ni un grillo se atrevería a grillar mientras el profesor Snape daba la clase.- Empezaremos con algo... Sencillo. Conforme vayamos avanzando muchos se irán, no esperen quedarse hasta sexto aquí. Tienen suerte de estar aquí, siéntase afortunados. - su voz deba escalofríos, fría, lenta y calculadora. - Comenzaremos con el brebaje parlanchín, como es conocido coloquialmente, o brebaje bocazas, es una poción que causa que el bebedor pierda temporalmente la capacidad de controlar las palabras que pronuncia, haciendo que hable sin sentido. Como muchos de ustedes. - dió una mirada analítica al aula y prosiguió - Está conformada por varas de valeriana, Acónito y Díctamo.

Se produjo un movimiento en el aula, todos comenzaban a escribir sobre el pergamino. Tuvieron una larga clase acerca de la historia de esa poción. Parkinson hacía preguntas tontas y obvias para que Draco se las respondiera, pero solo la hacía quedar como una tonta por Snape, al ver que sus esfuerzos eran en vano, se acercó a Harriet.

-¿Has visto últimamente a tu amigote Hagrid? -les preguntó en voz baja.

-¿Y a ti que te importa ?-dijo Harriet entrecortadamente, sin levantar la vista de su poción.

-Me temo que no durará mucho como profesor -comentó Parkinson, haciendo como que le daba pena-. A mi madre no le ha hecho mucha gracia que mi futuro prometido...

-Continúa hablando, Parkinson, y se lo diré a Draco-le gruñó Harriet.

-¿Ay, pero qué le vas a decir?- dijo fingiendo lastima.- A mi madre no le gustó y le informó a su padre. Se ha quejado al Consejo Estudiantil y al ministro de Magia. Mi madre tiene mucha influencia, no sé si lo sabes. -Exhaló un suspiro prolongado pero fingido.

-¿Por qué eres tan insistente? -dijo Harriet, cortándole sin querer más grandes los trozos de varita de valeriana, ya que la mano le temblaba de furia-. ¿Para ver si consigues que echen a Hagrid?

Harriet Potter: Saga completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora