Capítulo 6

134 10 5
                                    

Posos de té y garras de hipogrifo

✦•···················•✦•···················•✦

Cuando Harriet, Ron y Hermione entraron en el Gran Comedor para desayunar al día siguiente, lo primero que vieron fue a Pansy Parkinson, que entretenía a un grupo de gente de Slytherin con una historia muy divertida. Al pasar por su lado, Pansy hizo una parodia de desmayo, coreado por una carcajada general.

—¡Eh, Potter! —gritó Pansy Parkinson—. ¡Potter! ¡Que vienen los dementores, Potter! ¡Uuuuuuuuuh!

—Te ves tan infantil, Parkinson.— dijo Draco pasando a su lado. Pansy lo miró con impresión y adolorida por sus palabras, pero después le dirigió una mirada de completo odio a Harriet, la cual le sonrió tímidamente.

Harriet se dejó caer sobre un asiento de la mesa de Gryffindor, junto a George Weasley.

—Los nuevos horarios —anunció George, pasándolos—. ¿Qué te ocurre, Harriet?

—Slytherin —contestó Ron, sentándose al otro lado de George y echando una mirada desafiante a la mesa de Slytherin.

George alzó la vista y vio que en aquel momento Malfoy reía de algo con los demás chicos.

—Ese imbécil —dijo sin alterarse— no estaba tan gallito ayer por la noche, cuando los dementores se acercaron a la parte del tren en que estábamos. Vino corriendo a nuestro compartimento, ¿verdad, Fred?

—Casi se hace encima —dijo Fred, mirando con desprecio a Malfoy.

—¿Malfoy?— preguntó Harriet levantando la vista.

—Yo tampoco estaba muy contento —reconoció George—. Son horribles esos dementores…

—Se te hiela la sangre, ¿verdad? —dijo Fred.

—Pero no se desmayan—dijo Harriet en voz baja.

—No le des más vueltas, Harriet —dijo George—. Mi padre tuvo que ir una vez a Azkaban, ¿verdad, Ron?, y dijo que era el lugar más horrible en que había estado. Regresó débil y tembloroso… Los dementores absorben la alegría del lugar en que están. La mayoría de los presos se vuelven locos allí.

—De cualquier modo, veremos lo contento que se pone Malfoy después del primer partido de quidditch —dijo Fred—. Gryffindor contra Slytherin, primer partido de la temporada, ¿lo recuerdan?

—Bien, hoy comenzamos asignaturas nuevas —dijo alegremente Hermione.

—Hermione —dijo Ron frunciendo el entrecejo y mirando detrás de ella—, se han confundido con tu horario. Mira, te han apuntado para unas diez asignaturas al día.

—No, tonto.— rio— yo las decidí y quedé con todas—sonrió y mostró su horario con orgullo.

—Pero mira —dijo Ron riendo—, ¿ves la mañana de hoy? A las nueve Adivinación y Estudios Muggles y… —Ron se acercó más al horario, sin podérselo creer—, mira, Aritmancia, todo a las nueve. Sé que eres muy buena estudiante, Hermione, pero no hay nadie capaz de tanto. ¿Cómo vas a estar en tres clases a la vez?

—No seas tonto —dijo Hermione bruscamente—, por supuesto que no voy a estar en tres clases a la vez.

—Bueno, entonces…

—Pásame la mermelada —le pidió Hermione.

—Pero…

—¿Y a ti qué te importa si mi horario está un poco apretado, Ron? —dijo Hermione—. Lo tengo todo arreglado.

Harriet Potter: Saga completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora